Además de la estimación de votos y el cálculo de escaños, que apunta a una amplia victoria del PSOE y un desplome del PP, la encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) previa a las elecciones generales del 28 de abril arroja luz sobre un gran número de cuestiones de las que se hablarán en las próximas semanas de campaña electoral.
A continuación, una serie de datos clave que se desprenden de la macroencuesta preelectoral del CIS, que se realizó con más de 16.000 entrevistas personales entre el 1 y el 18 de marzo.
Cuatro de cada diez votantes aún no saben a quién votar
En la encuesta se ve que el 86,6% de los encuestados tiene decidido que irá a votar el 28 de abril, entre los que lo harán "con total seguridad" (76,3%) y los que irán "probablemente" (10,3%). Pero de ellos tan sólo un 57,8% asegura tener ya decidido el voto, lo que nos lleva a que hay un 41,6% de los votantes que están pensando qué votar y para los que la campaña electoral puede ser determinante.
Las principales disyuntivas de esos votantes se dan entre PP y Ciudadanos (11,9%), entre PSOE y Podemos (9,1%), entre PSOE y Cs (8,9%).
En este sentido, cabe señalar que los ciudadanos afirman seguir la información política y electoral sobre todo por televisión (84,1%) y en segundo lugar por las redes sociales e internet (39,5%), por delante de los que siguen las noticias de la campaña por la prensa (36,1%) o la radio (34,6%).
PSOE y PP, dominantes en el centro-izquierda y centro-derecha
En estas elecciones tan fragmentadas y polarizadas entre bloques de izquierda y derecha, los partidos de siempre comparten el espacio con los nuevos actores, pero mantienen su posición dominante. El PSOE se mantiene hegemónico entre los votantes de centro izquierda del mismo modo que el PP lo es entre los de centro derecha.
El espacio del centro tiene menos dueño desde que Ciudadanos lo ha ido dejando atrás y se ha volcado hacia el electorado del centro derecha. Vox está más escorado hacia la derecha de lo que Unidas Podemos lo está a la izquierda, y ni uno ni otro consiguen ser formaciones transversales, es decir, que conecten con electores del otro lado del espectro ideológico.
De dónde salen los escaños de Vox
La encuesta del CIS calcula que Vox, el partido que lidera Santiago Abascal, puede obtener entre 29 y 37 escaños (11,9%), una entrada poderosísima en el Congreso para un partido que en 2016 solo tuvo el 0,2% de los votos y que ahora apuntaría a ser la quinta fuerza parlamentaria.
De estos potenciales diputados, entre 3 y 4 vendrían de Madrid, otros 3 de Barcelona y podría conseguir un escaño en otras 24 provincias más. El resultado en Barcelona igualaría a Vox con Junts, la marca de Carles Puigdemont que agrupa al PDeCAT y a JxC, y dos escaños por encima del PP, al que el CIS solo otorga el escaño de su cabeza de lista, Cayetana Álvarez de Toledo.
Tras Madrid y Barcelona, Vox podría lograr dos escaños en Murcia, Alicante y Málaga, entre uno y dos en Cádiz, Las Palmas y Valencia, y uno en 14 circunscripciones. Almería, Granada, Jaén, Sevilla, Zaragoza, Tenerife, León, Salamanca, Valladolid, Ciudad Real, Cuenca, Guadalajara, Toledo y Coruña.
¿Es Vox de extrema derecha? El 52,8% cree que sí
El 52,8% de los ciudadanos considera que Vox es una formación de extrema derecha y lo coloca en una posición de 10 en una escala en la que 1 es izquierda y 10 es derecha.
En el punto opuesto del espectro político se encuentra Podemos, que es una partido de extrema izquierda para el 29,6% de los encuestados, que lo sitúan en el punto 1 de la escala, y un 21% por ciento que lo coloca en el punto 2.
El PSOE, por su parte, aparece entre las posiciones 4 y 5 con un 25,9 y un 18,3% de los votos; el 25,4% de los encuestados considera que el PP está en una posición 8, y la mayor parte sitúa a Ciudadanos en un punto intermedio entre PSOE y PP, en el 6 (18,7%).
El 'divorcio' con Podemos daña a Compromís y elimina a En Marea
Por estrategia o por discrepancias, la fragmentación política de estas elecciones también afectó a la izquierda, en concreto a las confluencias de Podemos. En la Comunidad Valenciana Compromís decidió concurrir por separado y en Galicia En Marea competirá con sus propios críticos y con Podemos. El resultado podría ser una pérdida de representantes, según el CIS.
En la Comunidad Valenciana, donde además se elige a un diputado menos en estas elecciones por la variación de la población, los nueve escaños de 2016 quedarían reducidos a entre cinco y seis para ambas formaciones (cuatro para Podemos, 1-2 para la candidatura de Joan Baldoví).
