Túnez ha excluido a España de la lista de países seguros ante el riesgo por coronavirus y exigirá cuarentena obligatoria de quince días y pruebas PCR obligatorias a todos los viajeros llegados desde nuestro país.
La decisión supone el paso de la categoría "verde" a la "naranja", en cuanto a riesgo de contagio, y es donde se ubica también a otros países europeos como Andorra, Bélgica, Croacia, Grecia, Portugal, Polonia y Suecia.
La nueva directiva, difundida por la agencia de control de enfermedades contagiosas, especifica que todo viajero procedente de España, llegue en viaje directo o con escala, deberá presentar el resultado negativo en el test PCR, realizado con un máximo de 120 horas de antelación.
También deberá informar a las autoridades del lugar en el que va a pasar la cuarentena, sea su propio domicilio, en el caso de los tunecinos o los residentes extranjeros en el país, o en un hotel o centro de internamiento designado por las autoridades sanitarias en caso de los turistas o viajes de trabajo.
Los viajeros tendrán la opción de reducir la cuarentena a una sola semana si aceptan realizar un test PCR en el país, donde su precio es un tercio al que se exige en España.
Europa aumenta las restricciones hacia España por los rebrotes
Con ello, el país norteafricano se suma a las decisiones tomadas por algunos Gobiernos de Europa. El último en hacerlo ha sido Alemania, quien ha desaconsejado hacer viajes turísticos a Aragón, Cataluña y Navarra "por las nuevas cifras de infección" del coronavirus en esas comunidades autónomas españolas.
Se suma la cuarentena de 14 días que Reino Unido ha impuesto desde el pasado domingo a todos los viajeros procedentes de España, la recomendación de Francia a sus ciudadanos de no viajar a Cataluña, la prohibición de Bélgica para cualquier tipo de viaje no esencial a Huesca y Lleida o la decisión de Noruega de imponer igualmente la cuarentena a aquellos viajeros que procedan de España.
Uno de los países menos afectados de África
Túnez es uno de los países de África con menos contagios -oficialmente 1.468 infectados y 50 muertos- pese a que las medidas de higiene, la distancia social y la mascarilla apenas se respetan.
Las autoridades achacan esta excepción frente a sus vecinos -muy afectados por la pandemia- a la menor población en el país, a la reacción rápida del Gobierno, que cerró enseguida y durante más de tres meses y medio las fronteras, y a la falta de contacto con el exterior, ya que pese a ser una nación muy turística tiene poco movimiento de viajeros.
La decisión de degradar a España y a otros países europeos que se encontraban en verde -sin restricciones de entrada- ha coincidido con el anuncio de un posible cierre del aeropuerto de la capital en respuesta a un brote que ha contagiado a siete trabajadores y que las autoridades relación con un caso importado, como todos los que se han detectado en las últimas tres semanas.