Al menos 60 personas han muerto este martes en Cap-Haitien, al norte de Haití, después de que un camión cisterna haya explotado al sufrir un accidente.
Según ha explicado el vicealcalde de la ciudad, Patrick Almonord, en el momento de la explosión un centenar de personas estaban tratando de saquear el camión después de que se accidentase.
"Seguimos con el recuento" de víctimas, ha dicho el vicealcalde a la emisora 'Radio Télévision Caraïbes', subrayando que la cifra de 40 fallecidos es preliminar y podría aumentar.
El elevado número de heridos ha provocado que numerosas personas hayan tenido que ser atendidas en el suelo de un hospital de Cap-Haitien por falta de camas, según se ha podido comprobar en varias imágenes que han circulado por las redes sociales.
Este accidente con un camión cisterna se produce en un momento en el que Haití experimenta problemas de abastecimiento de combustible, y que ha provocado una generalización del comercio informal y ha transformado al carburante en una mercancía preciosa.
Problemas de abastecimiento con el combustible
Con problemas de abastecimiento desde octubre, la pasada semana el gobierno haitiano anunció un fuerte aumento de las tarifas de los derivados de petróleo, alzas que van desde el 24 % en el caso de la gasolina, al 108 % en el caso del gasóleo.
Sin embargo, los precios del carburante en el mercado negro son mucho más altos, dependiendo de la gravedad del desabastecimiento de combustible.
Todo ello ha provocado que el pasado fin de semana se produjesen las primeras protestas contra las subidas de precios de los combustibles.
En julio de 2018, el anuncio en el aumento del precio de los combustibles causó varios días de manifestaciones violentas en las calles y tensiones en Haití que sacudieron las bases de poder del entonces presidente, Jovenel Moise, y provocaron la dimisión del primer ministro, Jack Guy Lafontant.