Miles de personas se han manifestado en la capital de Venezuela y en otras ciudades del país a favor y en contra del presidente del país, Nicolás Maduro. En las últimas horas tres personas han muerto en las protestas, según informa Reuters.
La oposición ha marchado en favor de la libertad y en respuesta al llamamiento que desde prisión hizo el líder opositor Leopoldo López. A través de una carta distribuida entre los manifestantes y leída por su mujer, López ha calificado a Maduro de "dictador de Venezuela" y le ha pedido su renuncia para "abrir paso a un mejor futuro" para el país y en la que el preso asegura que aunque está "aislado" se siente "fuerte y firme".
También se ha dirigido al publico el dirigente opositor Carlos Vecchio sobre el que pesa una orden de captura. El alcalde de Caracas ha exigido la liberación inmediata de Leopoldo López, los alcaldes opositores y los estudiantes detenidos por las manifestaciones.
"Venezuela vive uno de los momentos políticos más difíciles de su historia contemporánea, se nos pone a prueba a nosotros como nación (...) se han restringido todas las libertades, y cuando digo libertad me refiero a la libertad de la patria", ha dicho Vecchio, que ha sido ovacionado por una multitud.
El oficialismo por su parte ha llamado a movilizarse por la paz y contra el vandalismo y la destrucción que han producido los opositores y según el presidente Maduro han dejado perdidas por diez mil millones de dólares.
Choques entre la policía y los opositores
Tras la marcha opositora algunos grupos decidieron ir hacia el municipio Chacao, en el este de Caracas, con la idea de activar nuevamente una protesta en la zona como lo han hecho a lo largo de las últimas cinco semanas, y fueron reprimidos fuertemente por la Policía y la Guardia Nacional (policía militarizada).
Ha sido López quien ha convocado a marchar por la "libertad", invitación la que apoyaron la alianza de partidos opositores y el movimiento estudiantil, que también pidieron la liberación de los dos alcaldes que fueron detenidos el miércoles pasado, acusados de fomentar la violencia en sus municipios.
El alcalde metropolitano de Caracas, Antonio Ledezma, también ha exigido "la liberación inmediata" de Leopoldo López, los alcaldes opositores de San Cristóbal (oeste), Daniel Ceballos, y de San Diego (centro), Enzo Scarano, y los estudiantes detenidos por supuestamente contribuir con la violencia en las protestas, entre otros cargos.
Condenas al "vandalismo"
El jefe del Estado, por su parte, ha ofrecido un discurso a los universitarios que marcharon para condenar los hechos de vandalismo en el marco de las protestas opositoras y ha asegurado que "la derecha venezolana" ha derivado en posiciones "extremistas" y "neofascistas" y ha quemado 15 universidades.
"Que nadie le quede duda, no estamos exagerando. No solo quemaron la Unefa (Universidad Experimental de la Fuerza Armada) de San Cristóbal, han quemado 15 universidades o recintos universitarios en el país y hoy lo denuncio ante el mundo. En Venezuela hay un golpe de Estado contra el pueblo", dijo Maduro.
Sin embargo, aseguró que esos grupos violentos son "una minoría dentro de la minoría" que no ocupa ni el 10 % de la población, y llamó a la oposición a participar en el "diálogo nacional por la paz".
Desde que se iniciaron las protestas hace mas de un mes 34 personas han muerto, 400 han resultado heridas, y más de un millar han sido detenidos aunque la mayoría de ellos ya están en libertad.