Tener dónde vivir en Euskadi sigue siendo a día de hoy un problema para muchos vascos y no sería de extrañar que, de cara a las elecciones vascas del próximo 21 de abril, tuvieran muy en cuenta las propuestas de los partidos en materia de vivienda. Con los precios de la compra y del alquiler disparados, y con miles de jóvenes sin poder emanciparse, los partidos han situado esta problemática en el centro de la campaña.
Actualmente, la vivienda ocupa uno de los primeros puestos en las preocupaciones de los ciudadanos de Euskadi. Lo dice el Sociómetro Vasco del pasado mes de febrero, que sitúa esta problemática en tercera posición por detrás del empleo y de la sanidad. Un 25% de vascos cree de hecho que la vivienda es el principal problema de Euskadi, frente al 10% que eran en 2021. También el CIS preelectoral coloca la vivienda como el quinto problema (con un 7,3%) para los vascos tras la sanidad, el paro, los problemas políticos y la crisis económica.
Aunque la cifra ha descendido en los últimos dos años, todavía hay 114.396 personas que viven en casa de familiares o tutores y quieren emanciparse, o que están emancipadas pero desean vivir en una residencia independiente con su pareja o grupo familiar, pero no pueden, según la última encuesta sobre necesidad y demanda del Observatorio Vasco de la Vivienda de 2023. Para ellas, harían falta un total de 103.331 viviendas. Álava es la única provincia donde desciende la necesidad de vivienda para estas personas, mientras que aumenta en Gipuzkoa y Bizkaia.
Suben los precios y bajan las compras y los contratos de alquiler
Uno de los principales problemas es el precio de la compra y del alquiler. El precio medio por metro cuadrado se sitúa en 2.960 euros (3.295 si se trata de vivienda nueva), según los últimos datos del Observatorio de la Vivienda del Gobierno vasco, correspondientes al cuarto trimestre de 2023. Esto supone un incremento interanual de los precios del 3,1%. Con todo, el precio medio de la vivienda está en 246.990 euros. Ante estos datos, el número de compraventas ha descendido un 13,5% respecto al año anterior.
Los precios se disparan si se observa la vivienda en San Sebastián, la ciudad más cara de España con 5.378 euros por metro cuadrado, quedando por delante de Madrid y Barcelona.
Respecto al alquiler, el precio de la renta media está en 783,5 euros al mes, según la última estadística del mercado de alquiler (EMAL) que elabora el Gobierno Vasco correspondiente al tercer trimestre de 2023. Se trata de una subida del 4,5% respecto al año anterior. Además, los contratos nuevos de alquiler han bajado en un año, pasando de 5.311 en el tercer trimestre de 2022 a 4.369 en el mismo periodo de 2023 (942 menos).
Y es que la oferta del alquiler preocupa a los principales partidos, que proponen incrementar las viviendas destinadas para ello cuando actualmente, en toda Euskadi, hay 130.688 en alquiler, de las cuales la mayoría (el 78%) son de mercado libre, el 16% alquileres sociales y el 5,5% de Protección Oficial.
Iniciativas frente a la escalada de precios y choques políticos
La política ha tratado de atajar en varias ocasiones esta problemática, no sin enfrentamiento entre partidos. En 2015, el Parlamento regional aprobó la Ley Vasca de Vivienda, pionera en plantear el “derecho subjetivo a la vivienda”, es decir, el derecho a ocupar una vivienda digna y adecuada. Lo hizo con los votos de EH Bildu, el PSE-EE y UPyD, partidos en la oposición, frente al rechazo frontal del gobierno del PNV, que la tildó de “inviable” y alertó de un “efecto llamada masivo”, y también del PP, que la recurrió ante el Tribunal Constitucional.
