El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, ha anunciado este lunes el traslado de la embajada estadounidense en Kiev a la mayor ciudad del oeste del país, Lviv, que se encuentra cerca de la frontera con Polonia. Según el Departamento de Estado, la decisión responde a una cuestión "geográfica" y por "seguridad" ante la amenaza de una invasión por parte de Rusia.
"Estamos en el proceso de reubicar temporalmente las operaciones de nuestra embajada en Ucrania en Kiev a Lviv debido a la dramática aceleración en la acumulación de fuerzas rusas", ha señalado Blinken en un comunicado.
El diario The Wall Street Journal ha informado de que el Departamento de Estado ha ordenado la destrucción de ordenadores y otros equipos para conectarse a redes en la embajada de Kiev, así como el desmantelamiento del sistema telefónico.
La medida se produce después de que Estados Unidos haya advertido de que Moscú podría lanzar un ataque contra Ucrania en cualquier momento, después de desplegar más de 100.000 tropas cerca de la frontera de la antigua república soviética y más tropas en Bielorrusia.
El portavoz del Pentágono ha afirmado este lunes que no cree que el presidente ruso, Vladímir Putin haya tomado una decisión sobre si invadir Ucrania, aunque subraya que es "totalmente posible" que haga un movimiento con poca o ninguna advertencia.
Pide que los estadounidenses abandonen Ucrania "de inmediato"
El secretario de Estado ha subrayado que la embajada "seguirá comprometida con el Gobierno ucraniano, coordinando el compromiso diplomático" en Ucrania y que continuará con sus "intensos esfuerzos diplomáticos para reducir la crisis".
En el comunicado, Blinken ha vuelto a pedir a los estadounidenses que residen en Ucrania que "abandonen el país de inmediato" y ha informado de que aquellos que busquen una asistencia de emergencia en Ucrania, deben completar un formulario "y el Departamento de Estado hará un seguimiento, según corresponda".
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Por su parte, el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, ha indicado que las advertencias de viaje y el traslado de la embajada han sido decisiones tomadas con la seguridad de los "ciudadanos estadounidenses en mente".
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ya advirtió este jueves de que los ciudadanos estadounidenses debían de marcharse del país antes de que la tensión degenere en un conflicto abierto.
Este lunes, Price ha anunciado también que los ciudadanos estadounidenses deben abandonar Bielorrusia debido a la acumulación de tropas rusas a lo largo de la frontera.
El "inquebrantable" compromiso de EE.UU. con Ucrania
El secretario de Estado ha subrayado además que las medidas tomadas por Washington "de ninguna manera socavan nuestro apoyo o nuestro compromiso con Ucrania".
"Nuestro compromiso con la soberanía y la integridad territorial de Ucrania es inquebrantable", ha destacado Blinken, quien ha recalcado que Estados Unidos continuará con sus "esfuerzos sinceros para llegar a una solución diplomática".
"El camino de la diplomacia sigue disponible si Rusia decide participar de buena fe. Esperamos que nuestro personal regrese a la embajada tan pronto como las condiciones lo permitan", ha añadido.
En una rueda de prensa, el portavoz del Departamento de Estado ha recalcado que Estados Unidos no ve "señales tangibles" de una disminución de las fuerzas rusas en la frontera con Ucrania.