Tras siete ediciones este año, en los Premios Quirino de la Animación Iberoamericana, por primera vez hay paridad entre hombres y mujeres en los finalistas a las dos categorías más importantes, las de mejor largometraje y mejor cortometraje. Y es que, el sector de la animación es, desde hace unos años, un referente en la lucha por la igualdad. Hemos querido hablar sobre este tema con la productora, directora de cine de animación y fundadora del estudio valenciano Wise Blue Studios, Nathalie Martinez, que también es presidenta de Diboos, la federación de productores de animación y VFX. La primera mujer en ocupar este cargo en los 17 años de historia de la entidad.
Para empezar, preguntamos a Nathalie si esta paridad en las nominaciones es un hecho puntual o algo que se va a convertir en habitual: “Quiero pensar, y tengo muchísimas esperanzas, que esto se va a repetir en los próximos años hasta convertirse en la norma. Tanto las asociaciones que impulsamos esta paridad, como las políticas de igualdad que se están promoviendo, están consiguiendo grandes avances para llegar a esa igualdad”.
“Ha sido un camino muy largo, sobre todo para las que llevamos más años en esto –continúa Nathalie-. Pero gracias a nuestro esfuerzo creo que las jóvenes que empiezan ahora han podido desarrollar sus proyectos sintiéndose arropadas y han tenido unos referentes que en nuestra época no teníamos. Hay una generación de directoras, productoras… que empezaron hace ocho o diez años, que han sabido aprovechar esas oportunidades y ya las estamos viendo brillar y competir de igual a igual con sus compañeros”.
“Y esa competencia es maravillosa –añade Nathalie-, porque los proyectos son muchísimo más diversos y eso nos está enriqueciendo a todos. Yo siempre he pensado que el tema de la igualdad tenemos que explicarlo bien, que a veces lo hemos hecho mal. Porque no es quítate tú para ponerme yo, sino que se trata de que convivamos hombres y mujeres, porque así somos mejores, más diversos y más enriquecedores. Y eso, a mí, me hace sonreír”.
“En la Industria de la Animación no hay brecha salarial”
Hace seis años (2018), nacía MIA (Mujeres en la Industria de la Animación) para defender los intereses de las mujeres en esta industria. “Como presidenta de Diboos yo creo mucho en los movimientos asociativos y el poder de la unión –asegura Nathalie-. Yo fui una de las promotoras de MIA, aunque luego la vida me llevó por otro camino, que en realidad es paralelo. Pero MIA surgió en un momento en el que había un gran vacio, porque nadie se preocupaba de la situación de las mujeres en la industria de la animación”.
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“Afortunadamente –añade-, en estos seis años se han dado muchos pasos hacia adelante. Y no solo con MIA. En Diboos, en el Festival de Málaga de este año, anunciamos el Decálogo de Buenas Prácticas en Igualdad y Participación de la Mujer en la Industria de la Animación, que firmaron muchas empresas del sector. Este decálogo desgranaba una serie de objetivos e iniciativas para esa integración real, y en igualdad de condiciones, de la mujer en el sector”.
“Además –continúa-, aunque todavía quedan muchas cosas que mejorar, llevamos tiempo haciendo otras cosas a las que no damos la visibilidad necesaria. Porque tenemos muchas cosas buenas que ya hacemos de manera muy orgánica. Y creo que, en ese sentido, podemos ser un ejemplo para otros sectores. Por ejemplo, una de las cosas que ponemos en el decálogo, y que ya se hace, son los reclutamientos ciegos. Nosotros vemos los perfiles y trabajos de los artistas y nos da lo mismo su género, nosotros vamos al talento”.
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“Gracias a eso –remarca-, en este sector no hay diferencias salariales entre hombres y mujeres. No hay brecha de género. Y eso es que los sueldos se pagan por categorías. Y siempre cobrarás lo mismo que tu compañera o compañero de categoría. Y en estos últimos años también estamos promocionando mucho la presencia de las mujeres en todos los ámbitos, porque esa convivencia da resultados mucho más interesantes”.
“Te puedo dar una primicia y es que, desde que yo soy presidenta de Diboos me he estado coordinando con la presidenta de MIA, Verónica Buide, y hemos firmado un convenio para la colaboración de ambas organizaciones, que es el primero que se hace de este tipo”.
