A través de cartas, la Inspección de Trabajo y Seguridad Social ha impulsado un proyecto con la intención de actualizar y corregir la actual situación de empleadas del hogar con sueldos inferiores al Salario Mínimo Interprofesional (SMI). La campaña de sensibilización, dirigida a las personas empleadoras, pretende regularizar un sector "especialmente feminizado y afectado por la precariedad".
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Asimismo, el Plan de Actuación del Organismo Autónomo dará "prioridad a las denuncias presentadas y comunicaciones recibidas en el Buzón de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social" que comuniquen posibles irregularidades, subraya el departamento que dirige Yolanda Díaz.
Trabajo recuerda que para regularizar los salarios y cotizaciones, los empleadores tendrán que comunicar a la Tesorería General de la Seguridad Social el salario real de los empleados, que en ningún caso podrá ser inferior al SMI vigente: para una jornada completa es de 950 euros al mes en 14 pagas (1.108,33 euros al mes con prorrateo de pagas extras) o 7,43 euros la hora si se opta por esta modalidad.
Con esta medida, el ministerio intenta proteger a un colectivo que lleva años denunciando una importante desprotección laboral y al que la pandemia ha vuelto a golpear en forma de despidos.