El Día Mundial Contra el Cáncer, ha permitido poner de manifiesto que durante su convivencia con la pandemia, a lo largo del último año, se han reducido un 20% los diagnósticos de esta enfermedad. El temor al contagio ha hecho que muchos pacientes no acudieran al médico, o aplazaran esa visita pese a padecer algunos síntomas, a la espera de la evolución de los casos de coronavirus.
Esos cánceres están ahí, y saldrán a la luz. La buena noticia es que año tras año, los avances en el diagnóstico y tratamiento de estas enfermedades que agrupamos bajo la denominación genérica de cáncer, permiten alcanzar porcentajes mayores de supervivencia, cercanos incluso al 70%, junto con una mayor calidad de vida de los pacientes, que padecen menos secuelas y han de pasar menos tiempo en el hospital.
El Jefe del servicio de Oncología Radioterápica del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla, Pedro Prada, asegura que, a pesar del coronavirus “los pacientes han estado cubiertos y van a seguir estándolo, tanto desde el punto de vista del tratamiento como del seguimiento”. Además, en su condición de presidente de la Asociación Española Contra el Cáncer en Cantabria, el doctor Prada apunta que “en una situación complicada, se les ha proporcionado asistencia sicológica telefónica, porque ha habido un porcentaje importante de procesos depresivos entre estos pacientes”
Aproximadamente un 35% de los enfermos oncológicos han sufrido depresión en las especiales circunstancias que han determinado las restricciones por la pandemia. “Les ha asediado la intranquilidad, el pensar en los problemas añadidos que les podría acarrear un potencial contagio” señala el doctor Prada. “Como son pacientes que apenas salen de casa, ello ha contribuido a empeorar su estado de ánimo”. Los voluntarios, una vez más, han prestado su ayuda ajustándose a las limitaciones de las normas, para dialogar con los pacientes, aunque fuese por teléfono, y para auxiliarles en todo lo necesario.
Elevada supervivencia
Los avances tecnológicos y la excelencia del personal sanitario aseguran hoy supervivencias impensables hace pocos años. Aún hay personas que asocian un diagnóstico de cáncer con el final de su vida. “La realidad a día de hoy es que no es así”, asegura el Jefe del Servicio de Oncología Radioterápica del Hospital Valdecilla. “La cifra de un 53% de curaciones del cáncer es una media general, pero se puede llegar a alcanzar el 70% de curaciones. Depende de los equipos oncológicos que haya en cada comunidad o en cada país, y de la tecnología en gran parte”, añade Pedro Prada.
En este sentido, asegura que en Cantabria “somos afortunados desde este punto de vista, porque los equipos oncológicos son muy cualificados, y hemos tenido la suerte de que los gobiernos nos han escuchado y entendido, y han hecho una inversión muy importante en tecnología. En estos momentos estamos en condiciones de alcanzar esa cifra soñada”.
“En estos momentos estamos en condiciones de alcanzar esa cifra soñada de un 70% de curaciones“
Radioterapia intraoperatoria, oncotermia, braquiterapia, son algunas técnicas que permiten no solo tratar con eficacia el cáncer, sino hacerlo reduciendo al mínimo las secuelas y el tiempo de permanencia en el hospital. “Llevamos ya dos años con la radioterapia intraoperatoria, que permite abordar localmente a tumores avanzados. Es importante controlar a nivel local porque ello evita la extensión a distancia. El algunos casos que eran difíciles de atajar a nivel local, ahora estamos consiguiendo controles cercanos al 90 %. Es un paso de gigante”, asegura el doctor Prada.
La oncotermia es otra técnica que ha venido a apoyar la lucha contra esta enfermedad. Consiste en aplicar calor a través de ondas electromagnéticas que calientan solo las células tumorales, lo que permite un tratamiento microscópico, localizado y selectivo, que destruye las células malignas sin efectos secundarios. “Permite unir a los tratamientos estándar un tratamiento que no produce efectos secundarios y nos facilita curar tumores en el órgano en el cual se han originado. Valdecilla es el único hospital público que dispone de ella”.
La braquiterapia ataca a los cánceres desde dentro. “En lugar de atacarlo desde fuera, nos metemos dentro del tumor con diferentes robots, lo cual nos permite dar altas dosis de radiación en el propio seno del tumor, con lo que somos muy eficaces y no dañamos los tejidos sanos adyacentes”, explica el doctor Prada. El centro cántabro es el único del país que dispone de todas las técnicas de braquiterapia existentes, para todas las localizaciones y todo tipo de tumores.
Los cánceres de próstata, los más frecuentes en los hombres, son tratados con esta técnica, que el doctor Prada califica de “ciencia ficción”, porque “el paciente es tratado en el hospital de día, no precisa ni ingreso hospitalario. Es intervenido con una raquianestesia, del quirófano sale sin sonda, y en cuanto se recupera de la anestesia, unas pocas horas después, se va para su casa y puede hacer una vida normal desde el primer momento”. Es un tratamiento curativo, con mínimos efectos secundarios, en el que Valdecilla es centro de referencia y trata a pacientes de muchas comunidades autónomas.
Terapia de protones
El próximo objetivo del Hospital Valdecilla en la lucha contra el cáncer es la instalación de una unidad de terapia con protones. El Gobierno de Cantabria destinará 35 millones de fondos europeos a este fin, para convertir al hospital cántabro en el primer centro público del país que cuente con esta tecnología. “Permitirá tratar tumores que no se podrían curar si no es con esta técnica. Ello se debe a la alta energía de los protones, y a la precisión que permite evitar las estructuras sanas. Es la indicación ideal para tumores cerebrales y tumores de los niños. En ellos es muy importante evitar cualquier alteración, porque es un ser en crecimiento. Previene secuelas inmediatas y de futuro”, concluye el doctor Prada