El presidente del gobierno en funciones y líder del PSOE, Pedro Sánchez, ha comparecido en La Moncloa tras ser designado como candidato a una nueva investidura para decir que "acepta con ilusión y responsabilidad el encargo del rey" y que "es la hora de la política y de la generosidad". Y sin mencionar la palabra 'amnistía', Sánchez no ha descartado esta medida que plantean ERC y Junts como condición indispensable para darle su apoyo, aunque sí ha sido más claro para rechazar un referéndum de autodeterminación en Cataluña.
De esta manera, Sánchez ha evitado hacer una alusión directa a la amnistía, aunque sí ha defendido la necesidad de "generosidad" para "resolver el problema político de Cataluña" y para sacar adelante su investidura.
Preguntado en su comparecencia por las condiciones que plantean los independentistas para apoyar su investidura- aprobar una ley de amnistía a los condenados por el 'procés' y avanzar en el reconocimiento del derecho de autodeterminación para celebrar un nuevo referéndum- Sánchez ha dicho que "fijará posición" sobre estas exigencias una vez que haya mantenido una primera ronda de contactos con los portavoces de los diferentes grupos parlamentarios con los que se reunirá para tratar de conseguir los apoyos que necesita. Y lo hará con todos "menos con la ultraderecha", en referencia a Vox.
Sánchez sí ha rechazado expresamente un referéndum de autodeterminación en Cataluña y ha defendido la "difícil" decisión que tomó sobre los indultos a los condenados por el 'procés' porque, a día de hoy, puede constatar "que fue acertada" y bien tomada en aras del interés general. Y en este sentido, y en clara referencia a los partidos independentistas, ha apelado a la responsabilidad para no ir a una repetición de elecciones el próximo 14 de enero.
Ha manifestado su rechazo a la consulta "no solo por compromiso y exigencia constitucional, sino por una convicción política". "Es contrario a lo que he defendido siempre con mi palabra y mi acción", ha expresado, para dejar también claro que los pactos que pueda alcanzar de cara a su investidura serán "transparentes" y estarán refrendados por el poder legislativo y "seguro" hasta por el Tribunal Constitucional que deberá pronunciarse para avalar su "absoluta garantía".
A su juicio, los catalanes quieren "pasar página de esta situación" y generar un reencuentro entre instituciones y ciudadanos de Cataluña y del conjunto de España. Cree que quieren vivir en un país "cohesionado" y no "fragmentado".
Para sacar adelante su investidura Sánchez necesita dar un vuelco al bloque que le dijo 'no' al anterior candidato, Alberto Núñez Feijóo, para conseguir su voto a favor. Necesita el apoyo del bloque formado por PSOE, Sumar, ERC, Junts, EH Bildu, PNV y BNG, que llegaría a una amplia mayoría absoluta de 178 diputados. El PSOE incluso buscará el sí de Coalición Canaria- que apoyó a Feijóo- y en ese caso solo necesitaría la abstención de Junts, aunque nada hace pensar que ERC y Junts voten diferente en su investidura.
"Yo me tomo esto en serio, yo voy a una investidura real, esto no es una broma", ha aseverado el candidato, que reconoce que las negociaciones no van a ser "fáciles" y ha apelado a la "discreción" de las mismas. Además, Sánchez ha dejado claro que no trabaja solo para conseguir los votos para su investidura sino para articular una mayoría para toda la legislatura.
Sánchez iniciará los contactos "mañana mismo" con todos los grupos, menos Vox
Sánchez comenzará "mañana mismo" las consultas con los demás grupos parlamentarios, con la excepción de Vox, al tiempo que ha recalcado que en este proceso el marco será siempre, como hasta ahora, la Constitución.
Esos contactos arrancarán este mismo miércoles con la líder de Sumar, Yolanda Díaz, a la que trasladará su intención de reeditar un gobierno de coalición. La propia Díaz dijo este lunes que el acuerdo con el PSOE "aún estaba lejos".
Asimismo, ha dicho que también tiene intención de hablar con el PP de Alberto Núñez Feijóo, aunque ha dejado claro que no será para recabar su apoyo ni para "apelar a la peor de las corrupciones, el transfugismo, que es lo que ellos han hecho". Minutos después, Génova ha confirmado que será su líder quien acuda al encuentro. El propio Feijóo, tras verse este lunes con el rey, ha augurado un tiempo, el de Sánchez, de "oscuras negociaciones y mentiras".
Sánchez ha insistido en la idea de que el gobierno "de involución" de PP apoyado por Vox ha recibido "no solo el rechazo de los ciudadanos sino también el del Parlamento" con el 'no' a la investidura del líder 'popular'.
Ha confiado en lograr sacar adelante un gobierno de coalición para "consolidar y ampliar" los avances de la pasada legislatura y para perseverar en la línea de la "concordia" en Cataluña.
"Apelo a la responsabilidad de todas las fuerzas políticas para traducir esa mayoría social en un gobierno de progreso y convivencia", ha concluido.
Aspira a ser investido "cuanto antes" pero no pone fecha
"Cuanto antes". Esta ha sido la respuesta que ha dado el presidente en funciones sobre la posible fecha de la investidura, pero no se ha atrevido a dar una posible fecha ante la complejidad que reconoce en las negociaciones.
"Me gustaría que fuera cuanto antes. Vamos a trabajar intensamente, confío. Las negociaciones no van a ser fáciles, van a ser complejas", ha dicho.
"Hemos tenido cinco semanas de investidura fallida de Feijóo. Nosotros empezamos hoy, por tanto no puedo garantizar aún la fecha, pero puedo garantizar a los españoles que vamos a trabajar en serio", ha añadido.