La Organización Meteorológica Mundial (OMM) ha informado que está investigando los máximos históricos registrados en la localidad ártica rusa de Verjoyansk, situada más al norte del Círculo Polar y que es habitualmente uno de los lugares más fríos del mundo, pero que el pasado 20 de junio registró una temperatura de 38 grados centígrados.
La OMM está en contacto con las autoridades rusas para verificar este récord e incluirlo en sus archivos, según ha explicado en rueda de prensa la portavoz de la organización Clare Nullis, que subrayado que este máximo estaría relacionado con la actual ola de calor que sufre Siberia, con un aumento de los incendios forestales en la zona.
"La región de Siberia Oriental suele tener temperaturas extremas en invierno y en verano, por lo que temperaturas superiores a los 30 grados no son infrecuentes en julio", ha agregado la fuente oficial, citando datos del centro de investigaciones árticas y antárticas de Rusia, Roshydromet.
Sin embargo, este año se ha podido ver a gente bañándose en los lagos para escapar del calor. Los residentes locales aseguran que hace años no se podía entrar en el agua hasta el mes de julio, pero que llevan varios años alcanzando altas temperaturas a mediados de junio.
El verano más caluroso desde 1988 está trayendo devastadoras consecuencias
Marina Makarova, del Centro Hidro-meteorológico de Rusia, explica a TVE que la temperatura supera en 0,7 puntos el récord anterior de 37,3 grados registrado el 25 de julio de 1988. Además, según esta experta en medición del clima, lo más preocupante es que estas olas de calor extremo se están haciendo cada vez más habituales y prolongadas.
Esto está provocando, entre otros daños, devastadores incendios. Con 50 focos activos, en estos momentos, que están arrasando un territorio de más de 600 mil hectáreas.
"Son temperaturas totalmente anómalas y no llueve, lo que hace que la tundra y los árboles se sequen y ardan a la mínima", señala Vladímir Chuprov de Greenpeace Rusia a TVE.
El incremento de temperaturas duplica a la media mundial
La organización con sede en Ginebra destaca que el Ártico es una de las regiones donde el calentamiento global está siendo más pronunciado, con incrementos de temperaturas que duplican la media mundial, una reducción del 50 % en su volumen del hielo marino y temperaturas récord de su atmósfera en los pasados cuatro años.
Verjoyansk, junto con Oymyakon, son conocidos como los dos lugares más fríos del planeta, donde las temperaturas pueden bajar a más de 67 grados bajo cero, especialmente en invierno.
De acuerdo con el relator especial de la OMM para clima y extremos climáticos, Randall Cerveny, el récord de temperatura registrado en Verjoyansk se produce tras "una primavera inusualmente cálida en Siberia, que coincide con la falta de nieve en la región y un incremento de las temperaturas globales".
La OMM también recuerda que el pasado 6 de febrero la base argentina Esperanza también registró una temperatura récord de 18,4 grados en el extremo norte de la península Antártica, la zona más alejada del Polo Sur en ese continente.