Los indicadores sanitarios de Andalucía dejan en un mal lugar relativo a la comunidad autónoma más poblada de España. Según los últimos datos disponibles del Ministerio de Sanidad, la comunidad andaluza es la que menos camas hospitalarias por habitante tiene (solo Ceuta y Melilla tienen una tasa peor) y además es la que tiene menos personal médico y de enfermería en atención especializada en relación con el tamaño de su población. Esto se relaciona directamente con que es la región donde más días hay que esperar (107) de media para una primera consulta en atención especializada.
Percepción de la sanidad
Actualmente, la sanidad en Andalucía recibe la peor nota de todas las comunidades autónomas, según los datos del último barómetro sanitario del CIS. Un 5,9 es la nota global de su sistema sanitario, y también de la atención primaria y hospitalaria.
El punto de inflexión que supuso la pandemia significó también el hundimiento de la valoración de la atención primaria, que recibía en 2019 un 7 sobre diez y ahora no llega al 6. En los últimos años, la opinión de los andaluces sí ha mejorado en el servicio de urgencias y la atención del 112, que valoran con un 7,38 sobre diez, así como la atención hospitalaria (6,84) y el servicio de Urgencias hospitalarias, que, pese a haber subido, no llega al seis (5,9).
Listas de espera
Otro indicador en el que Andalucía tiene el peor registro es el de la lista de espera en las consultas de medicina especializada. Los andaluces tienen que esperar de media 107 días, tres meses y medio, según los datos de Sanidad a junio de 2022. Son casi 40 días más que la media del conjunto del país (79), y es, con Canarias, la única comunidad donde hay que aguardar más de 100 días para ser recibido en la consulta de un especialista. Pese a ello, el gobierno autonómico subraya que han logrado reducir unos 90 días la lista de espera respecto a 2018.
Sin embargo, Andalucía es al mismo tiempo una de las comunidades autónomas donde hay menos pacientes que tengan que esperar más de 60 días por una consulta (17%), solo por detrás del 12% del País Vasco. Esta aparente contradicción se explica en parte porque la media de espera es empujada al alza por especialidades concretas como Neurología (161 días de espera de media) y Dermatología (143 días). Para ser atendido por estos médicos, así en los casos de cardiología, traumatología y aparato digestivo, los andaluces tienen que esperar el doble que la media de los españoles.
El Sindicato de Médicos de Primaria afirma que en la actualidad "numerosas especialidades" superan los 60 días de espera que reconoce como tope la normativa andaluza. Citan como ejemplo que en el Hospital Regional de Málaga hay demoras "de más de cuatro meses" para ginecología, digestivo, traumatología y rehabilitación, entre otras áreas y que las citas para las revisiones "se eternizan".
En lo que respecta a las listas de espera quirúrgicas, destaca una especialidad en concreto, la cirugía plástica, que en la comunidad andaluza llega a los 448 días de espera media, casi tres veces más que la media nacional. Es la lista de espera para operarse de una especialidad más larga de todo el país, según los datos recopilados por el Ministerio de Sanidad. Las listas de espera quirúrgicas en Andalucía solo mejoran la media nacional en cuatro especialidades: cirugía general y digestiva, urología, maxilofacial y traumatología.
Personal sanitario
El personal médico y de enfermería en Andalucía está por debajo de la media del país en todos los ámbitos, menos en médicos y médicas de atención primaria (0,75 médicos por cada 1.000 personas asignadas). Pero, con 1,51 médicos y 3,04 enfermeras especializadas por cada 1.000 habitantes, es la comunidad autónoma con menos personal sanitario especializado en relación con su población.
Y eso que la Junta remarca que desde 2018 se han incorporado 30.000 profesionales sanitarios de plantilla, más de 7.600 en la plantilla estructural, lo que eleva el total de profesionales sanitarios en Andalucía a 125.000 en este año 2023.
Sin embargo, las jubilaciones en el último año fueron casi 700 en toda la comunidad y se prevé que en la próxima década, hasta 2032, se jubilen en total 6.769 médicos, de los que 2.917 son de atención primaria, según la propia consejera de Sanidad, Catalina García. Uno de cada cinco médicos de la sanidad pública andaluza tiene 60 años o más. El gobierno autonómico pide que se convoquen más plazas MIR en los próximos años, en especial en Medicina de Familia y Comunitaria para poder afrontar el relevo generacional.
En lo que respecta a la medicina de familia, el Sindicato Médico de Primaria andaluz critica que "las plantillas están infradimensionadas en prácticamente todas las categorías profesionales de la atención primaria" y en prácticamente toda Andalucía, ya sea en zonas metropolitanas, costeras o rurales, y que la presión asistencial ha crecido. "Antes de la pandemia estábamos en una media de unos 35 pacientes por médico al día (contando los médicos ausentes) y ahora estamos en 38".
"Ahora tenemos esperas de hasta dos y tres semanas en numerosos centros de salud", añaden en declaraciones a RTVE, "lo que está provocando que soliciten atención urgente pacientes que no presentan un proceso de ese tipo o que saturen los puntos de urgencias. Nadie ordena el acceso ni prioriza las citas".
Inversión en sanidad
Andalucía también está por debajo de la media en gasto sanitario por habitante. Si, según los presupuestos iniciales de las comunidades autónomas para Sanidad en 2022, la media española está en 1.584 euros, el gasto en Andalucía es 200 euros menor, 1.491 euros por habitante. Solo en Madrid, Cataluña y Murcia, la inversión pública en sanidad prevista fue menor que en la región andaluza.
No es puntual. Pese a la recuperación de la inversión en sanidad pública desde 2014, tras los efectos de la crisis financiera, la inversión pública en sanidad en Andalucía lleva años por debajo de la media del conjunto de España, como se ve en el siguiente gráfico. No obstante, la Junta ha firmado para 2023 su mayor presupuesto de la historia en sanidad, 13.837,5 millones de euros, el 7,4% del PIB regional, un aumento de casi el 11% para la Consejería de Salud y Consumo, de los cuales 4.500 millones (30%) se destinarían a la atención primaria.
Por otra parte, Andalucía es la región que más porcentaje de su gasto sanitario total dedica a la atención primaria: un 17,7%, según datos de Sanidad de 2020, por encima de las otras tres comunidades que invierten más de un 15%: Castilla y León (16,1%) y Extremadura (15,5%). En este sentido, el gobierno autonómico asegura que en 2023 llegarán al 25% del presupuesto de sanidad dedicado a la atención primaria.
La Junta andaluza también destaca que en los últimos cuatro años se ha mejorado las retribuciones de los médicos, que se han incrementado en un 14%, lo que supone una inversión anual de 155 millones de euros más en esa mejora de las condiciones laborales. En conjunto, la inversión en sanidad en Andalucía supera la cota del 7% del PIB de la región, cuando en 2018 representaba casi un punto menos, un 6,1%.
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