Un grupo de unos 250 inmigrantes subsaharianos han intentado esta madrugada un nuevo salto al perímetro fronterizo que separa Ceuta de Marruecos, pero han sido repelidos por la Guardia Civil en colaboración con las fuerzas marroquíes.
Según han informado a Efe fuentes de la Guardia Civil, el asalto se ha producido sobre las 04.00 horas de la madrugada en la zona fronteriza próxima a la conocida como Finca Berrocal, lugar donde tienen una mayor facilidad para llegar hasta el perímetro debido a las partes ciegas donde las cámaras no pueden detectarlos.
Durante algo más de una hora, los agentes marroquíes y los integrantes del instituto armado desplazados hasta ese punto del perímetro fronterizo han estado trabajando para evitar el intento de salto a la valla.
Colaboración entre España y Marruecos
La actuación a ambos lados de la frontera ha logrado que finalmente ningún subsahariano haya pasado la doble valla, pese a que muchos de ellos intentaron encaramarse a la misma o cortarla para poder alcanzar su objetivo.
Según las fuentes, a medida que se iba repeliendo el intento de salto, las autoridades marroquíes iban formando grupos de subsaharianos que seguidamente eran subidos en furgones para alejarlos del perímetro fronterizo, lo que ha logrado dispersar a los inmigrantes.
Desde la Comandancia de la Guardia Civil de Ceuta se ha informado a Efe que desde primeras horas de la noche del jueves los efectivos del instituto armado y de la Jefatura Superior de Policía se desplazaron tanto por el perímetro como por el paso fronterizo del Tarajal, ante el aviso de una posible avalancha.
Es el cuarto intento de la semana, el tercero frustrado por la presencia policial después de que pasado día 8, un millar de inmigrantes intentaron un salto al perímetro fronterizo y solo 24 horas otros trescientos subsaharianos quisieron entrar a Ceuta a la carrera por el paso fronterizo del Tarajal, consiguiéndolo 187 de ellos.
Además, este nuevo intento de salto coincide con el cierre el pasado miércoles durante una semana del paso froterizo del Tarajal para mercancías.
Redadas en la parte de Marruecos
Las redadas que la Gendarmería marroquí está realizando en los bosques más próximos a la frontera con Ceuta han permitido reducir la presencia de inmigrantes subsaharianos, aunque se calcula que todavía hay asentados más de 500 personas.
Fuentes policiales han informado a Efe de que a principios de agosto se tenía la constancia de que más de 1.500 inmigrantes subsaharianos ocupaban los bosques de Beliones próximos al perímetro fronterizo con Ceuta a la espera de un salto masivo del doble vallado.
La intervención de la Gendarmería marroquí ha conseguido reducir la cifra, ya que muchos de ellos han sido trasladados en autobuses a zonas del sur del país marroquí más alejadas de la frontera con Ceuta. Aún así, se estima que más de medio millar de inmigrantes subsaharianos todavía están asentados en el otro lado del vallado a la espera de una entrada.