El precio de la gasolina ha alcanzado un nuevo récord en nuestro país. De media la gasolina está a 1,56 euros y el diésel ha alcanzado su segundo valor más elevado de la historia: 1,44 euros, según el Boletín Petrolero de la Unión Europea.
Con estos precios llenar un depósito de 55 litros nos costaría 86 euros si es de gasolina y 79 euros en el caso del diésel. Por cada litro de carburante, cerca de la mitad de lo que pagamos son impuestos y la materia prima, el combustible en sí, supone un 35 % aproximadamente. Además, la subida o bajada del barril de Brent afecta a este porcentaje. Por último, también se incluye lo que cuesta la logística, la distribución, las estaciones de servicio y el personal.
Además, hay muchas diferencias de una gasolinera a otra, hasta más de 20 euros de diferencia si llenamos un depósito de 55 litros. En general las gasolineras más baratas son las de los Centros Comerciales y las llamadas low cost. El carburante no es de peor calidad, aunque se reposte en este último tipo de gasolineras ya que todos los combustibles que se venden en nuestro país proceden de la mismas refinerías. El abaratamiento lo obtienen de la ausencia de servicios como cafetería, tienda y ausencia de personal.
Diferencia de precio dependiendo de la comunidad
La diferencia de precios en las gasolineras se nota mucho al llenar el depósito dependiendo, también, de la comunidad en la que repostemos. Hacemos la comparativa de tres comunidades, Barcelona, Madrid y Valencia, con un vehículo con un depósito de 55 litros. En Barcelona, llenar el depósito en la gasolinera más barata nos costaría 78 euros y en la más cara 94 euros: una diferencia de 16 euros.
En Madrid nos costaría llenar el depósito 76 euros y medio: lo que supone 17,5 euros menos que en la más cara. Y en Valencia hay una diferencia de 23 euros entre la más cara y la más barata. Llenar el depósito en la gasolinera más barata nos costaría 63,3 euros. Unas diferencias de precio que afectan a los bolsillos de los consumidores.
¿De qué manera se puede ahorrar?
Ileana Izverniceanu, directora de comunicación de la OCU, ha expuesto algunas recomendaciones para poder ahorrar ante esta subida en los carburantes: “Buscando estaciones de servicio más baratas, la diferencia puede ser del 20 %. Como, por ejemplo, estaciones vinculadas a supermercados que hacen descuentos cuando haces la compra es un ahorro adicional. También podemos recurrir a técnicas de conducción eficientes: utilizar marchas largas, conducir con suavidad, intentar ir más despacio o apagar el motor en los atascos. Si subimos las ventanillas y controlamos la presión de los neumáticos, también ahorraremos".
Inés Cardenal es directora de Comunicación y asuntos legales en AOP: "El precio de la gasolina está en los niveles actuales como consecuencia de la subida del crudo y de los productos refinados en los mercados internacionales. Después de una caída muy importante durante el confinamiento en 2020, el crudo consistentemente ha ido subiendo de precio hasta el punto de que en el último año ha subido un 84 % y esa es la principal razón que está detrás de la subida en los carburantes en el surtidor", ha concluido.