El Congreso de los Diputados ha vivido un momento bronco y tenso después de que la ministra de Igualdad, Irene Montero, haya acusado al PPque pone en cuestión la credibilidad de las víctimas" a raíz de distintas campañas institucionales en Madrid y Galicia que ponen el foco en las víctimas alertándolas de actitudes ante las que podrían sufrir agresiones sexuales. El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha pedido a la ministra "recoger su despacho" y dimitir en lugar de dar lecciones y "embarrar" la política.
La acusación de Montero se ha dado durante su respuesta a la diputada del PP Belén Hoyo durante la sesión de control al Gobierno. La diputada 'popular' ha acusado a la ministra de estar "regalando" reducciones de condena y excarcelaciones a agresores por la ley 'solo sí es sí' y le ha preguntado si se ha "puesto en el papel de las víctimas". En su respuesta, Montero ha defendido la ley y ha recalcado que reconoce los derechos y reparación de las víctimas, tanto del 8% que denuncian como del 92% que no lo hacen "por temor a no ser creídas".
A continuación, es cuando se ha referido a las campañas de sensibilización de Galicia o Madrid. En concreto, ha sido polémica una campaña de la Xunta en la que dice "no debería pasar, pero pasa". En una imagen, se ve a una mujer corriendo en mallas cortas por la noche. En otra, hay una mujer que no vigila su copa en una discoteca. Y en otra, una mujer que camina por la misma calle en la que hay varios hombres.
Batet llama a Montero al orden pero ella insiste
Por todo ello, Montero ha acusado al PP de "promover la cultura de la violación" y ha desatado la indignación en la bancada 'popular', donde los diputados se han levantado y han proferido gritos de protesta contra la ministra y hacia la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, para que censurara las palabras de la titular de Igualdad.
La propia Batet ha llamado al orden a Montero al considerar que su expresión no ha sido "la adecuada" y ha pedido en términos generales "respeto en las expresiones y contención en el lenguaje" en el pleno. "Debemos querer contribuir a la convivencia en la Cámara" y también "fuera", ha señalado.
Por su parte, la portavoz del PP, Cuca Gamarra, ha solicitado la palabra a la presidenta de la Cámara: "Quiero dejar muyclaro que es altamente ofensivo que una dirigente y una representante política que tiene, nada más y nada menos, que la responsabilidad de dirigir las políticas de Igualdad esté vertiendo estas afirmaciones en relación a un partido que ha luchado y va a seguir luchando por la igualdad en este país".
"Entonces, ¿ustedes cómo llaman a decirle a una mujer que vigile su copa en lugar de poner el foco en el agresor?", se ha limitado a responder Montero'.
Tras la polémica, Montero se ha reafirmado y ha compartido en su perfil de Twitter un artículo en el que la ONU "explica qué es la cultura de la violación", en referencia a "responsabilizar a la víctima de la agresión" y "poner el foco en las mujeres y no en los agresores". A su juicio, esto no debería ocurrir en campañas institucionales. Gamarra también ha incidido en la crítica: "Todo tiene un límite y quien ha proferido esas palabras es un ministro y esto quien lo consiente es el presidente del Gobierno".
El PSOE, sin embargo, se ha desmarcado de la acusación de la ministra. El portavoz parlamentario socialista, Patxi López, ha dicho a los medos: "No me han parecido las mejores palabras después de todo lo que hemos vivido en este Congreso, y precisamente ella, que ha sufrido esa agresividad verbal, no debería jugar con esto", ha declarado a los medios el portavoz del grupo socialista en el Congreso de los Diputados.La ministra de Justicia, Pilar Llop (PSOE) tampoco ha respaldado a su compañera y ha recalcadoque todas las fuerzas políticas que votaron a favor de la ley integral y el pacto de Estado contra la violencia de género, como fue el PP, "son partidos que están a la altura de las circunstancias".
Feijóo pide a Montero "recoger su despacho"
En un acto este miércoles, Feijóó se ha referido a lo ocurrido en el Congreso: "Esta ministra lo que debe hacer, en mi opinión, es simplemente recoger su despacho". El líder 'popular' ha dicho "comprender" que la titular de Igualdad esté pasando por uno de sus "peores momentos" y ha asegurado que la "mayoría" de la Cámara Baja, incluido el propio Ejecutivo, cree que es una "situación indeseable" ver a Montero "sentada como el Gobierno de España".
Después de que el Tribunal Supremo haya abierto la puerta a que los tribunales sigan rebajando condenas a agresores en aplicación a la ley 'solo sí es sí' tras revisar el caso Arandina, Feijóo ha pedido a Montero que "no se ponga nerviosa" y asuma su responsabilidad en lugar de "seguir embarrando la políitca española".
Y la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, se ha quejado tras el pleno de que el PSOE haya "convertido" el Congreso "en un lugar del que te expulsan si llamas filoterrorista a Bildu y donde se permite que una ministra acuse a la oposición de promover la cultura de la violación". Se ha pronunciado así un día después de que los diputados de Vox abandonaran el Hemiciclo ante la exigencia de Batet a uno de ellos de retirar el término "filoterrorista" en referencia a EH-Bildu.
Unidas Podemos sale en defensa de la ministra
En cambio, desde Unidas Podemos han salido en defensa de la ministra. La ministra de Derechos Sociales y líder de Podemos, Ione Belarra, se ha pronunciado así en Twitter: "Si, cuando culpas a la víctima de la agresión sexual porque llevaba mallas e iba a correr por la noche, estás promoviendo la cultura de la violación". Y ha dicho que "lo hace el PP y bien claro se lo ha dicho la ministra de Igualdad".
También el ministro de Consumo y líder de IU, Alberto Garzón, ha compartido el mismo artículo que Montero sobre la "cultura de la violación" que es, ha dicho, "omnipresente", está "grabada en nuestra forma de pensar, de hablar y de movernos por el mundo". "La cultura de la violación siempre está arraigada en un conjunto de creencias, poder y control patriarcales".