Las autoridades del estado mexicano de Jalisco han atribuido el asesinato de tres estudiantes de cine desaparecidos en marzo a un cártel de drogas que los confundió con miembros de una banda rival. Salomón Aceves, Marco Ávalos y Daniel Díaz, que desaparecieron el 19 de marzo tras ser detenidos por supuestos policías, fueron asesinados y diluidos en ácido por integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) -el más poderoso de México-, según ha informado la Fiscalía General de Jalisco.
Los tres fueron vistos por última vez en el municipio de Tonala, cuando se les estropeó el coche. Posteriormente, fueron secuestrados por al menos seis personas que los torturaron y después los asesinaron.
"Sus cuerpos fueron disueltos en ácido para que no quedara rastro de ellos", ha explicado la oficina de la Fiscalía. Por el momento, el fiscal Raúl Sánchez ha informado de que ya han sido detenidas dos personas, Gerardo M. y Omar M., en el marco de la investigación.
Homenaje a los tres estudiantes asesinados en Jalisco AFP / Ulises Ruiz
Más de un mes de búsqueda
Sin embargo, una fuente consultada por Reuters ha asegurado que los investigadores están analizando más restos humanos encontrados en el edificio donde se disolvieron los cuerpos de los tres estudiantes.
El desenlace pone fin a más de un mes de angustia de las familias, de los que la Policía había tomado muestras de ADN de forma masiva en búsqueda de los cuerpos.
El secuestro, la tortura y la disolución de cadáveres son prácticas habituales en el país, donde fueron asesinadas más de 25.000 personas en 2017 (80 asesinatos diarios), lo que ha elevado la cifra de homicidios a récords de hace 20 años.
En 2014, la desaparición de 43 estudiantes en Iguala sacudió la popularidad del presidente Peña Nieto. Entonces, el Gobierno explicó que las 43 pesonas habían sido presuntamente secuestradas por la Policía, que después los entregó a una banda criminal que los asesinó y quemó.