Sin embargo, no ha sido hasta octubre de 2023, con la Consejería de Vivienda en manos del PSE-EE, cuando el Gobierno Vasco aprobó el decreto del derecho subjetivo a la vivienda, reconociendo a un total de 8.200 personas con este derecho, al que podrían incorporarse posteriormente los perceptores de otras ayudas a la vivienda que desaparecen, como las ayudas de emergencia social (AES) o las prestación complementaria de vivienda (PVV) vinculada a la Renta de Garantía de ingresos (RGI).
Entretanto, en 2023 el Congreso sacó adelante la Ley Estatal de Vivienda impulsada por el Gobierno de Pedro Sánchez para poner límite a los precios del alquiler en zonas tensionadas. Una norma pactada con ERC y EH Bildu que contó también con la oposición frontal del PNV, que considera que invade competencias autonómicas. Y esta tensión se trasladó al ámbito vasco entre los ‘jeltzales’, que llegaron a recurrir varios de los artículos de la norma al Tribunal Constitucional, y su socio de gobierno, el PSE. Los socialistas, los ‘abertzales’ y los morados han acusado a los nacionalistas vascos de escudarse en la invasión competencial para esconder su rechazo real a topar los precios del alquiler.
A raíz de esa norma, el Observatorio vasco de la Vivienda identificó un total de 41 municipios susceptibles de ser declarados tensionados de los 241 que hay en Euskadi. Para ello, tiene en cuenta dos criterios: que la carga media del coste de la hipoteca o del alquiler supere el 30% del presupuesto, y que el precio de la compra o el alquiler haya experimentado en los últimos cinco años un porcentaje de crecimiento acumulado de al menos un 3% más que el índice de precios de consumo en Euskadi. Ante estos datos, el Departamento vasco de Vivienda remitió en diciembre una carta a dichos consistorios para poder ser declarados como zonas tensionadas, iniciando así los trámites para poner tope a los precios de los alquileres.
Las propuestas de los partidos
La vivienda se ha convertido en uno de los principales carros de combate que Eh Bildu esgrime contra el PNV en su pugna por la victoria en estas elecciones, cuando las encuestas les dan un empate técnico. Mientras los primeros piden impulsar el parque público del alquiler y atacan a los nacionalistas vascos por falta de “voluntad política para hacer efectivo el derecho a la vivienda", los ‘jeltzales’ contraatacan acusando a los ‘abertzales’ de “querer quitar las deducciones para compra de vivienda habitual". También el PSE-EE, en cuya mano está la llave de la gobernabilidad según las encuestas, saca pecho de sus medidas al frente de la Consejería de Vivienda y critica que el PNV haya “votado en contra de todas las leyes por un tema ideológico". Y en esta contienda, entran también el resto de partidos, con críticas sobre todo al gobierno de coalición.
Estas son las principales propuestas:
PNV
- Línea de avales de hasta 200 millones de euros en la legislatura, exclusiva para jóvenes, para conseguir que las entidades financieras puedan financiar al 100% del precio de compra de una primera vivienda. Línea de avales que cubra las fianzas de los contratos de arrendamiento.
- Diseñar un plan de construcción o habilitación de 7.000 viviendas en régimen de alquiler hasta 2030, reservando el 40% a personas menores de 36 años.
- Mantener deducciones fiscales para la compra y alquiler de vivienda habitual, incluida la cuenta vivienda. Deducciones fiscales a los arrendadores cuando los arrendatarios sean menores de 35 años, mayores de 65 o personas con bajos ingresos.
- Ampliar el rango de ingresos máximos que permiten acceder a una vivienda de protección pública.
- Colaboración interinstitucional para adquirir inmuebles y/o viviendas en desuso en cascos históricos de determinados municipios para reformarlas e incluirlas en el parque público de alquiler haciendo frente a la gentrificación.
EH Bildu
- Limitar los precios del alquiler: designar zonas tensionadas, desarrollar un índice de precios de referencia y mecanismos propios de control.
- Reforma fiscal, en coordinación con las Diputaciones Forales, que incentive los alquileres asequibles y penalice los caros.
