Las tareas de extinción del incendio de Málaga, declarado el pasado miércoles en Sierra Bermeja, se centran este miércoles en liquidar los puntos calientes, unos trabajos que todavía durarán semanas tras quedar controladas las llamas que causaron la muerte de un bombero forestal, y dejaron arrasadas más de 9.600 hectáreas, además de obligar al desalojo de seis municipios cuyos vecinos ya han podido volver a sus casas.
Las labores de remate del Plan contra Incendios Forestales de Andalucía (Infoca), que ya no precisan de medios aéreos, han continuado durante la pasada noche y proseguirán durante el día y las siguientes jornadas dada la amplia superficie afectada.
En concreto, según ha informado el Infoca en un tuit, siguen trabajando 85 bomberos forestales, una unidad médica de incendios forestales, cinco técnicos de operaciones, la unidad móvil de meteorología y transmisiones, el director del centro operativo provincial de Málaga, seis agentes de medio ambiente y seis autobombas.
La delegada del gobierno andaluz en Málaga, Patricia Navarro, ha explicado este miércoles que, pese a que el incendio fue controlado, faltan "puntos calientes que se fueron eliminando" y que las labores de extinción se prolongarán en función de cómo evolucione "el aseguramiento de que el fuego no se reavive".
Todos los medios que participan actualmente son terrestres, "y los medios aéreos no se usan porque no son necesarios, pero están preparados por si algún foco se reaviva y tienen que actuar", ha añadido la delegada.
La investigación de las causas sigue con una reconstrucción
La investigación sobre las causas del incendio ha continuado con una recontrucción de las primeras actuaciones contra las llamas, para concretar qué vieron esos efectivos y cómo actuaron. De momento, la Fiscalía de Medio Ambiente considera, según los primeros datos de la investigación, que el incendio ha sido intencionado, aunque aún es pronto para tener información sobre la autoría.
La consejera de Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía, Carmen Crespo, ya apuntaba la semana pasada a que el incendio podía ser provocado, y entrevistada este miércoles en La Hora de La 1, ha avanzado que pedirán la declaración de zona catastrófica.
La Junta de Andalucía pedirá declarar Sierra Bermeja zona catastrófica
Respecto a las pesquisas sobre la autoría del incendio, la Delegada del Gobierno en Málaga ha apuntado que la Brigada de Investigación de Incendios Forestales que está a cargo, en colaboración con la Guardia Civil, trabjan ante la "hipótesis de que fue provocado", y ha expresado su deseo de que "cuanto antes" se aclare la responsabilidad del siniestro.
Según Navarro, no se pueden "aventurar" las fechas en las que podría completarse la investigación, porque "este tipo de investigaciones se deben hacer con paciencia, rigor y el tiempo que necesiten", porque se trata de "algo muy serio en lo que no se puede permitir ni un fallo".
"Ni somos héroes, ni podemos estar contentos con la situación"
Uno de los primeros bomberos que llegó a combatir el incendio de Sierra Bermeja es Alfonso Parada, que ha asegurado en La Hora de La 1 de TVE que no se consideran héroes. "Ni somos héroes, ni podemos llegar a estar contentos con la situación, porque viendo lo que tenemos a nuestras espaldas y después del desgraciado incidente con el compañero, no hay consuelo", ha asegurado.
La situación del incendio, según ha explicado este bombero, era cambiante "de un segundo para otro", porque en algunos momentos en que el fuego ya había pasado y el viento ha complicado mucho las tareas.
Otro de los bomberos que ha participado en el dispositivo contra las llamas es Alberto Cuesta, que ha descrito como "debido a la dificultad del terreno" y las llamas "tan altas, con tanta intensidad", la velocidad de propagación era "abrumadora" y en una situación así a veces "no queda otra que retirada".
Hablan los bomberos de Sierra Bermeja: "No somos héroes"
Este incendio ha sido el primero calificado en España de sexta generación y "casi inédito en los últimos años en Andalucía y probablemente en España" por sus carácterísticas, según aseguró el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, quien ya apuntaba a que el fuego había sido intencionado. Los incendios de sexta generación se caracterizan por ser capaces de modificar la meteorología de su alrededor. La capacidad humana no sirve para apagarlos, y solo elementos atmosféricos como la lluvia pueden lograrlo.
En la superficie forestal afectada por el fuego en Sierra Bermeja que vigilan los bomberos se encuentran árboles centenarios con grandes raíces que pueden continuar ardiendo y por ello emanan humo y hay que extinguir por completo el fuego en esos puntos, según fuentes del Infoca a Efe, que explican que es imprescindible hacer un trabajo de vigilancia.
Aunque se considera que el perímetro del incendio ya no variará, hay que estar atentos a los puntos calientes del interior para evitar que se pudiera quemar vegetación próxima que no hubiera ardido previamente.
Unos 70 bomberos forestales y cinco vehículos autobomba han actuado durante la noche junto a tres agentes de medio ambiente, un técnico de extinción y las unidades de transmisiones y meteorología y médica.
Un total de 2.670 personas fueron desalojadas de los municipios de Alpandeire, Júzcar, Jubrique, Genalguacil, Faraján y Pujerra a causa de la emergencia.