⏳ Esta noticia se actualiza una vez a la semana, con los últimos datos del boletín hidrológico del Ministerio para la Transición Ecológica.
Los embalses peninsulares vuelven a cosechar subidas en sus reservas tras un breve parón. El volumen de agua almacenada aumenta y los embalses se encuentran al 44,6% de su capacidad. Es más de un punto con respecto a la semana anterior, al mismo nivel que lo registrado en las mismas fechas de 2022 y cinco puntos por debajo de la media de la última década (50,1%).
Las presas destinadas a la producción de energía eléctrica también han aumentado su reserva de agua 1,2 puntos respecto a la última semana, de forma que estos embalses se encuentran al 69,6% de su capacidad, bastante mejor que el año pasado (46%) y por encima de los valores medios de la última década (58,7%).
Pero lo más importante es que los embalses de uso consuntivo —aquellos cuyo fin es el consumo humano y la agricultura— se encuentran al 33,5%, según los datos del último informe semanal del Boletín Hidrológico, publicado por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco). Son 1,1 puntos más respecto a la última semana, en la que las reservas han aumentado en 452 hectómetros cúbicos.
En definitiva, el volumen de agua en los embalses para el consumo humano alcanza los 13.000 hm³, aunque en la mayor parte de España hay mucha menos agua almacenada de lo que sería normal y en términos generales España sigue arrastrando una sequía de dos años, especialmente acusada en el sur de España y en Cataluña.
De esta manera, la reserva de agua para consumo se encuentra por encima que en la misma fecha del año pasado (29,1%), pero sigue muy lejos del nivel medio de la última década para esta época (46,2%). En suma, la situación de sequía prolongada persiste y afecta a amplios territorios.
Las cuencas que menos agua almacenan en relación con su capacidad son la del Guadalete-Barbate (14,7%), las cuencas internas de Cataluña (17,9%) y las del Guadalquivir y Segura, al 18,9% cada una. Por el contrario, las que están en mejor situación relativa son, por lo general, las cuencas septentrionales, pero son también las de menor capacidad: las de Cantábrico Oriental, Galicia Costa y Cantábrico Occidental.
Sigue leyendo para conocer al detalle la situación de los embalses en España.
La situación embalse a embalse
Los gráficos que se presentan a continuación recogen el estado y la evolución de las 16 cuencas hidrográficas peninsulares españolas, y de todos sus embalses, con los datos mes a mes desde 1988, recopilados por DatosRTVE del boletín hidrológico del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco).
En España hay 374 embalses con una capacidad total de almacenamiento de 56.000 hectómetros cúbicos (hm³) de agua, lo que supone aproximadamente el 50% del caudal fluvial del país. En el año hidrológico 2023-2024 se han añadido dos nuevos embalses: el de Irueña, en la confederación hidrográfica del Duero, y el de La Colada, en la del Guadiana.
Badajoz cuenta con el mayor embalse de España, el de La Serena, que es también el tercero más grande de Europa. Construido en 1989, tiene una capacidad de 3.219 hm³, lo que significa que podría almacenar 3,21 billones de litros de agua. Este volumen podría cubrir las necesidades de la región de Extremadura durante más de 30 años.
El segundo más grande también se encuentra en Extremadura, el de Alcántara, en Cáceres (3.160 hm³), construido en 1969. En total, nueve embalses superan los 1.000 hectómetros cúbicos de capacidad: los dos citados, y los de Almendra (en la provincia de Salamanca, con la presa más alta de España, 202 metros), Buendía, Mequinenza, Cijara, Valdecañas, Ricobayo y Alarcón. El más pequeño de España es el de Cornalbo, en el curso del río Albarregas, en Extremadura, con una capacidad de 4 hectómetros cúbicos.
Entre los embalses que muy a menudo aparecerán vacíos en este listado está el de Valdeinfierno, en la cuenca del Segura, que se construyó en el siglo XVIII y cuya finalidad principal es retener el agua para el aprovechamiento del regadío y para proteger a las poblaciones de las crecidas del río Luchena, igual que la presa de Algar respecto a las crecidas del río Palancia, en Valencia.
