Una parada "repentina" del motor principal de Villa de Pitanxo, el barco gallego que naufragó el pasado martes en Terranova (Canadá), fue el origen del siniestro marítimo.
Así lo ha comunicado la empresa armadora, Pesquerías Nores, que ha hecho pública este lunes la explicación ofrecida por el patrón del barco, Juan Padín, uno de los tres supervivientes.
Esa circunstancia se produjo durante la maniobra de virada del aparejo, según la compañía. La parada del motor dejó al barco "sin propulsión ni gobierno" y expuesto al viento y las olas, sufriendo golpes de mar que lo escoraron y hundieron "de forma muy rápida".
Los familiares de los desaparecidos del Villa Pitanxo piden retomar el rastreo ante la llegada de una borrasca
Los armadores se han reunido este mediodía con las familias de los tripulantes fallecidos y desaparecidos para trasladarles esta información y el estado de las repatriaciones. Apoyan también que continúen las tareas de búsqueda de los desaparecidos "cuanto antes" y para "averiguar las posibles causas del trágico accidente", según han señalado en la nota.
Las familias piden que la búsqueda continúe
Este lunes, día de luto oficial por los fallecidos tras el naufragio, estaba previsto que llegase el avión fletado por el Gobierno para repatriar a los tres únicos supervivientes y los cuerpos de los cinco fallecidos tras el hundimiento del pesquero en Terranova.
Finalmente, dicho avión ha aterrizado en la madrugada de este domingo, en Santiago de Compostela, donde les ha recibido el presidente Pedro Sánchez.
Sánchez también se ha reunido con las familias de los marineros, que esta mañana le han pedido a la subdelegada del Gobierno que se reanude la búsqueda de los 12 pescadores desaparecidos y que se pongan todos los medios posibles.
El Villa de Pitanxo fue engullido por el mar en el Gran Banco de Terranova, a unos 460 kilómetros al este de San Juan. Contaba con una tripulación de 24 personas -16 de nacionalidad española, cinco peruanos y tres ghaneses-, de las que 12 permanecen desaparecidas.