Mientras, en Galicia, los cinco escaños de En Marea junto a Podemos quedarían en tan solo dos para Unidas Podemos, uno por A Coruña y otro por Pontevedra, y la lista que encabeza Ana Seijas se quedaría sin representación parlamentaria.
El PSOE tiene el votante más fiel a nivel nacional
El PSOE tiene el mayor porcentaje de fidelidad de sus votantes entre los principales partidos, con un 61,3% de votantes que le apoyaron en 2016 y que afirman que volverán a hacerlo el próximo 28A. Saca en este aspecto mucha ventaja a Unidas Podemos (solo el 42,3% de quienes afirman que votaron a Pablo Iglesias y sus confluencias en 2016 planea volver a hacerlo), el PP (41,3%) y Ciudadanos (40%), que tiene al electorado más volátil en la actualidad.
Son también los votantes de Ciudadanos los que en una proporción mayor, casi tres de cada diez (29,5%), no tienen aún decidido qué harán, y el partido de Albert Rivera pierde votos tanto a la izquierda (un 5% dice que votará al PSOE) como a la derecha (un 6,1% podría cambiar la papeleta del partido naranja por la de Vox).
La fuga de votos también es un problema para Unidas Podemos: un 19% de sus votantes en 2016 afirma que ahora votará al PSOE, un camino que solo piensa recorrer a la inversa el 1,4% de los votantes socialistas de 2016.
En el caso del PP, un 11,2% de sus votantes en las últimas elecciones generales dice que ahora votará por Vox, y un elevado porcentaje de votantes, un 24%, aún no tiene decidido si repetirá su voto o cambiará de signo.
Trasvase de votos del PDeCAT a ERC
Mientras, el antiguo PDeCAT, hoy JxCat, el partido del expresidente catalán Carles Puigdemont, sería el que menos porcentaje de fidelidad de voto mantendría en las elecciones del 28 de abril, porque, según la encuesta, solo el 39,3% de quienes apoyaron a CDC hace algo menos de tres años tienen ya decidido volver a respaldar ahora la candidatura de JxCat.
Además, es el partido del que más fuga de votos hay hacia otra fuerza política, ya que el CIS recoge que el 28,6% de los votantes del PDeCAT en 2016 tienen decidido ya que ahora van a dar su apoyo a ERC.
El PP no conquista a los menores de 45 años
El análisis de la intención de voto más la simpatía hacia los partidos en función de la edad muestra a un PSOE muy aventajado como primera fueza en votantes de todas las edades. Por contraste, su principal opositor, el PP, es la penúltima opción a nivel nacional entre los votantes de menos de 45 años, y solo demuestra brío entre los pensionistas, es decir, los mayores de 65 años, pero aún a diez puntos de distancia del PSOE.
Los votantes más jóvenes, que incluyen tanto a los que votan por primera vez como a los menores de 24 años, tienen más preferencia por los partidos de izquierda que representan PSOE y Podemos (31,1%) que por los del bloque de PP, Cs y Vox (23,9%), partido este último que tiene una proporción de votantes mayor entre los adultos de 35-44 años.
El nivel de estudios favorece a Cs y Podemos
Aunque el PSOE es claramente la opción mayoritaria entre todos los votantes con independencia de su nivel educativo, la tendencia es que el voto vira en particular hacia Ciudadanos y Podemos a medida que aumenta el nivel de estudios terminados. Entre los españoles con estudios superiores, hay un cierto sesgo hacia los partidos de izquierda, PSOE y Podemos (30,4%) que hacia el resto de formaciones nacionales (28,2%)
Ciudadanos descolla entre los que cuentan con estudios superiores o formación profesional, mientras que el PP cae al cuarto puesto entre los votantes que tienen terminada la ESO o cuentan con estudios superiores. Por su parte, Vox cuenta con un apoyo relativo mayor entre quienes tienen estudios de Secundaria.
La España vaciada es bipartidista, con permiso de Cs y Vox
La llamada España vaciada, o despoblada, que en términos electorales equivale a las provincias que reparten cinco diputados o menos, tiene mucho que decir en estas elecciones tan fragmentadas. Y lo que dice en concreto es que sigue siendo sobre todo bipartidista, pero en ella también sacarían escaños Vox y Ciudadanos, según la encuesta del CIS.
Vox podría obtener representación en varias de estas provincias gracias a los escaños que podría conseguir en León, Salamanca, Valladolid, Zaragoza, Cuenca, y Guadalajara.
PP y PSOE se quedan con el resto de escaños en estas zonas, y Cs podría lograr ocho escaños, si entra en Teruel, Zaragoza, Valladolid y Zamora y previsiblemente en Teruel, Burgos, Ávila y Palencia, donde también Vox se mantiene en el umbral de conseguir un diputado.
Mientras, Unidas Podemos no consigue representación en ninguna de estas circunscripciones más que en Zaragoza.