El secretario general de la Asociación de Empresas y Servicios para la Dependencia (AETSE), Jesús Cubero, ha advertido en el Congreso de que llevan denunciando desde "hace años" las deficiencias puestas en evidencia en el sector durante la pandemia de coronavirus, al tiempo que a pedido a los diputados que dejen de "mantener discusiones políticas que irritan a los ciudadanos" y actúen para evitar repetir esta situación. "No podemos permitirnos el lujo de que un rebrote en otoño nos pille discutiendo y sin coordinación", ha declarado.
Durante su comparecencia ante el grupo de trabajo de Sanidad y Salud Pública de la Comisión de Reconstrucción de la Cámara baja, ha denunciado que el sector "no estaba preparado" para afrontar una pandemia como la del Covid vivida en los últimos meses y que sus responsables y trabajadores se han sentido "solos y desprotegidos", en el que han muerto alrededor de 20.000 residentes.
Por ello, ha reclamado una reforma del modelo de residencias de mayores en España, que se dirija a una atención sociosanitaria, con una mayor coordinación entre Servicios Sociales y Sanidad y con una mayor profesionalización de los servicios: "Hay que avanzar en este modelo creando equipos sociosanitarios de emergencia asistencial en residencias, con implantación de la telemedicina, de forma que se ligue la atención a los mayores en residencias con los servicios del SNS", ha declarado.
También propone contar con un sistema de acreditación equitativo, que sitúe a los centros por niveles de atención y, en base a ello, se pueda saber qué tipo de mayores pueden ser atendido en cada uno de ellos. Cubero también llama a crear una mesa de trabajo en la que, además de sindicatos y empresarios, se incluyan a las asociaciones de mayores, y quiere que se potencie la colaboración público-privada.
Cubero defiende el modelo de colaboración público-privada. A su juicio, el Estado lo que debe hacer es "controlar muy bien" y "definir" los estándares de calidad del sector" que, según ha indicado, es uno "de los más regulados" en el país.
Apuesta por "exportar" el modelo vasco y el catalán
Para el representante de los empresarios de estos centros, el nórdico es un buen modelo que "triplica los costes" del español. En este sentido ha apuntado que, si el sistema no ha siso capaz de conseguir que el Estado financie el 50%, como recoge la ley, y hay personas en lista de espera para acceder al mismo, le "cuesta pensar" que se va a "triplicar la financiación" y se va a aplicar dicho modelo. Por el momento, según ha indicado, su apuesta es "exportar" los modelos de atención de País Vasco y Cataluña.
En general, Cubero ha reclamado mayor financiación y, en concreto, una específica para la atención sanitaria en residencias, algo de lo que carece el sistema. Además, el compareciente se ha referido al personal, unos profesionales que se dedican al "cuidado" y "no a la cura", lo que ha provocado que hayan luchado en primera lineal contra el Covid19 "con limitaciones".
En este sentido, propone una formación reglada de los profesionales, con un refuerzo de la FP, que mejor su capacitación en un enfoque de cuidados sanitarios. Esta medida, ha indicado, también ayudará a que estos trabajadores se sientas valorados y reconocidos social y económicamente.
El Defensor del Pueblo pide dotar a las residencias de estructura médica
El Defensor del Pueblo, Francisco Fernández Marugán, ha recalcado por su parte la necesidad de dotar a las residencias de ancianos con "una estructura médica más amplia" y de "personal cualificado" y ha advertido del riesgo que podría suponer un nuevo brote sin que antes haya habido una correcta coordinación por parte de las distintas administraciones.
"La pandemia ha puesto de relieve una serie de disfunciones que hay que corregir, el sistema residencial de mayores adolece desde hace años de ellas", ha aseverado en la Comisión Mixta de Relaciones con el Defensor del Pueblo.
Ha denunciado a su vez la falta de personal y, en concreto, la falta de personal cualificado. ”Cada vez hay más usuarios con más edad y más dependencia y desde luego no hay personal para atender esta situación ni con la formación adecuada”, ha denunciado Marugán, que ha presentado un informe de la situación relativo a 2019, previo a la pandemia, alertando de que ya entonces existían esas deficienias.
”Lo razonable sería que estos centros contaran con una estructura médica y de enfermería más amplia y extensa para atender a unos dependientes que necesitan más atención en cada ejercicio”, ha añadido.