Una delegación de senadores españoles ha intentado visitar este viernes sin éxito al dirigente opositor venezolano Leopoldo López, detenido en una prisión militar a las afueras de Caracas y acusado por las autoridades de orquestar actos de violencia durante las manifestaciones de febrero de 2014.
Acompañados por la mujer de López, Lilian Tintori, los senadores Andrés Gil (PSOE), Iñaki Anasagasti (PNV), Dionisio García (PP) y Josep Maldonado (CiU) se han acercado este viernes por la mañana hasta la cárcel de Ramo Verde. También formaba parte del grupo el uruguayo Pablo Mieres, del Partido Independiente (PI).
"Quiero decir al pueblo venezolano y sobre todo a los dirigentes políticos que se encuentran injustamente encarcelados que no los vamos a dejar en esta lucha (...) que vamos a seguir", dijo a los periodistas el senador socialista Ander Gil.
Gil ha explicado, en declaraciones telefónicas a Europa Press, que utilizaron "todos los cauces legales para solicitar la visita" en la prisión de Ramo Verde, pero no recibieron "ninguna respuesta, ni afirmativa ni negativa", por parte de las autoridades. El Gobierno de Nicolás Maduro tampoco les ha dado "ninguna razón" por la que no pudiesen efectuar esta visita.
En este sentido, ha confirmado que han desistido tras hora y media esperando a las puertas del penal, algo que ya vivieron "exactamente igual" el jueves cuando intentaron ver a Daniel Ceballos, exalcalde de San Cristóbal, en la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN).
Nicolás Maduro: "Es vomitivo"
Ante esta situación, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha dicho que es una "falta de respeto" que la oposición venezolana invite a la "ultraderecha española" para que supuestamente trace el rumbo del país.
"Es muy irritante que venga gente de España a decirle a Venezuela qué debemos hacer nosotros, eso es vomitivo (...) no necesitamos que venga la ultraderecha de Rajoy a venir a trazarle a Venezuela, 200 años después (de su independencia), cual debe ser nuestro rumbo", ha dicho en una entrevista al canal estatal Telesur.
"La llamada MUD (alianza opositora venezolana Mesa de la Unidad Democrática) se trae a la ultraderecha española (...) es vomitivo, y digo vomitivo porque es lo que me provoca cuando los veo y los escucho, porque es una falta de respeto a una historia y a un pueblo. Los problemas internos de Venezuela los definimos nosotros", ha señalado.