Durante dos años y medio, Víctor de Aldama, el presunto comisionista del ‘caso Koldo’, compartió directiva del equipo de fútbol de Zamora con Didia Liedo, su expresidenta. En esa Junta se realizó la transición del club a sociedad anónima deportiva (SAD), debido a las deudas que arrastraba el conjunto.
Desde que se ha destapado la trama de compraventa de mascarillas, Liedo cuenta ahora en exclusiva para Radio Nacional de España (RNE) cómo la llegada de De Aldama al Zamora C.F. se habría negociado a sus espaldas y cómo nada más entrar cambiaron cerraduras y contraseñas. A la vez, veía que el club, que antes de la compra estaba a punto de desaparecer, tomaba un rumbo que, reconoce, le ha hecho sentir culpable: "Se me negó información. Nos dejaron fuera de absolutamente todo. Te da rabia porque has querido hacer las cosas bien y me empiezo a dar cuenta de que me he equivocado. Te sientes responsable".
Obligados a vender el Zamora C. F.
En mayo de 2018, De Aldama desembarca en la directiva del club de fútbol de Zamora junto con su socio Alfredo Ruiz Plaza. Representan a la inmobiliaria Grupo Vivir. Entonces, la entidad tenía una deuda superior a 200.000 euros, con las cuentas embargadas e impagos.
Una situación que se intenta solucionar reestructurando el club en una asamblea de socios, de la que sale Liedo como presidenta, y que no logra sacar adelante iniciativas para reducir la deuda. Ni los socios ni instituciones acuden al rescate.
Para garantizar la existencia del Zamora solo quedaba una opción: vender y transformarse en SAD. En esta subasta, la oferta del Grupo Vivir era una de las al menos siete presentadas a nivel nacional e internacional. Sin embargo, Liedo reconoce que esta propuesta “venía garantizada”. Con los plazos ajustados, se sintió presionada y, como reconoce, no tuvieron margen de negociar con ellos.
No fue hasta meses más tarde cuando Liedo conoce, por palabras de De Aldama, que su llegada y compra podría haberse encauzado a sus espaldas en una reunión fuera de Zamora, en Medina del Campo, meses antes de presentarse oficialmente. Este encuentro desconocido por la presidenta explicaría por qué, según fuentes internas, el grupo inversor conocía tan bien la delicada situación del club y cómo lograba siempre mejorar las otras ofertas, supuestamente secretas.
Según el propio De Aldama, a esa reunión acudieron cuatro personas: el tesorero del club, Manuel García; Narciso Prieto, de Caja Rural, patrocinador del equipo; y el director de la televisión La 8 León, Juan Francisco Martín Freseneda. En otra ocasión, el presunto comisionista también menciona el nombre de Felipe Llamazares, entonces director de la Cultural Leonesa y ahora con el mismo cargo en el Racing de Santander.
El tesorero Manuel García no ha querido responder a las preguntas de RNE. Narciso Prieto, de Caja Rural, sí. Explica cómo la recomendación de la oferta de De Aldama llegó desde León a través de Llamazares y Freseneda. Sin embargo, no responde a una pregunta, ¿por qué no estaba en esa reunión la persona que tenía que tomar la decisión final de la venta?
La entonces presidenta no sabe explicarlo. “Nunca entendí por qué hay una reunión a espaldas de la directiva y de la presidenta. Si Narciso va como representante de Caja Rural no me parece lógico que se haga a escondidas, que se haga fuera de Zamora y que no se informe ni antes ni después”, denuncia Liedo.
En "cochazos", pero con sueldos pendientes
Nada más llegar, Víctor de Aldama y Alfredo Ruiz Plaza abonan salarios pendientes y aportan en forma de préstamos 350.000 euros necesarios para cubrir las deudas de la entidad a través de Caja Rural. Entonces se firma un contrato donde el Grupo Vivir se asegura un 60% de las acciones y los socios un 40% para que puedan ser también "propietarios".
Pero una cláusula adicional lo cambiaba todo: “En caso de que no se cubra la totalidad del capital social (...), el Grupo Vivir se compromete a adquirir las acciones que resisten hasta alcanzar el 100%”.
Así fue como, fijando las acciones a 2.500 euros, la entidad rojiblanca se ponía en manos de empresas como MTM 180 Capital o Pilot Real Estate, sociedades unipersonales de De Aldama salpicadas por la trama. Según fuentes internas, solo hay tres acciones que están a nombre de gente de Zamora, lo que suponen un 0,55% del capital total, que se calculó en 1,254 millones de euros al formalizarse la SAD el 30 de septiembre de 2020, un dinero presuntamente transferido del ‘caso Koldo’.
