El gobernador del Banco de España, Luis María Linde, ha advertido aún existe riesgo de que resurjan preocupaciones por la insostenibilidad de la deuda soberana en Europa, y esa posibilidad crece con la actual situación de ralentización económica en la zona euro.
"Los riesgos no han desaparecido totalmente", ha señalado el gobernador durante la inauguración del X Encuentro del Sector Bancario organizado por el IESE y Ernst 6 Young, donde ha repasado los retos y riesgos a los que se enfrenta la banca en el corto plazo.
En declaraciones a los medios de comunicación posteriores a su discurso de inauguración, el gobernador ha insistido en que hay una relación clara entre la evolución de la situación macroeconómica y la de la deuda soberana, que hace que esta variable sufra las consecuencias de un reducido crecimiento.
"Cuanto más bajo sea el crecimiento, esos riesgos, que estaban alejados, pueden volver a reaparecer", ha dicho Linde. Aunque ha insistido en que la evolución de la economía está siendo menos favorable de lo previsto inicialmente, el máximo responsable del Banco de España ha señalado que, a su parecer, las posibilidades de que resurjan los problemas con la deuda siguen "lejos".
Durante su intervención, el gobernador ha asegurado que las perspectivas de la economía española son aún favorables, puesto que el país ha mostrado una gran resistencia a un entorno de revisiones a la baja de las previsiones económicas y de pérdida de vigor en Europa, aunque ha resaltado la necesidad de seguir con las reformas.
Riesgos del sector bancario
Además, el gobernador ha repasado otros riesgos a los que se enfrenta el sector bancario europeo a corto plazo, como los cambios en la regulación y supervisión, las dudas sobre la rentabilidad del sistema en Europa, que pueden poner en riesgo la sostenibilidad del negocio a medio plazo, o la debilidad macroeconómica de la eurozona.
"El sector bancario no es inmune a estos riesgos", ha admitido, tras recordar que hay que seguir corrigiendo el alto nivel de endeudamiento y que la ratio de morosidad sigue en niveles más elevados que hace un año (aunque en 2014 haya experimentado una "leve mejora").
Entre los diferentes retos, Linde ha avisado de que las diferentes prácticas contables en Europa, sobre todo las referidas a las provisiones, afectan a la homogeneidad de los niveles de capital de la banca europea. "Hay que esperar a que el MUS [Mecanismo Único de Supervisión] contribuya a una convergencia hacia la homogeneización de las normas contables", ha indicado.
En cualquier caso, Linde ha asegurado que la posición del sector español ha mejorado de forma "notable", por diversos factores que van desde los profundos cambios que se han producido en el marco institucional europeo hasta la reestructuración del sistema español, que ha contribuido a la reducción de desequilibrios acumulados.