El magnate estadounidense Donald Trump ha anunciado que se presenta como candidato republicano para las elecciones presidenciales del 2016.
"Soy oficialmente candidato a la presidencia de Estados Unidos, y vamos a devolver a este país su grandeza," ha dicho el millonario en una reunión en Nueva York.
Trump, de 69 años, ya estudió hace cinco años la posibilidad de aspirar a la candidatura presidencial por el Partido Republicano para los comicios de 2012, pero no lo hizo.
Este martes, sin embargo, ha confirmado su intención de competir para llegar a la Casa Blanca en un discurso de marcado tono nacionalista pronunciado en la torre que lleva su nombre, en el centro de Manhattan. El magnate ha criticado el avance de China en la economía mundial y también la presencia de inmigrantes mexicanos en Estados Unidos.
"Nuestro país necesita un líder grande y verdadero", ha afirmado Trump: "Necesitamos a alguien que haga grande a este país de nuevo, y lo podemos hacer", ha insistido.
Una vida de excesos
Su candidatura a la Casa Blanca supone el corolario a la biografía de este magnate inmobiliario, encarnación simultánea del sueño y la pesadilla estadounidenses en una vida llena de ascensos y caídas, trufada de divorcios, libros, vodka y hasta un reality show en televisión.
"Nunca se puede ser demasiado avaricioso" es su eslogan y él mismo se ha encargado de definir el día de su adhesión a la carrera presidencial "un gran día para Estados Unidos", con el hashtag #MakeAmericaGreatAgain (devuelve la grandeza a Estados Unidos).
Como en la película "Ciudadano Kane", inspirada, a su vez, en el magnate William Randolph Hearst, Donald Trump nació en una familia de clase media el 14 de junio de 1946 en Queens, en Nueva York, para luego convertirse en un megalómano gurú cuyo fan número 1 es él mismo. Se licenció en 1968 en Economía Financiera por la Universidad de Pensilvania, comenzó como obrero en la empresa de su padre del que heredó a los 28 años el negocio y le dio un giro para acabar con el dominio sobre el negocio inmobiliario.
En 1982, además de haber construido la torre con su nombre en Manhattan, ya era dueño de tres casinos en Atlantic City y había abierto su propia aerolínea (Trump Shuttle). Y hoy Forbes cifra su fortuna en 4.100 millones de dólares.
"Es tangible, es sólida, es hermosa. Es artística, desde mi punto de vista. Simplemente amo el negocio inmobiliario", escribiría, al resumir sus bases filosóficas y estéticas. De ahí salen también las sombras de su imperio: impúdico en su neoliberalismo, su intolerancia, su ostentación y su extravagancia, su éxito lo convenció no solo de que todo es posible, sino de que cada uno labra su propia suerte, por lo que su trayectoria destila pocas concesiones a los débiles.
Doce candidatos republicanos a la Casa Blanca
Con su anuncio, ya son doce los políticos que han mostrado su intención de aspirar a la candidatura presidencial del Partido Republicano para los comicios de noviembre de 2016. Jeb Bush formalizó su candidatura hace apenas un día. El descendiente de una de las sagas familiares que más poder ha acumulado en Estados Unidos se presenta como uno de los grandes favoritos, aunque las encuestas de los principales medios del país lo sitúan en empate técnico junto al senador por Florida Marco Rubio y al gobernador de Wisconsin, Scott Walker, quien todavía no se ha presentado oficialmente.
Los otros contendientes son Carly Fiorina y Ben Carson -primera mujer y primer afroamericano en presentarse a la carrera presidencial por el Partido Republicano-, Mike Huckabee y los senadores Rand Paul y Ted Cruz, entre otros.