Crece la tensión entre Rusia y la OTAN a cuenta de Ucrania. La alianza acusa a Moscú de concentrar tropas en la frontera con ese país y el presidente Zelenski ha alertado de un supuesto golpe de estado. Putin, por su parte, dice que es Occidente quien les amenaza a ellos al instalar infraestructura militar cada vez más cerca de su territorio.
El ejército ucraniano ha comenzado maniobras militares en respuesta al despliegue de tropas rusas cerca de sus fronteras. La inteligencia militar de Ucrania asegura que hay más de 90.000 soldados rusos preparados para lanzar un ataque inminente.
La OTAN, que también está haciendo ejercicios militares en Letonia, otro país con frontera con Rusia, corrobora la denuncia de Ucrania.
El Secretario General de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha asegurado haber visto "vehículos blindados pesados, drones y también tropas". A Stoltenberg se ha sumado el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, para avisar a Rusia de que "habrá serias consecuencias si vuelven a atacar a Ucrania", como ya ocurrió en 2014 cuando se anexionaron Crimea por la fuerza.
Los Estados miembros de la OTAN también se han mostrado este martes dispuestos a adoptar nuevas sanciones económicas contra Rusia si finalmente ataca Ucrania, después de que Moscú haya aumentado su presencia militar junto a la frontera de la antigua república soviética por segunda vez este año.
Rusia niega la acusación y señala a la OTAN
Sin embargo, el presidente ruso niega que estén preparando una intervención militar en Ucrania y señala "que es la OTAN y sus aliados quienes amenazan a Rusia". El presidente ruso considera que es la alianza quien ataca a su país por las maniobras militares cada vez más cerca de sus fronteras o los escudos antimisiles instalados en países como Polonia o Rumanía.
Ante la creciente tensión, Putin marca una línea roja: "Si Occidente instala sistemas de ataque en Ucrania responderemos con algo similar". Además, recuerda que en poco tiempo tendrán en funcionamiento el Tsirkon, un misil de crucero hipersónico con un alcance superior a los mil kilómetros que podría alcanzar sus objetivos en apenas cinco minutos.