El número de niñas y jóvenes en riesgo de padecer mutilación genital en España se ha incrementado un 61% en los últimos cuatro años y ahora son casi 17.000 las menores de 15 años en esta situación, hijas de familias procedentes de países africanos en los que se realiza esta práctica.
Cataluña concentra el 36,6 % del total de estas jóvenes de menos de 15 años, con más de 6.000 chicas, unas 2.000 más que en 2008, mientras que el municipio español con más mujeres menores procedentes de países donde se practica la Mutilación Genital Femenina (MGF) es Zaragoza, con 818 en riesgo de padecerla.
Estos datos forman parte del Mapa de la MGF en España 2012, que este viernes ha dado a conocer en rueda de prensa en Barcelona la antropóloga Adriana Kaplan, que dirige la Fundación Wassu de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) y trabaja desde hace más de veinte años en la prevención de esta práctica, extendida en numerosos países, principalmente en el África subsahariana.
Las mujeres que han sufrido una mutilación tienen cuatro veces más probabilidades de presentar problemas durante el parto y de que sus hijos nazcan con problemas de salud, algo de lo que "sólo es consciente una minoría", ha dicho Kaplan, que ha destacado la importancia de la prevención y la pedagogía.
El estudio destaca que un 42,5% de los profesionales de la salud de Gambia -principal país en el que se practican mutilaciones- están a favor de esta práctica y que un 47,2% tiene intención de hacérsela a sus hijas.
Kaplan considera que disponer de esta información pormenorizada de la población en riesgo de padecer MGF por comunidades autónomas y municipios españoles "permite aproximarnos a la realidad y es esencial para cualquier tipo de planificación para la prevención primaria en salud, trabajo social y educación".
Compromiso del Gobierno a erradicarla
El Gobierno ha expresado este viernes su rechazo y el de toda la sociedad a la mutilación genital femenina y ha manifestado su "firme compromiso" para la erradicación de esta práctica a través del impulso de "todas las medidas que resulten necesarias".
Lo ha hecho en una declaración aprobada en el Consejo de Ministros con motivo del Día Mundial de Tolerancia Cero con la Mutilación Genital Femenina, que se conmemora el 6 de febrero, y en la que recuerda que la ablación se practica casi siempre en menores y constituye una violación de los derechos de la niña.
"Es una práctica extremadamente dañina y una manifestación especialmente cruel de la violencia que se ejerce contra las mujeres y las niñas por el hecho de serlo", señala el Ejecutivo.
Esta práctica supone "un acto criminal" por el que se impide a las mujeres el pleno disfrute de sus derechos fundamentales y se generan graves consecuencias físicas y psicológicas tanto a corto como a largo plazo.
"Límite infranqueable" a las tradiciones
Para el Gobierno, el respeto a las tradiciones culturales, debe tener como "límite infranqueable" el respeto a los derechos humanos con lo que prácticas como la mutilación femenina "no pueden, en ningún caso, contar con amparo o legitimación".
Recuerda que España, en consonancia con las orientaciones internacionales en esta materia, ha promovido a lo largo de los últimos años distintas reformas legislativas para promover la sanción y persecución de la ablación.
En la declaración, el Ejecutivo valora el trabajo tanto de la sociedad civil como de los profesionales y las organizaciones especializadas públicas y privadas a la hora de sensibilizar sobre la existencia y gravedad de este problema. No obstante, añade que a pesar de los esfuerzos, es necesario seguir trabajando para prevenir, detectar y finalmente, eliminar esta práctica.
Sostiene el Gobierno que los factores culturales profundamente arraigados en las comunidades donde se lleva a cabo esta práctica "son obstáculos que desde una perspectiva intercultural y el respecto a las tradiciones es necesario cambiar" para promover su deslegitimación social.
Asegura que la Estrategia Nacional para la Erradicación de la Violencia contra la Mujer 2013-2016, aprobada por el Consejo de Ministros el pasado 26 julio, contiene un eje específico denominado "visibilización de otras formas de violencia sobre la mujer", en el que está incluida la ablación.
El Gobierno indica que además de colaborar con las organizaciones especializadas, lo hace con las instituciones de la Unión Europea en la adopción de instrumentos normativos y el desarrollo de acciones en materia de lucha contra esta práctica.
El objetivo, reitera, es que "todas las mujeres y niñas, con independencia de su origen, raza, religión o cualquier otra circunstancia personal y social, disfruten plenamente de su dignidad y los derechos que les son inherentes".