Los socios de la gran coalición de la canciller Angela Merkel han acordado este miércoles un plan de reactivación de la economía de Alemania después de la pandemia de coronavirus, con 130.000 millones de euros para apoyar a las familias, los Gobiernos locales y que prevé una reducción de impuestos.
Las cúpulas de los tres partidos -la Unión Cristianodemócrata (CDU) de la canciller Merkel, la Unión Socialcristiana de Baviera (CSU) y el Partido Socialdemócrata (SPD)- han establecido los términos del plan después de dos días de reuniones y sus detalles han sido explicados por la mandataria, acompañada por el ministro de Finanzas, el socialdemócrata Olaf Scholz.
El acuerdo prevé una reducción del Impuesto del Valor Añadido (IVA), el apoyo federal a las comunidades locales, afectadas por la crisis de la pandemia del coronavirus, así como la introducción de un bono o ayuda por hijo de 300 euros.
El plan anunciado tomará 60.000 de los 156.000 millones de euros de un paquete aprobado el pasado marzo, al inicio de la pandemia y su alcance es mayor de lo avanzado en los últimos días, cuando se valoraba un volumen de un máximo de 100.000 millones de euros.
La bajada del IVA - del 19 al 16 % en el tipo normal y del 7 al 5 % en el tipo reducido- estará en vigor a partir del próximo 1 de julio y hasta el 31 de diciembre.
Una "respuesta valiente" a la crisis económica
La canciller ha calificado el plan de "respuesta valiente" a la crisis económica más grave de la historia de la República Federal Alemana. De hecho, siete millones de trabajadores se encontraban en mayo en régimen de jornada reducida, un dato que se ha dado a conocer este miércoles y que, según Merkel, demuestra "la frágil base" sobre la que se encuentra la potencia europea.
"Queremos decirle a la gente de este país, ya sean empleados o empresarios, sean padres y madres, que intentamos salir con fuerza de esta situación difícil y que hemos colocado la piedra angular para ello", ha afirmado Merkel.
Bajada del IVA: alentar el consumo con una medida "socialmente justa"
Para el ministro de Finanzas, la bajada del IVA implicará una pérdida de 20.000 millones de euros en recaudación fiscal, aunque el Gobierno confía en que sirva para alentar el consumo.
"Es una medida socialmente justa porque el IVA lo pagan todos y esperamos que tenga un amplio efecto en la reanimación de la economía", ha añadido Merkel.
El paquete incluye también varias medidas de alivio fiscal para las empresas, como la ampliación de los traslados de pérdidas fiscales y la depreciación regresiva de las inversiones, que supondrá unos 8.000 millones de euros.
Para asegurar la supervivencia de las pequeñas y medianas empresas, se ponen a disposición hasta 25.000 millones de euros de junio a agosto para compensar las pérdidas de ventas relacionadas con el virus. A esto, se suman los 1.900 millones de euros para ayudar a las organizaciones culturales y sin ánimo de lucro a sobrevivir a los cierres de teatros, cines, óperas y otras instituciones relacionados con el virus.
Más presupuesto para los municipios y bonos para las familias
A nivel local, los municipios que se encuentren en dificultades financieras podrán contar a partir de ahora con mayores partidas presupuestarias de las arcas federales, un proyecto defendido desde hace tiempo por el socialdemócrata ministro de Finanzas, que ha destacado que se trata de una medida "duradera" y "estructural", sin límite de tiempo.
El gobierno ayudará a las entidades locales asumiendo la mayor parte de los gastos de vivienda para los desempleados y compensando la caída de los ingresos del impuesto sobre el comercio local. Esto le costará al gobierno federal unos 10 mil millones de euros.
Otra reivindicación que la SPD ha logrado imponer es el bono de 300 euros para las familias con hijos, con el que se pretende dar un impulso "para que las familias miren hacia adelante", aunque otra de las medidas propugnadas por Scholz, la condonación de las deudas antiguas de los municipios en peor situación financiera, ha quedado aparcada por el momento.
Además, los länder recibirán 3.000 millones de euros para mejorar y ampliar las guarderías así como las escuelas diurnas a tiempo completo.
Un futuro sostenible y tecnológico
La canciller Merkel ha subrayado que una parte importante del paquete de medidas está diseñado con miras a un futuro sostenible y cuenta con medidas económicas para avanzar en digitalización, fomentar la movilidad eléctrica y las energías renovables e invertir en campos innovadores como la computación cuántica y la inteligencia artificial para mejorar la competitividad de la industria alemana.
Uno de los puntos más contenciosos de las 21 horas de negociaciones, las subvenciones para la compra de coches con motores convencionales, quedó finalmente descartado, mientras que se duplicarán las ayudas para la electromovilidad.
El líder de la CSU Markus Söder, que era uno de los principales defensores de las primas para los coches a gasolina, ha concedido que la medida general de la bajada del IVA beneficiará también a la industria del automóvil convencional y ha afirmado que lo importante es "generar impulso" y "transmitir optimismo" en el "periodo determinante" de los próximos seis meses.
En cuanto al impacto financiero del paquete, el vicecanciller Scholz ha recalcado que Alemania dispone de las suficientes reservas como para poder permitirse las medidas sin recurrir al endeudamiento y que mantendrá "presupuestos sólidos para el futuro".
"Pueden confiar en que el ministro de Finanzas vigila bien el dinero", ha bromeado.