El primer ministro palestino, Mohamed Shtayé, ha pedido este lunes a la comunidad internacional que rechace el conocido como "acuerdo del siglo", que será revelado por el presidente estadounidense, Donald Trump, este martes como propuesta para solucionar el conflicto palestino-israelí.
"Queremos que la comunidad internacional no sea un socio en este acuerdo, ya que contradice el alfabeto del Derecho Internacional y los derechos inalienables de nuestro pueblo", ha señalado Shtayé, según ha informado la agencia palestina de noticias WAFA.
Trump, que confiaba en recibir el “apoyo” de los palestinos, se ha reunido en Washington con el primer ministro israelí, el derechista Benjamín Netanyahu, y con el líder de la oposición centrista, Beny Gantz, para trasladarles el contenido del acuerdo para el conflicto, que ha sido mantenido en secreto por el momento.
"Mañana a las 12.00 (17.00 GMT) anunciaremos el plan y es un plan muy grande, será una sugerencia para Israel y los palestinos", ha dicho Trump al recibir en el Despacho Oval a Netanyahu, quien, a su vez, afirma que se trata de “la oportunidad del siglo”.
Los líderes palestinos no han participado en la elaboració del plan
Por su parte, el primer ministro palestino Shtayé lo ha tildado de "plan para liquidar la causa" de su pueblo. Defienden que no fueron invitados a Washington, que ningún plan de paz puede funcionar sin ellos, y temen que el plan eche por tierra sus esperanzas de un estado independiente en Cisjordania, Jerusalén Oriental y la Franja de Gaza.
Así, ha sostenido que el "acuerdo del siglo" beneficia a Israel a costa de los derechos del pueblo palestino, antes de recalcar que no constituye una base sobre la cual trabajar para resolver el conflicto.
Shtayé ha manifestado que la propuesta sacude los pilares de la Iniciativa de Paz Árabe (aprobada en 2002 y respaldada posteriormente en 2007 y 2017) al tiempo que ha reiterado que Jerusalén Este debe ser la capital del futuro Estado de Palestina.
"Este plan busca alejar a Trump del aislamiento y proteger a Netanyahu de la cárcel. No es un plan de paz de Oriente Próximo", ha criticado, refiriendose a las acusaciones por corrupción contra el primer ministro israelí.
"Este plan no devuelve la tierra ocupada a su pueblo, no reconoce las fronteras de 1967, no reconoce Jerusalén como territorio ocupado, sino que se lo da a Israel como capital, lanza una guerra financiera contra la UNRWA, cierra la oficina de Palestina en Washington y trabaja para secar las fuentes financieras de la Autoridad Palestina", ha agregado.
Shtayé ha pedido además que "la nación árabe esté más unida que nunca y sea un escudo que proteja a Palestina de la gran conspiración y salvaguarde los derechos de su pueblo".
La Autoridad Palestina ya ha rechazado la mediación de Estados Unidos, argumentando que mantiene una postura sesgada y favorable a los intereses de Israel.
Trump anunció el 6 de diciembre de 2017 el cambio a Jerusalén su Embajada en Israel, dinamitando con ello el único punto de consenso en la comunidad internacional sobre el conflicto entre israelíes y palestinos: que el estatus de la ciudad santa debía decidirse en un eventual diálogo de paz.
Un total de 128 países se manifestaron en contra de este movimiento en una votación de la Asamblea General de Naciones Unidas, pese a lo cual Estados Unidos y sus aliados han seguido adelante con sus planes. Israel considera zanjada la cuestión de la capitalidad de Jerusalén.