El Gobierno de Brasil ha decidido reforzar la seguridad en todo el país ante las informaciones de que los grupos de bolsonaristas más radicales han convocado nuevas manifestaciones para este miércoles, como las que terminaron con el asalto a las sedes de los tres poderes en Brasilia este domingo.
El anuncio lo ha hecho el ministro de la Presidencia, Rui Costa, en declaraciones a la prensa después de que tanto la Abogacía General de la Unión como la Fiscalía pidieran al Tribunal Supremo la adopción de medidas para prevenir posibles ataques terroristas y actos violentos y vandálicos.
"Determinamos medidas para reforzar la seguridad en todo el país debido a que están circulando invitaciones a nuevas manifestaciones", ha indicado Costa. "Por eso, adoptamos una posición de precaución en torno a la seguridad de la Explanada de los Ministerios y en ciudades de todo el país", ha añadido, refiriéndose a la avenida en la que están ubicadas los principales edificios públicos.
Manifestaciones por la "recuperación del poder"
El refuerzo ha sido decidido al confirmar que en los grupos compartidos por los seguidores del expresidente brasileño, Jair Bolsonaro, en las redes sociales divulgaran convocatorias para manifestaciones a las 18:00 (hora local) de este miércoles, tanto en Brasilia como en ciudades como Sao Paulo, Río de Janeiro y Belo Horizonte.
Las convocatorias indican los lugares en los que se realizarán las concentraciones y señalan que se trata de manifestaciones por la "recuperación del poder".
Recorrido por las huellas de la destrución del asalto al poder en Brasil
Los bolsonaristas más radicales, que no reconocen la victoria del líder izquierdista, Luiz Inácio Lula da Silva, en las elecciones celebradas el pasado 30 de octubre y defienden un golpe de Estado, protagonizaron este domingo un violento ataque a las sedes de la Presidencia, el Congreso y el Tribunal Supremo.
Alrededor de 1.500 detenidos
Cerca de 1.500 seguidores de Bolsonaro han sido detenidos por los actos de vandalismo de este domingo, después de que la Policía, en una reacción tardía, consiguiera desalojarlos.
La Abogacía General del Gobierno alega que la llamada "Mega Manifestación Nacional por la Retomada del Poder" convocada por los radicales constituye un "nuevo intento de amenaza al Estado democrático de Derecho".
El organismo insta al Tribunal Supremo Federal a que ordene que las fuerzas de seguridad pública del Gobierno federal y de las administraciones regionales adopten las medidas inmediatas necesarias para impedir invasiones y bloqueos de vías.