Al menos 20 policías han muerto y otras 32 personas, 25 agentes y siete civiles, han resultado heridos en un atentado suicida perpetrado por los talibanes ante un cuartel policial en Kabul, según el balance ofrecido por la misión de la OTAN en Afganistán.
El portavoz de la Alianza Atlántica, el coronel Michael Lawhorn, ha indicado que esa cifra de muertos y heridos se basa en los datos suministrados por el Centro Nacional Afgano de Mando Militar
El atentado a ocurrido a primera hora de la tarde, cuando un insurgente suicida ha detonado las bombas que portaba en su chaleco a la entrada de las dependencias de la Policía Nacional Antidisturbios, según un portavoz de la Policía de Kabul, Javid Niazi,
Los talibanes han reivindicado después el ataque en un comunicado, en el que elevan la cifra de fallecidos hasta 40. "El atentado fue perpetrado por el atacante buscador de martirio [suicida] Muhammad", indica en la nota el portavoz talibán, Zabihullah Mujahid, que relata que se ha hecho estallar contra un grupo de agentes que estaban saliendo del edificio.
Las fuerzas de seguridad afganas inspeccionan los alrededores del cuartel de la policía atacado por un talibán suicida. REUTERS
Una zona poblada en una ciudad con atentados frecuentes
El jefe adjunto del área de Comunicaciones de la misión de la OTAN, afirma a su vez en un comunicado que "una vez más, los terroristas se han dirigido contra una zona poblada sin tener en consideración vidas inocentes".
“Ir contra aquellos que defienden a sus compatriotas afganos no avanza en la causa de la paz“
"Los talibanes no tienen ningún plan para el desarrollo de Afganistán. Ir contra aquellos que defienden a sus compatriotas afganos no avanza en la causa de la paz", añade.
Afganistán vive uno de los periodos más sangrientos desde la caída del régimen talibán en 2001, de forma que Kabul se ve sacudida por atentados de forma frecuente. En el último de ellos, hace diez días, siete miembros de una productora audiovisual perecieron cuando viajaban en un vehículo.
El 70 % de la capital afgana permanece, además, a oscuras desde el pasado martes, a causa de un ataque talibán a una torre de alta tensión en el noroeste del país. La OTAN ha anunciado que en 2016 triplicará su presencia en el país hasta cerca de 12.000 efectivos, por la situación de inseguridad.