Un total de 226 personas, entre inmigrantes y personal del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), están siendo tratadas en Melilla para evitar ser contagiadas al haber podido entrar en contacto con un inmigrante que padece meningitis y que se encuentra ingresado en estado grave en la UCI del Hospital comarcal de Melilla, según han informado a Europa Press desde el Gobierno de la Ciudad Autónoma de Melilla.
Así, ha subrayado que desde la detección y confirmación del caso se han llevado a cabo "todas las medidas de prevención y control incluidas en el protocolo de vigilancia epidemiológica de las Enfermedades de Declaración Obligatoria de la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica".
Además, ha apuntado que se han identificado todos los contactos cercanos al inmigrante enfermo, "como son las personas que conviven con él, las personas que han pernoctado en la misma habitación del caso los diez días anteriores a su hospitalización, y el personal sanitario que haya tenido contacto directo con las secreciones nasofaríngeas del enfermo".
En concreto se ha considerado contacto cercano a todos los residentes en la habitación donde pernoctaba el caso en el CETI, a todos aquellos residentes que a juicio de los servicios sanitarios del Centro consideren como contactos cercanos del caso, a todo el personal que presta servicio en el CETI y a todo el personal sanitario que atendió al paciente en el hospital.
El CETI está saturado
La Ciudad Autónoma ha explicado que de acuerdo a los procedimientos establecidos se ha administrado quimioprofilaxis (QPX) para evitar la aparición de casos secundarios y reducir la transmisión a todos los contactos, un total de 226 personas.
Así, ha indicado que se ha utilizado como primera elección para la QPX el ciprofloxacino y como medida de prevención adicional, ha solicitado la vacuna frente a Nesisseria meningitidis conjugada tetravalente (A, C, Y, W) que se administrará a todo el personal que presta servicios en el CETI y a todo el personal sanitario que atendió al paciente en el hospital.
La Ciudad Autónoma ha admitido además que el elevado número de inmigrantes que acoge el CETI en los últimos días, más de 1.900, hace que esté saturado el centro de acogida y "ha supuesto que el número de contactos cercanos del caso haya sido potencialmente superior a lo habitual ante la detección de un caso de enfermedad meningocócica".
En este sentido, ha subrayado que el Servicio de Epidemiología de la Ciudad Autónoma de Melilla, el Instituto de Salud Carlos III (Centro Nacional de Epidemiología y Centro Nacional de Microbiología) y el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad "mantienen una comunicación permanente para el seguimiento y control de la situación, así como valorar la aplicación de protocolos de intervención".
Esta misma comunicación permanente se mantiene entre la Ciudad Autónoma y la Delegación del Gobierno en la ciudad.
Melilla avisa: No hay motivos de alarma
La Consejería de Bienestar Social y Sanidad de la Ciudad Autónoma de Melilla, que ha asegurado que no hay motivos para la alarma entre la población de Melilla, ha concretado que el día 15 de marzo ingresó en el hospital de Melilla el caso de enfermedad meningocócica invasiva causada por la bacteria Neisseria meningitidis del serogrupo W en un inmigrante originario de Gabón.
El paciente estaba acogido en el CETI desde su llegada a España el 18 de febrero de 2014 y comenzó con síntomas propios de la enfermedad el 14 de marzo de 2014. El paciente fue ingresado en el hospital al día siguiente del comienzo de síntomas. "Ha evolucionado desfavorablemente y actualmente se encuentra ingresado con complicaciones debidas a la enfermedad" en la UCI del Hospital Comarcal.
Asimismo, ha destacado que "inmediatamente tras la detección del caso se aplicaron las medidas incluidas en los protocolos de vigilancia epidemiológica procediendo a identificar y dar profilaxis antibiótica a todos los contactos cercanos del caso".
En este sentido, ha asegurado que "a fecha de hoy no se ha identificado ningún otro caso con sintomatología compatible de la misma enfermedad", por ello ha recalcado que "una vez aplicadas las medidas de control apropiadas, el riesgo para la salud pública en Melilla y en la Península se estima bajo".
La meningitis es la inflamación del tejido delgado que rodea el cerebro y la médula espinal, llamada meninge. Esta enfermedad, contagiosa, progresa con mucha rapidez, por lo que el diagnóstico y tratamiento precoz es importante para prevenir secuelas severas y la muerte.
30 inmigrantes a la península
Unos 30 inmigrantes, entre sirios y subsaharianos, salieron este jueves por la noche de Melilla rumbo a la península, en concreto en la conexión marítima hacia Málaga, una medida que busca aliviar la situación límite que vive el CETI, que sigue muy saturado.
Según han informado a Efe fuentes policiales, este traslado forma parte de la programación habitual que se realiza prácticamente de manera semanal, por lo que no supone una medida excepcional debido a la situación del CETI.
El centro continúa con una ocupación de casi cuatro veces su capacidad idónea, que es de 500 plazas.
La remisión a la península de un mayor número de inmigrantes, cuya cifra no se ha hecho pública, se debe producir en los próximos días, aunque todo dependerá de que se completen los protocolos necesarios y de los espacios disponibles en los centros de acogida y en los CIE.
La salida desde Melilla de inmigrantes requiere, por un lado, un control sanitario, así como contar con un registro policial, trámites en los que se está trabajando para conseguir enviar a la península en el menor plazo posible a personas acogidas en el CETI.
Ésta es una de las prioridades, según las fuentes, junto con la de contener nuevas entradas masivas, la última de ellas registrada el pasado martes cuando entraron a la ciudad unos 500 subsaharianos.