El opositor ucraniano Dmytro Bulatov, que denunció haber sido torturado por desconocidos durante una semana, ha llegado a Vilna, Lituania, para recibir atención médica.
Muy activo dentro de la oposición contra el presidente Víktor Yanúkovich, Bulatov desapareció el pasado 22 de enero en Kiev y reapareció el pasado viernes gravemente herido. Bulatov asegura haber sido secuestrado y torturado durante una semana.
Bulatov, que apareció en televisión con heridas en la cara y en las manos, ha asegurado que sus captores le torturaron y le crucificaron. "Me crucificaron. Me pincharon las manos. Me cortaron la oreja, me rajaron la cara. No hay un solo punto indemne en todo mi cuerpo, pero aún estoy vivo, gracias a Dios", ha declarado.
Lituania se compromete a ayudar a los heridos de Ucrania
El ministro lituano de la Salud se ha comprometido a ayudar a todos los ucranianos heridos en las protestas antigubernamentales.
Además, la mediación de diplomáticos de la Unión Europea (UE) ha conseguido que se retirasen los cargos que pesaban sobre Bulatov por participar en las revueltas y por los que la policía ucraniana quiso detenerle durante su ingreso en un hospital en Kiev.
El líder del partido opositor Alianza Democrática Ucraniana por las Reformas (UDAR en sus siglas en ucraniano) Vitalio Klitschkó declaró el pasado viernes tras visitar a Bulatov en el hospital que "lo que le han hecho a Dmytro es un acto para asustar a todos los ciudadanos que son activos".
Bulatov, de 35 años, era uno de los promotores de las "Automaidán", caravanas de protesta con vehículos. En la mayor de ellas, 2.000 coches llegaron a 300 metros de la residencia de Yanúkovich.