En el siguiente mapa se puede comparar la situación específica de los embalses de uso consuntivo con los datos disponibles al cierre del último mes. Los embalses que se encuentran señalados en color rojo se encuentran por debajo de la mitad de su capacidad total. En otra pestaña, se ofrece una vista diferente, que muestra para cada embalse su reserva actual respecto a la media de los últimos cinco años. La mayor parte de los embalses peninsulares para el consumo humano se encuentran en la actualidad en un nivel inferior que en el último lustro.
La evolución cuenca a cuenca
A continuación se puede analizar la evolución del nivel de agua embalsada en cada cuenca hidrográfica española desde 1988 y la comparación del porcentaje actual con el de la media de los últimos cinco años y la última década.
En conjunto, el nivel de agua embalsada en España se encuentra en valores mínimos en comparación con los últimos diez años, lo que expone a la población a situaciones de escasez de agua. Según la organización Greenpeace, el 70% de las cuencas hidrográficas en España presentan un nivel de estrés hídrico alto o severo.
Los niveles de en torno al 85% de capacidad que alcanzaron los embalses españoles en la primavera de 2013 o 2014 no se han repetido en la misma estación desde entonces, en un descenso que es más acusado en la vertiente Atlántica, donde están algunos de los principales ríos españoles y los que más han sufrido esta tendencia, en especial las cuencas de los ríos Guadiana, Guadalete-Barbate y el Guadalquivir.
Precipitaciones un 4% por encima de lo normal
El año hidrológico 2022-2023 cerró con precipitaciones a la baja, siguiendo la estela del anterior, que terminó siendo el tercero más seco desde que comenzaron los registros en España hace seis décadas.
Sin embargo, las lluvias en estas últimas semanas están contribuyendo a aliviar el déficit. Con datos hasta el 30 de noviembre, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) apunta que el valor medio nacional de las precipitaciones acumuladas es de 154 litros por metro cuadrado, lo que representa un 4% más de lo esperado, que serían 148. Las cantidades acumuladas superan los valores normales en gran parte de la mitad oeste de la península y Pirineo occidental. Destacan puntos de Galicia, Castilla y León y el sistema ibérico, con precipitaciones que duplican el valor medio.
Por el contrario, las precipitaciones se encuentran por debajo de lo normal en el tercio este de la península, además de en la cornisa cantábrica, en la mitad oeste de Navarra y en la Rioja, en las mitades este y sur de Andalucía y en la mayor parte de Baleares y Canarias, con la excepción de Menorca, el sur de Mallorca y la mitad norte de Gran Canaria.
Sequía prolongada en el 32% de la península
Como consecuencia de lo anterior, el 31,6% de la superficie peninsular estaría en situación de sequía prolongada, según los últimos datos recopilados por el Ministerio de Transición Ecológica (Miteco), correspondientes al 30 de septiembre.
El mes de septiembre fue en general un mes húmedo con precipitaciones por encima de la media, sobre todo debido a la DANA del 3 y 4 de septiembre, que tuvo una gran repercusión en el centro de la península y en zonas del Ebro y el Duero. El año hidrológico terminó así con 58 unidades territoriales en estado de sequía prolongada, sobre todo en las cuencas internas de Cataluña, Guadiana, Duero, Ebro y en el este y sur de Andalucía.
Por otra parte, y según los datos del Miteco, el 41% del territorio se encuentra en situación de emergencia (14,7%) o alerta/excepcionalidad (26,3%) por escasez de agua, en especial en Cataluña, mitad norte de Aragón, el centro de Castilla y León, sur de Extremadura y Castilla-La Mancha y casi en toda Andalucía. La escasez coyuntural de agua está relacionada con los posibles problemas de atención de las demandas, independientemente de la disponibilidad de recursos hídricos.
Sobre esta información
Para actualizar los datos principales que se reflejan en el texto de esta noticia se utilizan los ofrecidos por el Miteco desde su boletín semanal. No obstante, los gráficos utilizan la información disponible desde 1988, también suministrada por el organismo, "sujeta a revisión y validación", por lo que los datos podrían variar ligeramente.