“Peleamos para que las mujeres tengan cargos de responsabilidad”
Otra cosa de la que se quejaban las creadoras de MIA es que las mujeres casi no tenían puestos de responsabilidad en las empresas de animación. “En ese aspecto también hemos mejorado mucho –nos comenta Nathalie-. Hace seis años las mujeres eran el 30% por ciento de las empleadas del sector, pero la mayor parte estaban en los equipos de arte y producción y, generalmente, sin cargos de responsabilidad”.
“Y nuestra lucha en estos años ha sido que las mujeres puedan tener las mismas oportunidades que sus compañeros de equipo. Y que eso incluya que puedan ocupar también esos cargos de responsabilidad. Porque cuando los hombres tomaban las decisiones, los proyectos de animación tenían un sesgo masculino. Y los espectadores de los dibujos infantiles, por ejemplo, son niñas y niños, por lo que solo les ofrecíamos una parte de la visión general”.
“Siempre insistimos en que la animación, no es solo para niños –continúa-, pero es cierto que la mayoría de producciones son para ellos y son la puerta de entrada de las niñas y niños a la cultura audiovisual. Por eso es fundamental que la cultura audiovisual española sea muy diversa. y, para eso necesitamos a mujeres en cargos de responsabilidad. Por eso es tan importante, como comentábamos que en estos premios Quirino, que ya hace tiempo que tienen jurados paritarios, este año haya habido también esa paridad en los nominados”.
Actualmente el número de mujeres en la industria ronda el 38% y su presencia en puestos de responsabilidad ha crecido mucho, pero todavía no es suficiente. Son datos aproximados, porque MIA está terminando un informe y espero que muy pronto podamos conocer los porcentajes exactos”.
“Sigue habiendo estereotipos en la animación”
Uno de los objetivos que se propuso MIA, cuando se creó, fue acabar con los estereotipos femeninos en la animación. Pero en eso, no hemos avanzado tanto como quisiéramos, como nos comenta Nathalie: “Todavía los hay porque, aunque en España hemos avanzado muchísimo en ese sentido, en otros países no están tan avanzados como aquí. La animación es muy universal y hay todo tipo de países, regiones, culturas… y hay sitios donde no se está poniendo tanto ahínco en ese tema”.
“Muchos de esos estereotipos persisten porque quienes llevamos la narrativa somos gente de otra época –añade-, pero las jóvenes creadoras y creadores están viendo los beneficios de trabajar conjuntamente y están aplicando ese borrado de estereotipos. Y la diversidad empieza a ser algo natural en ellos. Estos procesos suelen ser muy largos, porque conllevan cambios a nivel social, pero ahora estamos viendo las primeras semillas germinar. Y por eso creo que el futuro es muy esperanzador en el tema de acabar con los estereotipos”.
La transformación de los personajes femeninos en la animación
Sus proyectos
Aunque sus obligaciones como Presidenta de Diboos no le dejan tiempo para sus proyectos personales, Nathalie asegura que: “Ahora es un momento delicado porque hay mucho movimiento en el sector audiovisual y se están negociando cosas tan importantes como la Ley del Cine, que el Ministro de Cultura quiere promover y acelerar. Y es un trabajo de mucho desgaste. Pero mi intención es seguir produciendo y dirigiendo. En los últimos cinco años he dirigido dos series de preescolar y ahora estoy preparando mi primer largometraje como directora”.
Nathalie produjo el cortometraje Blue & Malone. Casos Imposibles, que ganó el Goya en 2021: “Llevo muchos años produciendo películas y cortometrajes –añade-, pero en el fondo yo tenía una directora encerrada dentro de mí y por fin la han dejado salir. Y quiero hacer realidad una película en la que llevo trabajando muchísimos años. Una película protagonizada por Mibots, que son unos robotitos muy cuquis, de los que ya hicimos una miniserie. La película sería del género coming-on-age, ese momento en el que se deja de ser un niño para convertirte en un adolescente”.
“Es la historia de una familia de robots bastante anómala y su relación con una familia humana, concretamente con una niña. Y vemos cómo aprenden a construir esas relaciones afectivas entre ellos. Es una historia de amistad, de aventuras, de comedia… muy divertida, pero también con un poso reflexivo, que creo que deben tener estas historias”.
“Ya tenemos el guion acabado y nos falta cerrar la financiación, que es lo más complicado. Pero es un proyecto que está gustando mucho y también estamos terminando un videojuego para móvil que saldrá antes que la peli. Estamos construyendo todo un universo alrededor de los Mibots y estoy deseando ver cómo evoluciona y la respuesta de la audiencia” -concluye Nathalie-.
Los protagonistas de 'Mibots'