El ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, ha alertado contra la existencia de un “caldo de cultivo preocupante” que está calando en parte de la sociedad y al que ha responsabilizado del aumento de las agresiones homófobas y de su carácter “mucho más violento”, tal y como ocurrió el pasado domingo cuando un joven fue atacado con brutalidad en el madrileño barrio de Malasaña. En este sentido, ha asegurado que “hay discursos que están en el límite de lo que es procedente y oportuno” y ha dicho que Vox “juega en ese límite”. Vox, porsu parte, ha dicho que llevará a los tribunales a quien le vincule con la violencia.
“Estamos observando con preocupación un aumento en todas las agresiones, no solo en el ámbito homófobo o LGTBIfóbico sino en lo relativo a las distintas circunstancias personales y sociales y las que determinan a un colectivo”, ha señalado Marlaska en una entrevista en el Canal 24H.
Pero también ha subrayado que se observa una “mayor agresividad” en los últimos años “que denota un comportamiento mucho más violento” y que se está viendo en las últimas agresiones, como la de Malasaña o como la que quitó la vida a Samuel Luiz el pasado mes de julio.
Todo ello, ha dicho, es “consecuencia de un caldo de cultivo que se va generando en una sociedad” mediante “conductas, manifestaciones y discursos” en el “ámbito público” y también en las redes sociales, ha proseguido. “Creemos que no tienen importancia pero poco a poco van generando un espacio, una situación y una sensación” donde colectivos que “se caracterizan por un concreto comportamiento violento” pueden encontrar, ha dicho, “una mínima justificación a actos absolutamente deleznables”.
Critica el cuestionamiento de leyes de derechos civiles y el 'pin parental' de Vox
El líder de Vox, Santiago Abascal, publicó en Twitter su condena a la agresión el lunes, casi un día después de que se produjera, y en un hilo ligó el aumento de la violencia a la inmigración ilegal, como también hizo el secretario general del partido, Javier Ortega Smith.
“Evidentemente esto no es así”, ha criticado Marlaska, porque “el perfil del agresor en modo alguno se corresponde con esa indicación de que sea inmigrante ni irregula”. “En un porcentaje muy alto, el agresor es nacional español y varón”.
A continuación, ha criticado que “hay discursos que están en el límite de lo que es procedente, oportuno y lo que no” y de lo que es “admisible” para “nuestros valores democráticos de respeto a la dignidad humana, a la diversidad y a los derechos humanos”.
En este sentido, ha dicho que esos discursos “juegan con ese límite”, tras lo cual ha señalado a Vox por poner en cuestión leyes de derechos civiles y hablar del llamado ‘pin parental’. “El respeto a la diversidad no forma parte del diario político en primera línea” de la "ultraderecha", ha criticado Marlaska, y esto “unido a otras circunstancias concurrentes, genera ese caldo de cultivo y que en redes sociales los discursos se agraven e intensifiquen en cuanto al menosprecio del diferente”, ha zanjado.
En este sentido, ha dicho que “hay cuestiones sobre las que no se puede admitir reserva alguna” cuando tratan con “el respeto de los valores” y la defensa de la “diversidad, la dignidad y los derechos fundamentales”.
Marlaska no ha sido el único que ha vinculado a Vox con el aumento del odio en España. Tras la última agresión, dos ministras de Unidas Podemos, Irene Montero e Ione Belarra, señalaron sus "discursos de odio" y su "LGTBIfobia", y en la misma línea fueron otros partidos minoritarios de la Cámara. El PP, sin embargo, insiste en defender a Vox de estas acusaciones y este mismo miércoles ha llamado a no asociar a este partido con los delitos de odio.
Vox, por su parte, ha dicho que llevará a los tribunales "a todo aquel periodista, contertulio político o tuitero que vincule a Vox con actos de violencia" y les ha llamado "miserables".
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El colectivo LGTBI "no tiene que tener miedo"
De cualquier forma, Marlaska ha dicho que el colectivo LGTBI “no tiene que tener miedo” ya que “la sociedad española es mayoritariamente tolerante” y porque hay unas Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado “preparados y formados” para prevenir los delitos de odio, luchar contra ellos y proteger a las víctimas.
El Gobierno mantiene su compromiso con las libertades del colectivo, ha recordado Marlaska. El presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, presidirá la comisión de seguimiento de los delitos de odio este viernes, que ha convocado de forma urgente tras los últimos acontecimientos. Este miércoles, en el Congreso, ha Sánchez, ha instado también a todos los grupos parlamentarios a acelerar la tramitación de la Ley de Igualdad de Trato, también conocida como 'ley Zerolo', para garantizar que no haya "otra vez armarios".
Y respecto a la agresión en Madrid, ha aseverado que “los autores de estos hechos antes o después tendrán que responder ante la Justicia”. Ha reconocido que la investigación está siendo “compleja” pero ha confiado: “Esperemos que antes que tarde sean puestos a disposición judicial”.