La pandemia del coronavirus ha traído a nuestras vidas un elemento hasta ahora desconocido para la mayoría de la población: las mascarillas. Todos sabemos que este elemento es un arma clave en la lucha contra la Covid-19, pero un mal uso de algunos tipos de mascarillas puede provocar el efecto contrario al que queremos conseguir. Te explicamos de una forma muy visual porque no sirve absolutamente de nada lavar las mascarillas quirúrgicas para poder reutilizarlas.
¿Por qué no cala el mensaje con las mascarillas?
No es la primera vez que, en un programa de televisión, radio o diarios, se informa sobre las distintas mascarillas y su posible reutilización. Las quirúrgicas o las FFP2 son dos tipos de mascarillas recomendables para la población general pero no pueden ser reusadas en ningún caso.
No todas las mascarillas protegen igual. En personas sanas o asintomáticas, lo recomendable es que se usen mascarillas higiénicas de tela, tal y como nos ha contado Boticaria García en La Hora de La 1.
Según Deborah Ciencia, este mensaje no está calando en la población porque a día de hoy sigue habiendo mucha desinformación y sobre todo por el precio de las mascarillas. “Hay gente que prefiere usar estrategias o trucos para reusarlas”, destaca Deborah.
¿Por qué estamos tan mal si llevamos varios meses usando mascarillas de forma obligatoria?
En esta pandemia hemos pasado por muchos estados de opinión respecto a las mascarillas. Primero solo eran necesarios para aquellos que estuvieran contagiados, después aconsejables para situaciones en las que no se pudiera garantizar el mantenimiento de la distancia de seguridad y finalmente se convirtieron en obligatorias en cualquier espacio público.
A pesar de ello, seguimos viendo como mucha gente sigue paseando por la calle sin saber usar bien este escudo ante el contagio del coronavirus. Para Deborah Ciencia este “mal uso” puede estar contribuyendo a los malos datos que tenemos.
¿Se pueden desinfectar todas las mascarillas?
La respuesta es simple: no. Circulan por internet y redes sociales diversos bulos relacionados con varios trucos para poder utilizar más de una vez mascarillas quirúrgicas, cuando en realidad tienen una vida útil de 4 horas. Algunos tratan de meterlas en el horno, otros las desinfectarlas con alcohol o desinfectantes. La realidad es que nada de esto sirve.
Deborah Ciencia nos enseña un curioso truco para comprobar el efecto negativo que tienen estas estrategias: “Llenando de agua una mascarilla sobre un vaso, se ve como no cae ni una gota. Sin embargo, si a esa agua le echas un poco de alcohol, baja la tensión superficial del agua. Esas moléculas del agua que tienen cierta fuerza de atracción entre sí, pero si introducimos una sustancia que hace que se separen, hace que se filtre”.