El acuerdo entre PSOE y Unidas Podemos para la reforma del sistema de pensiones da una tregua a la coalición en una semana crítica y turbulenta por el choque entre ambos socios por la ley del ‘sí es sí’ y el Día de la Mujer. El acuerdo, alcanzado en la noche de este jueves entre ambas formaciones, ha reforzado la unidad del Gobierno, determinado a terminar la legislatura juntos hasta el "último minuto".
Los ministros y dirigentes de ambos colores han salido en las últimas horas a celebrar el acuerdo y exhibir unidad. Para el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, esta reforma impulsada por el Ministerio de Seguridad Social, que cuenta con el visto bueno de Bruselas, garantizará la sostenibilidad de las pensiones “para las próximas décadas” y “el poder adquisitivo de los pensionistas”. La medida supondrá calcular la pensión con los últimos 25 años cotizados o con 29 excluyendo los dos peores ejercicios.
El ministro de Presidencia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, aprovechaba poco después este viernes ante los medios una pregunta sobre pensiones para poner en valor que la coalición dedicará todas sus “energías” en “seguir trabajando” lo que queda de legislatura: “Tenemos tantas cosas por hacer, son tantas las cosas que nos unen y tantas las políticas en las que nos hemos puesto de acuerdo durante la legislatura, que creo que no podemos desaprovechar ni un segundo".
También la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz (Unidas Podemos), negociadora en primer persona, agradecía al ministro José Luis Escrivá (PSOE) por el resultado de una negociación que “ha sido extensa en el tiempo” pero cuyo resultado demuestra que el Ejecutivo de coalición hace “las cosas bien”: “Avanzamos para mejorar nuestro país, estamos al servicio de la ciudadanía”.
Los mensajes desde ambas partes tienen ahora poco que ver con la acusación hace solo unos días de Podemos al PSOE de haber “traicionado al movimiento feminista” y dado “la epalda” a las mujeres con la reforma del ‘sí es sí’ y la respuesta del portavoz socialista en el Congreso, Patxi López, que acusaba a los ‘morados’ de una actitud “irresponsable” e “impresentable”.
Desde Podemos, han celebrado volver a la senda del acuerdo con el PSOE. Su portavoz parlamentario, Pablo Echenique, agradecía este viernes a Escrivá su disposición al pacto y se decía “orgulloso” de un acuerdo que lleva el “sello” de Unidas Podemos, mientras que Enrique Santiago (IU) reivindicaba que los logros de la coalición se imponen a las diferencias y que los socios seguirán trabajando juntos frente a aquellos que optan por poner énfasis en "desavenencias y desencuentros".
Siguen las discrepancias en torno a la ley del ‘sí es sí’
Eso no quita para que las discrepancias sigan estando en lo relativo a la Ley de Garantías de Libertad Sexual. "Hemos aprobado 200 leyes en lo que va de legislatura y en una ha habido una discrepancia”, reconocía este viernes Bolaños, para quien, sin embargo, “la hoja de servicio del Gobierno de coalición es más que positiva".
El PSOE está determinado a “corregir” la ley del ‘solo sí es sí’ por la "interpretación que están haciendo los tribunales" de la norma cuando ya hay más de 700 rebajas de condenas y de 70 agresores sexuales excarcelados (según el CGPJ). Socialistas y ‘morados’ se muestran partidarios de volver a subir las penas que quedaron rebajadas con la ley vigente, aunque siguen discrepando sobre la fórmula en la que debe ser considerada la violencia (el PSOE propone incluirla como subtipo agravado de agresión y Unidas Podemos mantenerla como agravante).
En los últimos días, PSOE y Unidas Podemos han abogado por rebajar el tono. Y es que la reforma unilateral de los socialistas de la ley del ‘solo sí es sí’ ha tensionado en las últimas semanas a la coalición a su nivel máximo en lo que va de legislatura. Pese a que en todo momento los ministros de PSOE y Unidas Podemos han descartado romper la coalición y han apostado por agotar la legislatura “hasta el último minuto”, la reforma y el 8M han dejado imágenes de auténtica división en el Ejecutivo.
Una semana crítica por la reforma de la ley y el 8M
Una de esas imágenes fue el pasado martes en la votación en el Congreso de la toma en consideración de la reforma socialista, que salió adelante gracias a los votos de PP y Cs (con la abstención de Vox), lo que ahondó la grieta en el Ejecutivo. Las ministras de Igualdad, Irene Montero, y de Derechos Sociales, Ione Belarra, estuvieron solas en la bancada azul del Gobierno durante todo el debate mientras la oposición criticaba a la primera con dureza y la secretaria de Igualdad del PSOE, Andrea Fernández, advertía a Podemos que estaban cansados de sus “peroratas”.
Apenas unas horas antes, tras el Consejo de Ministros, era la vicepresidenta económica, Nadia Calviño, la que presentaba en la víspera del 8M y sin la titular de Igualdad una ley de paridad. Y el Día de la Mujer, a diferencia del año pasado, Sánchez no acompañó a Montero en el acto institucional de su ministerio y la portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, publicó una foto solo con ministros socialistas bajo el título “Un Gobierno feminista”.
El PSOE trató de restar importancia a estas cuestiones. Calviño defendió que presentó ella la ley de paridad sin Montero porque toca a cuestiones legales relativas a su Ministerio, y la titular de Hacienda, María Jesús Montero, aseguró el jueves que Sánchez no coincidió con Irene Montero en el acto institucional del 8M por motivos de agenda.
En una entrevista en RNE, la ministra de Hacienda aseguró que el PSOE y Unidas Podemos finalizarían la legislatura “juntos” en la coalición y “agotándola” hasta el “último minuto”, algo de lo que no tiene dudas puesto que las políticas sociales son el "pegamento" de la coalición: “Estamos trabajando de forma tan intensa que nos va a faltar tiempo para terminar la legislatura. Veo con muchísima claridad que estaremos trabajando muy próximos a la Navidad, agotando. Hasta el último minuto tenemos tarea”.
La ministra quiso dejar claro además que Sánchez siempre ha "respaldado" a todos sus ministros, incluida Irene Montero, que desde que comenzó la rebaja de penas ha estado en el ojo del huracán, al igual que su Ministerio esta semana con polémicas como la del vídeo de la secretaria de Estado Ángela Rodríguez en la manifestación del 8M entre cánticos de "¡Qué pena me da que la madre de Abascal no pudiera abortar". Un vídeo que provocó un gran rechazo entre la oposición y un tímido reproche en el PSOE.
Pero en esa entrevista, María Jesús Montero también aseguró que “prácticamente” ambos socios habían conseguido un acuerdo para la ley de vivienda, algo que desmintió inmediatamente después Belarra al asegurar que no estaban “más cerca” de un acuerdo que el día anterior.
No fue hasta el jueves por la noche cuando no cambiaron las tornas y la imagen de los choques dieron paso a la del acuerdo y el entendimiento con el pacto para las pensiones.
Aunque ambas partes se han dedicado a celebrarlo en las últimas horas, Podemos ha rebajado el optimismo al señalar Echenique que ha habido “algún retroceso” en los últimos días respecto a la ley de vivienda para garantizar una regulación efectiva del alquiler, puesto que los socialistas pretenden poner un tope temporal y los ‘morados’ abogan por una medida de carácter indefinido. Aún así, ha deseado poder dar “buenas noticias” en las próximas fechas.