El toque de queda en Cataluña entrará en vigor este mismo domigo, después de que Consejo de Ministros haya aprobado el estado de alarma para dar cobertura legal a la medida.
La Generalitat ha decidido imponer la restricción de movilidad nocturna entre las 22.00 y las 06.00 horas, mientras que los establecimientos abiertos al público deberán cerrar a las 21.00.
Una hora después de la publicación del estado de alarma en el BOE, el conseller de Interior de la Generalitat, Miquel Sàmper, ha comparecido junto al Subdirector de Protección Civil, Sergio Delgado, para explicar la decisión del Govern y detallar las excepciones de la misma.
"Considerando la gravedad actual de la pandemia, Cataluña necesitaba un instrumento ágil para adpotar las medidas necesarias para poder combatir esta pandemia" ha comenzado Sàmper su declaración, que ha valorado que el decreto aprobado este domingo por el Gobierno central es "insuficiente".
El conseller de Interior ha argumentado que con la disposición publicada en el BOE, los gobiernos autonómicos solo pueden establecer confinamientos nocturnos, limitar las entradas y salidas de sus territorios y restringir las reuniones de personas: "Es un instrumento que permite cosas, pero no todo aquello que desde el Gobinerno de la Generalitat queríamos hacer".
Medida "indispensable"
"Debemos autoimponernos el confinamiento nocturno hoy mismo" ha afirmado Sàmper tras señalar que la medida es "indispensable" porque la pandemia está avanzando de manera incontrolable. También ha insistido en que este toque de queda no tiene una "vocación coercitiva" pero que su incumplimiento tendrá una carga sancionadora.
Entre las excepciones que sí permiten la movilidad durante la vigencia del toque de queda se encuentran el desplazamiento por emergencia sanitaria, tampoco afecta a los servicios esenciales, como los sanitarios o las farmacias, mientras que las actividades culturales podrán terminar a las 22 en lugar de las 21.
Por la mañana, el conseller de Interior avanzó en una entrevista con la emisora RAC1 en la mañana de este domingo la intención de decretar el toque de queda: "En cuanto tengamos el instrumento nuestra voluntad es poner en funcionamiento la restricción de movilidad nocturna, que queda mejor que el toque de queda".
Medidas complementarias
Sàmper adelantó también que las sanciones que se impondrán por el incumplimiento del toque de queda irán de los 3.000 a los 600.000 euros y advertía de que el toque de queda "no será suficiente" y que los responsables de los organismos competentes se reunirán este lunes a primera hora para estudiar otras medidas para combatir la pandemia, como los confinamientos diurnos o perimetrales.
"El toque de queda no es definitivo, se debe complementar", explicó el conseller que era partidario de aplicar el toque de queda antes de este domingo, aunque reconocía que con la declaración del estado de alarma, su implantación será rápida.