El mercado laboral español superó en abril los 20 millones de afiliados a la Seguridad Social tras sumar 184.577 cotizantes de media, en un mes que suele ser bueno para el empleo por los contratos asociados a la Semana Santa. Tanto la creación de empleo como el número de desempleados registrados en las oficinas del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), que se reduce en 86.260 personas, anotan cifras similares a los ejercicios previos a la pandemia; mientras que la contratación sigue marcando récords: uno de cada dos contratos firmados fueron indefinidos.
La normalización de la situación sanitaria permitió celebrar la primera Semana Santa sin restricciones desde 2019 y esto impulsó la contratación del sector Servicios, que sumó de media en abril un total de 173.849 afiliados, más del 94 % del total de empleos creados en este mes. Entre otros, destaca la hostelería, con 110.000 empleos, que recupera los niveles previos a la irrupción de la pandemia. "Tenemos medio millón de ocupados más que antes de la pandemia, con una creación de empleo especialmente intensa en sectores innovadores: informática, sanidad, actividades científicas...", ha destacado el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, en un mensaje en su cuenta de Twitter.
De esta forma, y con los nuevos 184.577 cotizantes de media que incorporaron a la Seguridad Social en abril, la creación de empleo en España vuelve a situarse en niveles a los ejercicios previos a la pandemia. Precisamente en los meses de abril de 2015 a 2019, el mercado laboral incorporó de media unos 180.000 afiliados, una estadística similar a la publicada este miércoles y que, sin embargo, se vio truncada por el golpe de la pandemia, cuando se perdieron 548.093 ocupados.
Con todo, el número de afiliados alcanzó por primera vez en abril los 20.019.080 trabajadores. De hecho, según datos del Ministerio de Seguridad Social, el último día de mes se registraron 20.098.119 afiliados, según la serie diaria, siendo la primera vez también que un mes cierra por encima de este nivel. Del total de afiliados, 9.400.000 trabajadores -un 47,01 %- son mujeres.
En términos desestacionalizados en el cuarto mes del año se incorporaron 33.200 cotizantes, lo que indica una leve mejora respecto a marzo, cuando la crisis energética provocada por la invasión de Ucrania y el paro en el transporte conllevó la creación de 24.000 empleos. No obstante, las cifras aún se sitúan lejos de los niveles registrados al inicio del año, antes del estallido de la guerra, cuando en enero se incorporaron 58.000 cotizantes en términos desestacionalizados. En este caso, la cifra de cotizantes cerró en 19.991.723 personas.
Cabe destacar también el caso de los autónomos, quienes sumaron 9.100 nuevas altas en abril, una cifra que a pesar de ser positiva evidencia un ritmo de crecimiento (1,2 %) cinco veces menor que el que registra el Régimen General (5,98 %). En palabras del presidente de la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor, es "urgente" tomar medidas que amortigüen la situación por la que están atravesando los autónomos y su tejido productivo, afectados "duramente" por el aumento de la inflación y la incertidumbre provocada por la situación en Ucrania.
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El paro registra la cifra más baja en un mes de abril desde 2008
También la caída en el número de parados registrados ha vuelto a niveles previos a la pandemia. En abril se contabilizaron 86.260 personas menos en las listas de desempleo, una cifra similar a los ejercicios de 2014 a 2019 y muy lejos del aumento histórico de 282.891 parados registrado por el impacto de la pandemia en 2020. En términos desestacionalizados, el paro bajó en abril de este año en 4.599 personas.
En esta ocasión, el número de desempleados se quedó a las puertas de caer de los tres millones, en concreto en los 3.022.503. Se trata de la cifra más baja en un mes de abril desde 2008. Desde 1996, año en el que arranca la serie histórica, se han registrado subidas del paro en 3 meses de abril y bajadas en 24 ocasiones.
El paro sigue castigando más a las mujeres, con 1.788.385 que buscan empleo pese a que en abril salieron de las listas 43.043; entre los hombres se redujo en cifras similares, en 43.2017 personas, lo que deja en 1.234.118 el total de parados. Por franjas de edad, hay 221.893 parados menores de 25 años tras registrarse 10.952 demandantes menos que en marzo, al tiempo que otras 75.308 personas que superan ese umbral han salido de las listas del SEPE.
Por sectores, el paro solo subió en abril en el colectivo sin empleo anterior, con 18 desempleados más que en marzo; mientras que experimentó caídas generalizadas en el resto de industrias, principalmente en los Servicios, con 65.422 parados menos. Muy lejos se situó la Agricultura, con un retroceso de 9.544 desempleados; la Construcción, que restó 6.972 personas a las listas del paro; y la Industria, donde descendió en 4.340 personas.
En cuanto a las comunidades autónomas, el paro bajó en todas las regiones, con descensos significativos en Andalucía (33.072 parados menos), la Comunidad de Madrid (10.931 menos) y las Islas Baleares (7.575 menos)
Uno de cada dos nuevos contratos fueron indefinidos
Aunque el mayor hito para el mercado laboral en abril fue la plena entrada en vigor de la reforma laboral tras los tres meses de adaptación que concedió el Gobierno, lo que implicó que el 48,2 % de los contratos, una cifra que multiplica por cinco la habitual en los meses de abril. En total, se llevaron a cabo un total de 699.000 contratos fijos, cuatro veces más. Por su parte, el número de contratos temporales firmados se redujo a 751.000, algo menos de la mitad que en años anteriores.
A raíz de la aprobación de la reforma laboral, se han realizado en los cuatro primeros meses del año un total de 1.767.836 contratos indefinidos, que representan un ascenso de 1.139.943 sobre el mismo periodo del 2021, esto es, casi el triple. Así, el peso de la contratación indefinida ha ido aumentando progresivamente: en enero alcanzaron el 15 %, en febrero el 22 %, en marzo el 31 % y en abril superan el 48 %.
Por sectores, la contratación indefinida crece de manera acusada en todos los sectores, especialmente en agricultura (116,3 %) y construcción (54,8 %). Y tiene especialmente incidencia entre los menores de 25 años (un 44 %).
Para la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, los datos "son espectaculares" y lo ha asociado al efecto de la reforma laboral "con 100 días en vigor o escasamente un mes si se cuenta la 'vacatio legis' hasta el 31 de marzo". "Después de una enorme pandemia que ha provocado una caída del PIB del 11 %, el paro se ha reducido en estos meses en casi 900.000 personas (...) Nuestro país, con los agentes sociales a la cabeza y con las fuerzas políticas que lo han entendido, hemos practicado políticas diferentes", ha subrayado.
El presidente del Partido Popular (PP), por su parte, ha enmarcado estos datos en el contexto de la Semana Santa. "Evidentemente son mejores que los del mes de marzo. Pero (...) estamos con el doble de paro de la Unión Europea (UE)", ha señalado, para después calificar de "preocupante" que España "va a ser uno de los pocos países de la Unión que no va a recuperar su PIB hasta el año 2023", tal como indicó el Gobierno la pasada semana tras la presentación del nuevo cuadro macroeconómico para el periodo 2022-2025.