La presidenta de Castilla-La Mancha y secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha asegurado que su partido rechaza que Cataluña tenga una financiación "singular" y que cualquier iniciativa en ese sentido pasa por mantener la igualdad y el principio de solidaridad entre regiones.
De esta forma, ha respondido a la propuesta de la líder de los "populares" catalanes, Alicia Sánchez-Camacho, que ha pedido a su partido una financiación específica para Cataluña, que se basaría en la limitación de la solidaridad entre regiones, como una de las formas de enfrentarse al proyecto soberanista de Artur Mas.
Cospedal ha dicho en rueda de prensa que el nuevo modelo de financiación autonómica tratará "de igual manera a los españoles, con independencia de donde vivan", y ha considerado "lógico" que haya opiniones diversas sobre dicho modelo entre los dirigentes de su partido, refiriendose, ante preguntas de las periodistas, a las declaraciones del presidente de la comunidad de Madrid, Ignacio Gonzalez, de convocar una consulta en su región si se aprueba una financiación diferente para Cataluña.
La secretaria general del PP también ha defendido que el futuro modelo de financiación autonómico tiene que pasar por la solidaridad de toda España, que "es más una suma de personas que de territorios".
Un modelo basado en la igualdad y la solidaridad
Además, ha lanzado una crítica al anterior Gobierno socialista al que ha acusado de no haber negociado la financiación teniendo en cuenta el "consenso", una cuestión que en palabras de Cospedal no repetirá el Partido Popular.
La presidenta del Partido Popular en Cataluña, Alicia Sánchez-Camacho, ha participado por primera vez en la llamada reunión de maitines a la que concurre la dirección del partido y ha esbozado su propuesta de financiación que, a grandes rasgos, se basa en en garantizar la ordinalidad y en limitar el principio de solidaridad que implica el reparto de fondos entre comunidades.
La fórmula se asemejaría a la que utilizan los lander alemanes donde las autonomías no pierden posiciones en el ránking de riqueza tras aportar a la caja común. Además, la dirigente del PPC ha pedido que su partido lidere "una nueva transición" que detenga el proceso soberanista.
En esta línea, Cospedal ha reiterado el apoyo del PP a las iniciativas de los "populares" catalanes para frenar el independentismo y ha recordado que una mayoría de catalanes también se siente español aunque muchas veces "no están suficientemente representados y no tienen voz".
Por esta razón, ha avanzado la adhesión del PP nacional a la concentración en Barcelona del próximo 12 de octubre con motivo del Día de la Hispanidad convocada por una plataforma ciudadana bajo el lema "Somos Cataluña, somos España".
Cospedal ha asegurado en esta rueda de prensa que el PP tiene "mucho margen" en Cataluña porque "son muchos" los ciudadanos de esa comunidad "que se sienten españoles" y no quieren que la "deriva independentista" les obligue a quedarse "fuera" de España o de la UE.
"Son muchos los catalanes que se sienten catalanes y españoles" y de ahí el "amplio margen" que tiene su partido, ha insistido. Además ha insistido en el ofrecimiento de pacto que el PPC ha hecho al PSC, Unió y Ciutadans, y ha pedido a estos partidos que se presten al menos al diálogo.
El PSOE da la bienvenida a Sánchez-Camacho a la vía del diálogo
Por su parte, el secretario de Organización del PSOE, Óscar López, ha dado la bienvenida a la vía del diálogo y las propuestas a Sánchez-Camacho, aunque ha precisado que hay que esperar a conocer su propuesta en profundidad.
Asimismo, le ha deseado "suerte" para convencer al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, para que se sume a esa línea, ya que hasta ahora "no ha querido escuchar ninguna otra propuesta".
López ha valorado el paso dado por el PP catalán pero también con el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, al defender el principio de ordinalidad y un nuevo sistema de financiación autonómica.
Según ha asegurado López, había tres posturas en torno al asunto catalán: la del presidente de la Generalitat, Artur Mas, y "el viaje a ninguna parte"; la de Rajoy o "la política del avestruz, esconder la cabeza y mirar para otro lado", y la que defienden PSOE y PSC, del diálogo, a la que recientemente se ha adherido el líder de Unió, Josep Antoni Duran Lleida.