El juez ha decidido el ingreso en prisión de dos de los ocho detenidos por su presunta implicación en la brutal paliza a un joven en la localidad vizcaína de Amorebieta, mientras que un tercero tercero mayor de edad ha quedado el libertad con la obligación de presentarse en el juzgado una vez al mes.
Los tres han comparecido este viernes ante el juzgado de Durango encargado del caso y dos de ellos, para los que se ha determinado prisión provisional sin fianza, no han declarado, según ha señalado a los periodistas Juan Erostarbe, letrado de uno de los arrestados, a la salida de los juzgados.
El tercero, de 38 años de edad, sí ha declarado ante el juzgado y "ha colaborado", según ha indicado. Después ha quedado en libertad con la obligación de presentarse una vez al mes en el juzgado. De acuerdo a su declaración, "no ha participado" en la agresión, según ha señalado otro de los abogados a los informadores.
La víctima permanece en estado muy grave
El joven, que se encuentra ingresado en el hospital de Cruces, en Barakaldo, se mantiene "estable", aunque sigue muy grave, según han informado fuentes familiares a Europa Press. Los médicos del hospital vizcaíno confían en poder practicarle una resonancia magnética a lo largo del fin de semana para poder conocer la evolución del daño que padece.
El suceso se produjo en la madrugada del pasado domingo, cuando alrededor de una veintena de jóvenes acorralaron y agredieron con palos y botellas a un joven de 23 años de Amorebieta (Bizkaia), que se encuentra ingresado en el Hospital de Cruces en estado muy grave.
La Ertzaintza detuvo a ocho personas, de entre 15 y 38 años, por la paliza al joven, que fue grabada en un video difundido en redes sociales.
De las ocho personas inicialmente arrestadas, cinco son menores, los cuales ya han sido presentados en la Fiscalía, mientras que los otros tres han sido puestos a disposición judicial esta mañana, una vez finalizadas las correspondientes diligencias policiales.
Finalmente el juez ha decretado el ingreso en prisión de dos de los adultos, mientras que el tercero ha quedado en libertad con la obligación de comparecer ante el juez cuando sea requerido. La Ertzaintza mantiene abierta la investigación del caso.