11.000 huellas de dinosaurio en La Rioja
Hace 120 millones de años gran parte de La Rioja era un delta fluvial, los dinosarios dejaron sus huellas en el barro, que más tarde se convirtió en piedra. En la región hay 11.000 huellas en 170 yacimientos. En uno de esos yacimientos, en La Era del Peladillo en Igea. Aquí se encontró por primera vez a un nuevo dinosaurio con una membrana entre los dedos. No ha sido el único hallazgo.
“El troncofosil, es el habitante más conocido en esta zona riojana, pero también había moluscos y tortugas“
El Alcalde de Igea, César Álvarez, nos ha contado que además de dinosaurios, había moluscos, especies vegetales y hasta una tortuga. Eran habitantes habituales de esta zona riojana. Aunque el más conocido de esta localidad es el troncofosil de dinosaurio.
En sesenta años de investigación, sólo se ha encontrado hasta ahora, dicen los expertos, una pequeña parte.
Se conoce su comportamiento, recorrido y cómo se alimentaban
Las huellas nos enseñan cómo se comportaban los dinosaurios. Si caminaban en la misma dirección. Si lo hacían solos o en grupo. Según los expertos, solían ir juntos cuando salían a cazar. También recorrían las playas porque ahí encontraban alimento.
El Gobierno de La Rioja defiende la candidatura a Geoparque de la Unesco por la riqueza del patrimonio paleontológico de la Comunidad.
En La Reserva de la Biosfera hay al menos 170 yacimientos, con más de 11.000 huellas de dinosaurio distribuidas en 22 municipios de los valles del Leza, Jubera, Cidacos y Alhama-Linares.
Patrimonio paleontológico, uno de los más numerosos del mundo
Por su gran número, calidad, estado de conservación y conocimiento científico, el patrimonio paleontológico riojano conforma el conjunto más importante de este tipo a nivel mundial.
Las icnitas o huellas de dinosaurio forman parte del patrimonio histórico español y, además, en La Rioja se han gestionado desde el ámbito cultural, ya que la mayoría están declaradas Bienes de Interés Cultural.
¿Qué es un Geoparque?
Un Geoparque Mundial de la Unesco es una figura de gestión de un territorio que cuenta con un patrimonio geológico singular, de relevancia internacional y con un alto valor para el conocimiento de la historia.
Este reconocimiento se concede a territorios vivos, en los que sus habitantes estén ínvolucrados con el patrimonio y hayan conseguido mantener su identidad.
Pretende ser una herramienta de trabajo con la que mantener un desarrollo sostenible.
Ostentar el reconocimiento como geoparque exige un compromiso con la conservación del patrimonio.
En España hay 15 territorios con la categoría de Geoparque, que se agrupan entorno al Foro Español de Geoparques.
¿Por qué un Geoparque en La Rioja?
Uno de los recursos naturales más importantes que atesora la Reserva de la Biosfera de los valles del Leza, Jubera, Cidacos y Alhama son las icnitas o huellas de dinosaurio que se conservan en este territorio desde hace más de 120 millones de años.
Por eso, La Rioja busca un mayor reconocimiento para los yacimientos. Este sello permitirá mejorar su conservación. La catalogación como geoparque supondría además un impulso al desarrollo económico y social de este territorio riojano.
En septiembre sabremos si La Rioja se hace un hueco en el mapa de tesoros paleontológicos.