La cadena Al Jazeera ha llevado este martes a Israel ante la Corte Penal Internacional por la muerte de la periodista palestina-estadounidense Shireen Abu Akleh de un disparo en la cabeza el pasado 11 de mayo mientras cubría una redada del ejército israelí en un campo de refugiados de Yenín, al norte de la Cisjordania ocupada.
La televisión catarí quiere que el fiscal del organismo, Karim Khan, incluya lo que considera un asesinato sin ningún género de dudas y el ataque aéreo de 2021 contra sus oficinas en la Franja de Gaza en su investigación sobre la situación en Palestina.
Al Jazeera ha informado, según recoge la agencia AFP, de que ha trasladado a la Corte Penal Internacional "nuevas pruebas y vídeos que muestran claramente que Shireen Abu Akleh y sus colegas fueron tiroteados directamente por las fuerzas de ocupación israelíes".
Una investigación de la oficina de la ONU para los Derechos Humanos concluyó en junio que la bala que mató a la periodista fue disparada por soldados israelíes. El pasado mes de septiembre, Israel admitió que había una "alta probabilidad" de que el disparo a la reportera proviniera de alguno de sus soldados accidentalmente, pero la televisión catarí ha insistido en que la afirmación de que fue un homicidio por error es "completamente infundada".
Israel asegura que nadie interrogará a sus soldados
Tras conocer la noticia, el primer ministro israelí, Yair Lapid, ha asegurado que nadie interrogará a los soldados de su ejército: "Nadie nos dará lecciones éticas, por su puesto no Al Jazeera", ha subrayado en declaraciones recogidas por Reuters.
El día de su muerte, la periodista de 51 años estaba cubriendo los enfrentamientos armados desencadenados por una operación militar israelí en el campo de Yenín, bastión de las facciones armadas palestinas y donde una unidad especial del ejército israelí intentaba detener a unos "sospechosos", informa AFP.
La reportera, que estaba equipada con un chaleco antibalas donde podía leerse la palabra "prensa" y un casco, murió de un disparo en la cabeza. Una bala que fue disparada por soldados israelíes según la ONU.
El abogado que representa a Al Jazeera, Rodney Dixon, ha subrayado que la muerte de la periodista es parta de la "campaña sistemática y a gran escala" de Israel contra la cadena de televisión refiriéndose también a la destrucción del edificio que albergaba el canal en Gaza durante un bombardeo en 2021.