El incendio forestal de Bizkaia ha sido dado por controlado este lunes en la comarca de Las Encartaciones. Hasta el momento ha arrasado cerca de 600 hectáreas de bosque y matorral en tres municipios de la zona, lo que le convierte en el de mayor magnitud de los últimos 33 años en este territorio.
El incendio forestal se originó este domingo en Balmaseda (Bizkaia), aunque también afectó a las localidades vecinas de Zalla y Gordexola y se extendió a zonas del Valle de Mena (Burgos).
La mejoría en las condiciones meteorológicas, con un descenso notable de la velocidad del viento sur en la zona, ha permitido a primeras horas de la tarde de este lunes la incorporación a las tareas de extinción de medios aéreos del Ejército del Aire.
A las ocho de la tarde quedaban tres focos en los barrios de Arbaliza y la Herrera, con el incendio en fase de extinción, tras tener todo su perímetro controlado. La vigilancia sobre las zonas calcinadas se mantendrá durante toda la noche para evitar que se reavive, aunque la previsión es que la noche ayude en las labores de extinción por la bajada de las temperaturas y el aumento de la humedad.
Por el momento, se estima que el fuego ha quemado aproximadamente 600 hectáreas y una vivienda. El consejero vasco de Seguridad, Josu Erkoreka, ha asegurado que el fuego está "bastante controlado" y "no hay peligro" de que se vaya a ampliar la superficie del incendio.
En una última comparecencia del jefe del servicio de montes de la Diputación Foral de Bizkaia, Carlos Uriagereka, se ha señalado que actualmente los trabajos se encuentran en la fase de remate y extinción.
Según ha informado la Subdelegación del Gobierno en Burgos, en la zona burgalesa afectada están desplegados 52 militares, 17 vehículos y un helicóptero de la Unidad Militar de Emergencias (UME), además de tres brigadas con 65 profesionales, cuatro helicópteros y tres aviones del Ministerio de Transición Ecológica (MITECO), y 50 guardias civiles.
El viento complicó la extinción
Según ha indicado Erkoreka, la situación está "controlada y estabilizada" y el incendio "parece que no va a extenderse más", aunque puede ocurrir que, como consecuencia de las rachas fuertes de viendo, "en el interior del perímetro de la zona controlada se pueda encender alguna llama, pero está todo bajo vigilancia y control y no se va a ampliar el perímetro del incendio más allá desde el punto de vista de la superficie".
El consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio de Castilla y León, Juan Carlos Suárez-Quiñones, ha subrayado este lunes que confía en que mejore durante el día la situación del incendio que afecta al norte de Burgos, ya que sí están pudiendo trabajar los medios aéreos que no pudieron operar este domingo debido "a las fuertes rachas de viento".
"El fuego entró en territorio de Burgos, procedente del País Vasco, y ha afectado a tres localidades, de las cuales dos se han desalojado, con algo más de cincuenta personas, aunque espero que a lo largo del día se pueda estabilizar la situación pues a primera hora de la mañana ya han podido trabajar los medios aéreos", ha precisado Suárez-Quiñones.
Por el momento, los vecinos de Antuñano y Bortedo, dos pedanías del Valle de Mena, desalojados por el riesgo que suponía el incendio forestal declarado en la zona, han podido volver ya a sus casas una vez la Junta de Castilla y León ha considerado que están fuera de riesgo.
Investigan las causas
Efectivos de bomberos, que investigan la causa del fuego, han constatado que se trata de un único incendio que se ha extendido de manera poco uniforme, debido probablemente a los cambios de las rachas del viento. "Normalmente, el fuego se extiende como una alfombra, de manera uniforme, pero en Balmaseda no ha ocurrido así" y por eso, ha podido parecer que se inició en varios puntos, si bien el originario era el mismo, han aclarado las mismas fuentes.
Erkoreka ha informado de que habido dos casas afectadas por el incendio, una de ellas habitada, que debido al fuego ya no está en condiciones de habitabilidad.
El incendio ha obligado al desalojo de 17 personas de sus viviendas en la zona vizcaína, aunque la mayoría ha podido regresar ya a sus casas, según el alcalde de Zalla, José Ramón Urkijo.
Además, ese incendio forestal iniciado en Balmaseda obligó a evacuar en la noche de este domingo a unos cien habitantes de la localidad burgalesa de Bortedo, tras constatar que el fuego y el humo se había adentrado en el Valle de Mena.
En Bizkaia, a diferencia de lo que ocurre en otros territorios, la época del año en que se registran más incendios es entre los meses de octubre a enero, cuando "el bosque está en parada vegetativa" y se suelen producir en días de fuerte viento del sur.
Por último, el consejero vasco ha advertido de que la previsión meteorológica para esta semana, sobre todo para el miércoles y jueves, vuelve a pronosticar la posibilidad de episodios de viento fuerte, por lo que "con las condiciones de sequía en las que se encuentra el monte es posible una situación de riesgo similar a la que se produjo este domingo".