La presidenta de Andalucía, Susana Díaz, ha reconocido este miércoles en Toledo que tiene "ambición" política y no ha descartado luchar "en el futuro" para liderar el PSOE, lo que supondría enfrentarse en unas primarias al actual secretario general de su partido, Pedro Sánchez. "Ya se verá", ha dejado en el aire.
En un acto informativo en Toledo, la presidenta andaluza ha afirmado que tiene "ambición por cambiar las cosas" y ha reconocido que está "en la estación" cuando fue preguntada por si ya ha pasado su tren para liderar el PSOE.
"Pude ser secretaria general el pasado verano... O no, porque quizás no me hubieran votado.. El tren pasó, ahora no me preocupa, si vuelve a pasar el tren, ya se verá, y si no pasa, tampoco pasa nada, no tengo ningún problema por eso", ha respondido Díaz cuando se le ha preguntado por sus aspiraciones futuras.
"Si en la estación me quedo, pues me quedo, y si pasa otro tren, ya se verá", ha insistido.
Da su opinón a Sánchez "con lealtad y sinceridad"
Ante la insistencia de si batallará con su secretario general para liderar el partido o ser candidata en las elecciones generales, Díaz ha reconocido que ella es sincera y que "es sano" tener "ambición".
No obstante, ha indicado que no va a "colaborar para que la imagen sea de líos internos" cuando la gente "lo está pasando mal" y ha dejado claro que apoya al actual secretario general del PSOE.
Preguntada acerca de si ve improvisaciones y bandazos en la gestión de Pedro Sánchez, ha recalcado que el PSOE "está donde tiene que estar, que es en la centralidad de este país", que ha contribuido a "vertebrar".
Ha recalcado que ella es una mujer "de partido" y que el líder de los socialistas "siempre" contará con su apoyo.
En este sentido, ha apuntado que cuando las cosas no le gustan se lo traslada a Sánchez "con lealtad y sinceridad". No obstante, en su intervención de mas de una hora en Toledo, no ha mencionado expresamente ni una vez al secretario general socialista.
Por otro lado, Díaz ha querido "confesar" que ella misma le dijo el pasado verano al secretario general del PSOE de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, que era un buen candidato para liderar el partido a nivel nacional.
A su juicio, había "distintos referentes que hubiesen sido buenos timoneles para este barco" y, en concreto, ha asegurado que García-Page tiene "capacidad para llegar donde quiera".