Las autoridades iraníes han restringido el acceso a las redes sociales en el país, en un intento de reducir el impacto de las manifestaciones de protesta que se están produciendo en diferentes ciudades del país contra la política de austeridad del gobierno. Trece personas -doce civiles y un policía-, han muerto desde que comenzaron las protestas el jueves pasado y más de 300 han resultado heridas. Se han producido además más de 200 detenciones, varias de ellas este mismo lunes.
"Algunos manifestantes armados han intentado asaltar comisarías de policía y cuarteles militares encontrando fuerte resistencia por parte de las fuerzas de seguridad", ha indicado la cadena de televisión iraní.
El presidente estadounidense, Donald Trump, ha criticado las restricciones impuestas por el Gobierno iraní al señalar que "es la hora de un cambio", mientras que la alta representante para la política exterior de la Unión Europea, Federica Mogherini, ha declarado que el organismo espera que Irán respete el derecho a manifestarse pacíficamente y la libertad de expresión.
Las dos primeras víctimas mortales se registraron en la noche del sábado, en Doroud, al oeste del país. Posteriormente, el vicegobernador de esa provincia aseguró que las fuerzas del orden no habían disparado sobre los manifestantes.
Irán bloquea el acceso a redes sociales y servicios de mensajería por las protestas
El domingo por la noche murieron otros 10 manifestantes durante las protestas, dos de ellas en la localidad de Izeh -en el suroeste del país- y otras dos en Doroud. Los dos primeros fallecieron por disparos, aunque un diputado local ha indicado que aún se desconoce si las balas procedían de la Policía o de los manifestantes.
En cuanto a los muertos en Doroud, dos de ellos se produjeron en un incidente vinculado a las manifestaciones, ya que fallecieron cuando su vehículo fue arrollado por un camión de bomberos lanzado pendiente abajo por un grupo de manifestaciones.
Este lunes, según ha declarado un portavoz estatal en la televisión estatal, un manifestante en Najafabad ha disparado contra la Policía, lo que ha resultado en la muerte de un agente y otros tres heridos.
Cortes de las redes sociales
El viceministro iraní del Interior para temas políticos, Esmaíl Yabarzade, ha dicho que, "cuando hay algún conflicto, es natural el uso de algunas herramientas para controlar las concentraciones ilegales", ha informado la agencia oficial iraní de noticias, IRNA. Yabarzade ha aclarado que esta medida se aplicará por un tiempo y es circunstancial.
Casi todos los llamamientos a participar en las protestas se han llevado a cabo por redes sociales como Telegram e Instagram. No obstante, estas plataformas que desde el domingo por la tarde funcionaban mal y con cortes, dejaron de funcionar totalmente, y además la conexión al internet no va con normalidad.
Posteriormente las autoridades iraníes han cortado totalmente el acceso al servicio de mensajería WhatsApp, que en las últimas horas estaba reemplazando al de Telegram.
Asimismo, Yabarzade ha explicado que Irán está investigando para saber quiénes son los que están detrás de estos acontecimientos y ha agregado que "la caja negra de los recientes acontecimientos esta bajo revisión y todavía no han acabado las investigaciones".
Acusaciones contra Israel
El presidente iraní, Hasan Rohaní, ha apuntado este lunes que los disturbios han sido instigados desde el exterior, por "enemigos" que no han digerido el "el éxito de Irán" en la región y en el acuerdo nuclear suscrito en julio de 2015 con el G5+1 y que por ello animaron a la gente a protestar.
"Nuestro progreso para ellos era intolerable, nuestro éxito en el mundo de la política ante Estados Unidos y el régimen sionista (en referencia a Israel) fue intolerable para ellos", ha afirmado este lunes Rohaní en su reunión con los jefes de las comisiones del Parlamento del país, en declaraciones difundidas por la agencia local iraní ILNA.
Respecto a las protestas, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu ha dicho este lunes: "El cruel régimen iraní gasta decenas de miles de millones para propagar el odio. Este dinero podría haberse empleado en construir escuelas y hospitales".
Maniobras en la sombra
Por otro lado, el diario israelí Haaretz ha informado este lunes que Washington ha dado "luz verde" a Israel para eliminar al jefe militar iraní Qassem Soleimani, comandante del brazo armado de la Guardia Revolucionaria para las operaciones en el extranjero.
Entre otras actividades, Soleimani era considerado cerebro de las llamadas "guerras proxy", o conflictos en países del entorno geográfico en los que Irán ha participado o que ha propiciado por intereses propios.
El dato, según Haaretz, lo revela el diario kuwaití, Al-Jarida, considerado altavoz de intereses israelíes, y añade el periódico que hace tres años, Israel ya estuvo a punto de asesinar a Soleimani cerca de Damasco pero Estados Unidos frustró el intento dando aviso a Teherén de estos planes.
Acción judicial contra los agitadores
El jefe del Poder Judicial de Irán, el ayatolá Sadeq Amolí Lariyaní, ha ordenado este lunes a los fiscales de todas las ciudades del país enfrentarse con "determinación y seriedad" a los perturbadores y agitadores de las manifestaciones de protesta.
Según informó la televisión estatal iraní, en una reunión con responsables del Poder Judicial, Lariyani dijo que el pueblo debe seguir sus demandas por vías legales.
Subrayó que la vía de los perturbadores y agitadores es diferente a la del pueblo que tiene problemas y ordenó a los fiscales actuar con seriedad contra todos aquellos que destruyen los recursos comunes, bienes de las personas y con los que violan los derechos de la gente.
El ministro de Exteriores alemán, Sigmar Gabriel, ha hecho este lunes un llamamiento a Teherán para que "respete el derecho de los manifestantes a reunirse y elevar sus quejas de forma pacífica".
Los disturbios más graves desde 2009
Miles de personas han protestado en diversas ciudades de Irán desde el pasado jueves contra la política económica del Gobierno de Hasán Rohaní, el alto coste de la vida y la corrupción.
Las protestas son las más grandes que se han vivido en el país desde los disturbios en 2009 que siguieron a la reelección del entonces presidente Mahmoud Ahmadineyad. Son particularmente problemáticas para el gobierno de Rohaní ya que fue elegido con la promesa de garantizar los derechos a la libertad de expresión y reunión.
En su primera reacción pública a las protestas contra su política económica, Rohani ha reconocido este domingo el derecho del pueblo a expresar su opinión, pero ha dicho que las manifestaciones no deben ser violentas.
"Irán es una nación libre y, según las leyes constitucionales, el pueblo tiene derecho a expresar su crítica y su protesta", pero la finalidad debe ser "una mejora de la situación del país y de la vida de la población", ha señalado Rohaní en una reunión de su Gabinete, según la agencia IRNA.
El presidente iraní, Hasan Rohaní, en su primera reacción pública a las protestas.
El principal logro del presidente iraní es el acuerdo de 2015 con la comunidad internacional para frenar el programa nuclear de Irán a cambio de un levantamiento de la mayoría de las sanciones internacionales.