El incendio originado el pasado viernes en el municipio mallorquín de Andratx que también ha afectado a otros puntos de la Sierra de Tramuntana se encuentra estabilizado y permanece a la espera de ser controlado, después de haber calcinado a un total de 2.335 hectáreas.
El consejero de Medio Ambiente, Agricultura y Territorio del Gobierno balear, Gabriel Company, ha explicado que, aunque el perímetro es de 2.335 hectáreas, en este hay una serie de zonas que no se han quemado. Además, ha añadido que, puesto que el fuego no ha sido controlado, podría "reprender" en algunos espacios.
La dirección general de Emergencias del 112 ha rebajado a las 9.33 horas el nivel 1 de alerta, en una escala de 0 sobre 3, del Plan Especial de Emergencias el incendio forestal declarado el pasado viernes en Andratx, que quedó estabilizado totalmente este martes, si bien todavía no ha sido dado por controlado.
Así, lo ha informado el IBANAT en un comunicado, en el que explica que Emergencias ha propuesto rebajar al Nivel 1 el incendio que afecta a la Serra de Tramuntana, por lo que, a partir de ahora, será la Conselleria de Medio Ambiente la que tomará la gestión del mismo.
El nivel 1 implica que ya no hay peligro para las personas y todo indica que podrá darse por controlado en las próximas horas, según han precisado las mismas fuentes a Europa Press. El fuego se encuentra estabilizado totalmente desde las 11.00 horas de este martes, tras estabilizarse el último foco que afecta a la zona de Galatzó.
Se espera controlar este viernes las llamas
De esta forma, tras estabilizarse las llamas, se espera que sean controladas este miércoles, después de que se iniciasen el viernes, a consecuencia de las brasas de una barbacoa que se tiraron sobre hierba seca por parte de un hombre, que fue detenido este lunes por la tarde y que está pendiente de pasar a disposición judicial acusado de un presunto delito de incendio.
Cabe recordar que los 250 residentes de la localidad mallorquina de Estellencs que fueron evacuados se encuentran en sus domicilios, después de que el lunes por la tarde se llevara a cabo su realojo tras ser evacuados en la madrugada del pasado sábado ante la cercanía del incendio iniciado por la quema de rastrojos y que aún no está estabilizado.
Actualmente, ya no hay ningún evacuado por el incendio iniciado el viernes en Sa Coma Calenta, en Andratx, que obligó a desalojar a 700 personas en Estellencs el sábado, así como a unas 25 personas en la zona de Andratx el viernes.
En relación a la polémica surgida por el posible efecto que han tenido los recortes en la evolución de este incendio, el consejero ha hecho hincapié en que los medios que hay actualmente en la extinción de incendios "son los mismos" que encontraron. Así, ha indicado que al inicio de la legislatura había 367 personas y que ahora hay 364 efectivos humanos.
Un nuevo incendio en Andratx
Por otro lado, un nuevo incendio forestal se ha declarado en Cala Moragues, en Andratx. Según han confirmado fuentes del Instituto Balear de la Naturaleza (Ibanat) y los Bomberos de Mallorca, el incendio ha comenzado en torno a las 10.30 horas y se está evaluando su alcance para enviar los medios necesarios para extinguirlo.
Las primeras informaciones apuntan a la existencia de dos focos distintos del incendio en la zona próxima a la marina seca del Puerto de Andratx.
La reina y el príncipe visitan la zona
La Reina, el Príncipe de Asturias y la infanta Elena han visitado este miércoles el centro de control de operaciones de extinción del incendio de Mallorca, en el Ayuntamiento de Andratx, para agradecer y valorar el intenso trabajo realizado por profesionales y voluntarios y solidarizarse con las personas afectadas.
La visita al Consistorio, a la que también ha asistido el ministro de Alimentación, Agricultura y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, ha tenido lugar a las 10.00 horas y allí han sido recibidos por el presidente de Baleares, José Ramón Bauzá; la delegada del Gobierno en las islas, Teresa Palmer, y la presidenta del Consell de Mallorca, María Salom.
El propósito de esta visita ha sido estar con los profesionales y voluntarios que de manera ininterrumpida han trabajado durante estos cinco días, desde que se declaró el incendio el pasado viernes, así como mostrar la solidaridad de la Familia Real a las personas afectadas que han tenido que abandonar durante varias jornadas sus hogares ante el peligro que el avance de las llamas suponía para sus vidas y casas.