Avicultor y aficionado a los caballos, era la tarjeta de presentación de Félix hasta el 2016. Ese año, todo cambió. Se cayó de un tejado en su granja, a pocos kilómetros de Toledo, y sufrió una lesión medular completa. Estuvo ingresado en el hospital Nacional de Parapléjicos casi un año. Con el alta en la mano, le comentó a su amigo Mario que quería volver a montar a caballo. “Toda una temeridad”, asegura, “arrimamos a Faraco, mi caballo de más de 20 años, a un muelle y me subí. Entonces, me dí cuenta que no, que montar es cosa de piernas, y yo ya no las tenía”.
La Real Federación de Hípica Española y la Doma Paraecuestre
Las ganas finalmente pudieron. Descubrir la existencia de la Doma Adaptada y entrar en contacto con la Real Federación de Hípica, a través de Fátima Cao, responsable del área paraecuestre, hicieron el resto. En poco tiempo, Félix tenía entrenadora: Itziar Auz y junto a ella, subraya, a su equipo de incondicionales: Montse (fisioterapeuta), Luis Miguel (cuidador de caballos), su amigo Mario y a su mujer, Crescen.
“En un principio, acudir a competiciones no estaba entre sus pensamientos, pero tampoco le importó cuando surgió la oportunidad“
Mejorar el tono muscular, el equilibrio y la motricidad eran la clave para poder volver a montar y en ésto concentró sus esfuerzos. En un principio, acudir a competiciones no estaba entre sus pensamientos, pero tampoco le importó cuando surgió la oportunidad.
División en 6 Grados, según la lesión del jinete
La Doma Clásica Adaptada divide a los deportistas en 6 grados. En el I compiten jinetes con mayor discapacidad y en el V, los de menor. En el grupo VI encontramos a los deportistas con discapacidad intelectual. Formando binomio con el caballo Merlín, el 2020 ha sido el año de Félix. Ha logrado en el Campeonato Nacional alzarse con el oro, en un duelo muy reñido dentro del Grado II con “otra grande” del paraecuestre, Natalia Quintana. Y, “como todo, pase lo que pase, es seguir”, repite con una sonrisa, y “buscar nuevas metas”, las siguientes ya están claras: el año que viene, poder acudir al Europeo y después… los Paralímpicos