De Aldama posee, según los últimos datos (de 2021), el 16% de las acciones a título personal, el 66% con MTM 180 Capital y, el 1%, como Pilot Real Estate, empresa que figura en la lista de Grandes Deudores de Hacienda Pública con casi 1,37 millones de euros. Este desglose se destapó al tiempo que en diciembre de 2022 la Agencia Tributaria decreta el embargo de los ingresos del Zamora C.F., al que exigía 81.500 euros. Entonces, De Aldama reconoció que algunos empleados no habían cobrado desde el comienzo de la temporada.
A Liedo esto se lo cuentan estando ya fuera del club, y se preguntaba “cómo viene con esos cochazos cuando se tardaba en pagar nóminas, hubo embargos de Hacienda. Resultaba raro cuando uno tiene tanto dinero y no paga”.
Alfredo Ruiz Plaza, desaparecido
¿Y qué fue de Alfredo Ruiz Plaza, el socio que llegó junto a Víctor de Aldama? Al comprar acciones lo hace a nombre de la sociedad ARP 180 Capital. Sin embargo, fuentes internas señalan que se empezó a desvincular del club aproximadamente en 2021. La expresidenta lo corrobora: “De repente desapareció cuando yo ya no estaba en el club. Oí que se había desvinculado totalmente del Zamora y de los negocios y empresas que tuviera con Víctor”.
Otras fuentes jurídicas dicen que Ruiz Plaza continúa teniendo el 16% del accionariado con el que entró. Sin embargo, su salida o permanencia no queda registrada en el Registro Mercantil. Porque el club no informa sobre su estado contable en el Registro Mercantil, una obligación que tienen las SAD con el Consejo Superior de Deportes, desde el 30 de junio de 2021. Tampoco se han celebrado Juntas Ordinarias de Accionistas en 2022 y 2023. Desde entonces, los trabajadores seguían cobrando, “pero a veces a través de empresas vinculadas a Aldama”, cuentan esas mismas fuentes.
Algunos informes de la Guardia Civil compartidos por otros medios apuntan a que la nómina de César Villafañe, director deportivo del club, estaría a cargo de Deluxe Fortune, una de las empresas de De Aldama desde la que habría salido parte del dinero para comprar el Zamora en 2020 (junto con MTM 180 Capital).
También aparece el nombre de Luis Alberto Escolano, vicepresidente del club, investigado por haber sido administrador de la empresa Businesscity SL, un proyecto común de Víctor de Aldama y Juan Carlos Cueto. Este último es el dueño del conglomerado del que surge Soluciones y Gestión SL, empresa principal de la trama.
El futuro del Zamora C. F.
Con el bloqueo de 39 cuentas bancarias de Víctor de Aldama, 10 de ellas de Caja Rural de Zamora, las arcas del club estarían paralizadas temporalmente.
Según explican personas del club, la entidad recibía mayoritariamente de él o de sus empresas los ingresos y préstamos para “blanquear y ganar con los intereses”.
Últimos datos económicos del Zamora C.F. con préstamos de las sociedades del 'caso Koldo' RTVE.es
Pero a pesar de la imposibilidad de pagar a los trabajadores, el club sigue jugando con aparente normalidad esta temporada en Segunda RFEF, eso sí, con menos esperanza de volver algún día a Primera. Quien también trata de continuar con normalidad es Liedo, porque tras esos dos años y medio que compartió directiva con Víctor de Aldama y Alfredo Ruiz Plaza, en los que recibió comentarios como “tú no entiendes, esto es cosa de millonarios”, reconoce que le “llevó mucho tiempo” recuperarse.
¿Quién es Víctor De Aldama?
Además de presidente del Zamora CF, Víctor de Aldama es empresario, dueño de la empresa MTM 180 Capital SL, exasesor de la compañía Globalia y uno de los principales investigados en el 'caso Koldo' —la supuesta trama de corrupción en la venta de material sanitario durante la pandemia—como presunto comisionista y conseguidor en la trama.
En concreto, se enfrenta a los delitos de de organización criminal, blanqueo de capitales, cohecho, contra la Hacienda Pública y tráfico de influencias.
Según el sumario, De Aldama habría gozado de un "pase especial" de acceso al Ministerio de Transportes, donde trabajaba Koldo García como asesor del exministro socialista José Luis Ábalos, y para hacer negocio con el transporte de mascarillas. De estos contratos con administraciones públicas, De Aldama pudo haber obtenido unos beneficios de 5,5 millones de euros, según el auto del juez Ismael Moreno.
Por otro lado, el PP ha denunciado en las últimas semanas que podría estar vinculado con Air Europa, ya que la compañía aérea le "tenía en nómina".