El nuevo gobierno de Austria ha tomado posesión este lunes en Viena con ultraderechistas en algunas de sus carteras clave.
El gobierno está presidido por el canciller federal Sebastian Kurz, del democristiano Partido Popular (ÖVP). Heinz-Christian Strachel, del ultraderechista Partido de la Libertad (FPÖ), ocupa la vicecancillería. El FPÖ también obtiene las carteras de Interior, Asuntos Exteriores y Defensa.
Frente al jefe de Estado, el ecologista Alexander van der Bellen, los 16 miembros del nuevo gabinete han prestado juramento en la sede presidencial, mientras unas 3.500 personas protestaban contra la llegada al poder de la extrema derecha.
El presidente austríaco, Alexander van der Bellen, habla durante la ceremonia de toma de posesión del nuevo gobierno REUTERS/Leonhard Foeger
"Soy consciente de que muchas personas en Austria ven con buenos ojos los planes del nuevo gobierno, otros están a la espera, mientras que muchos son escépticos o los rechazan. Tengo comprensión hacia ello, en una democracia existen diversas opiniones", ha dicho Van der Bellen en un breve discurso en la ceremonia.
El presidente ha recordado que, pese a la distancia ideológica (Van der Bellen proviene de Los Verdes), se ha llegado a acuerdos durante las negociaciones para formar gobierno en política europea y en el respeto a los derechos humanos y libertades.
Policías antidisturbios ante los manifestantes que protestan por la entrada de la ultraderecha en el gobierno austríaco AFP PHOTO / JOE KLAMAR
Austria tiene finalmente un gobierno para los próximos cinco años tras las elecciones parlamentarias del pasado 15 de octubre.
De los 16 miembros del nuevo Ejecutivo, nueve son del ÖVP y siete fueron nombrados por el FPÖ, entre ellos la ministra de Exteriores, Karin Kneissl, de 52 años de edad, aunque no milita oficialmente en la formación. El Gobierno de conservadores y ultranacionalistas tendrá 113 de los 183 escaños.