Abi Ubayda al-Layti al-Balansi (el valenciano) se cree que fue un funcionario que vivió en el siglo X y cuyo oficio consistía en buscar orientación correcta hacia la ciudad sagrada de La Meca, con el objetivo de construir de mezquitas y centros de oración. Este tipo de técnicos especializados se denominaban Sahib Al-Qibla. El historiador valenciano del siglo XVII, Gaspar Juan Escolano dio como válida esta teoría para explicar la toponimia de Alcublas (Alqibla: orientación hacia la Meca).
“La orientación de algunos mojones coincide con ciudades de Oriente Medio“
Ahora, el estudio realizado por el catedrático de la UPV Gabriel Songel y su equipo va más allá, apuntando como hipótesis la existencia de un observatorio astronómico medieval ubicado en el término de Alcublas. En su trabajo, Songel destaca que “algunos de los mojones están dispuestos en un amplio arco y su alineación con el Alto de los Molinos coincide geográficamente con ciudades de Oriente Medio como Jerusalén y la Meca. También se puede triangular con otros puntos de interés más cercanos en la Comunitat Valenciana, como el Montgó, en Alicante, el Penyagolosa en Castellón, o el campo del Turia hasta el mar y Cullera, que se divisan desde el cerro a la perfección en días claros.”
En busca de la orientación hacia La Meca
Un punto estratégico que un siglo más tarde se convirtió en frontera entre las taifas de Valencia, Alpuente, Dénia y Albarracín. También se da la curiosa circunstancia que, realizando comprobaciones sobre mapas del Instituto Geográfico Nacional y el Instituto Cartográfico Valenciano, Alcublas se encuentra a la misma latitud que Toledo (paralelo 40) y en la misma longitud que Zaragoza (meridiano 1 oeste).
En el estudio se detalla cómo la disposición radial de los mojones sugiere diferentes orientaciones en el espacio, fácilmente vinculadas con el deber del astrónomo en busca de la orientación perfecta hacia la Meca (Alquibla) u otros lugares relevantes de la cultura andalusí, como Jerusalén. Hay también otros mojones orientados hacia Córdoba, León, Burgos, Zaragoza y Toledo.
Rafael Casaña, vecino y estudioso de Alcublas, ha catalogado 27 mojones y afirma: “Es una cantidad enorme, algunos tienen hasta tres metros de altura, algo inusual en el resto de la comarca”.
“Algunos mojones tienen hasta tres metros de altura, algo inusual“
“Otro dato que confirma la hipótesis del observatorio de Alcublas y las disposiciones de los mojones es la marca en una roca a cinco metros del Mojón Cerro que reproduce una línea vertical dirección norte, una línea horizontal dirección este-oeste, y una línea inclinada a 42º que, en el mapa, nos lleva la Alto de los Molinos. Alguien debió plasmar en la piedra los cálculos geográficos desde esa colina hacia un punto que no veía, pero sí sabía dónde estaba”, afirma Songel.
El descubrimiento de la Universidad Politécnica se produjo de forma casual mientras colaboraba con el Ayuntamiento de Alcublas en un proyecto de activación de turismo cultural. La investigación ha podido obtener resultados esperanzadores en un tiempo relativamente corto, gracias a la recopilación de diferentes estudios que el ayuntamiento ha ido publicando en los últimos años.