- Destinar al alquiler al menos la mitad de las promociones de vivienda de protección pública.
- Ley de Segunda Oportunidad para evitar desahucios.
- Revisión parcial de la Ley del Suelo de 2006 para incentivar rehabilitaciones y penalizar operaciones especulativas.
PSE-EE
- Promover 5.000 nuevas viviendas en alquiler social y asequible.
- Destinar 200 millones de euros la compra pública de vivienda para sumar 1.500 viviendas al parque público en la legislatura.
- Incrementar la reserva para jóvenes del 40% al 50% en las adjudicaciones de las viviendas en alquiler.
- Mayores bonificaciones a los propietarios que mantengan las rentas por debajo de los índices de la estadística del mercado del alquiler.
- Desarrollar la Ley de Vivienda mediante la declaración de zonas de mercado residencial tensionado.
Elkarrekin Podemos
- Aplicar la Ley de Vivienda estatal "en todos los términos que sean necesarios".
- Ampliar al menos en un 25% el parque de vivienda pública en alquiler asequible.
- Establecer un Índice de Referencia de Precios de Alquiler que sea adoptado por las administraciones públicas.
- Creación de una Oficina de Intermediación para prevenir desahucios.
- Prohibición de la venta de viviendas públicas.
PP
- Modificar la actual Ley de Vivienda Vasca y la Ley del Suelo. Impulsar la construcción de viviendas de protección oficial en municipios con alta demanda. Promover la liberalización y venta de suelo para la promoción de vivienda de diferentes tipologías.
- Apostar por el alquiler con opción a compra descontando hasta el 80% de la renta mensual abonada en el momento de ejercer la compra a los diez años.
- Aumentar el importe global de la deducción por compra de vivienda y vincularlo al fomento de la natalidad, pasando de 36.000 euros a 37.000 en el caso de un descendiente, 40.000 en caso de dos y 43.000 en el caso de tres o más.
- Aumentar del 20 al 25% la deducción en IRPF a los rendimientos inmobiliarios que procedan del alquiler de una vivienda que se destine por el inquilino a vivienda habitual.
- Sistema de avales bancarios que permitan obtener préstamos de hasta el 100% en la compra de primera vivienda habitual para menores de 40 años, así como para familias numerosas o monoparentales.
Vox
- Exigir al Gobierno central la derogación de la Ley de Vivienda y oposición a la regulación del alquiler en zonas tensionadas.
- Impulso a la captación de viviendas vacías para destinarlas al alquiler social.
- Impulso a la liberalización del suelo que no esté especialmente protegido por motivos de interés público convenientemente justificados.
- Bonificación en cuota del impuesto de transmisiones patrimoniales del 100% en la compra de una vivienda habitual de hasta 300.000 euros y bonificaciones fiscales para el alquiler.
- Rebajar los tributos y cargas para la construcción de viviendas.
Sumar
- Transformar Etxebide en el Servicio Vasco de Vivienda, ampliando su cartera de servicios y coordinando políticas públicas.
- Creación de una Red de Oficinas de Vivienda que funcione como ventanilla única para las políticas de vivienda y rehabilitación.
- Promover un parque público de vivienda en alquiler que alcance el 20% de todas las viviendas de Euskadi para 2040, incorporando 2.000 nuevos alojamientos de alquiler social para jóvenes, y establecer gravámenes fiscales progresivos para los grandes tenedores que no destinen al menos el 25% de sus viviendas al alquiler asequible.
- Garantizar que el 30% de las viviendas de las nuevas promociones inmobiliarias y renovaciones urbanas integrales se destinen a vivienda de protección oficial o alquiler social, y rehabilitar colegios obsoletos, oficinas, edificios patrimoniales, etc. para reconvertidos en viviendas de alquiler social.
- Aplicar el Índice de Precios de Referencia para Alquileres en los municipios tensionados.
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