Las protestas han vuelto a llenar un viernes más las calles de varias ciudades de Egipto y los enfrentamientos entre partidarios y detractores del expresidente Morsi han brotado al norte del país, en Mansura, ciudad del delta del Nilo, donde han muerto tres personas, entre ellas una mujer y un niño de trece años, según el diario estatal Al Ahram.
Hay, además, al menos ocho heridos, uno de ellos de gravedad, después de un día en el que los islamistas han vuelto a pedir la vuelta del derrocado Morsi y en el que el Ejército ha vuelto a sacar músculo.
Cientos de miles de partidarios del presidente derrocado, Mohamed Morsi, han salido a la calle este "viernes de la victoria" bajo la consigna "acabar con el golpe de Estado" para pedir la vuelta del que consideran su presidente legítimo.
Han vuelto a condenar lo que consideran un golpe de Estado, que echó del poder al primer presidente elegido democráticamente en el país.
"Salimos a la calle para recuperar la legitimidad", indica Tarek Yassin, que viajó a la capital este viernes desde su ciudad, Sohag, al sur del país, para unirse a las protestas. "Esto no habría ocurrido en ningún país democrático", argumenta.
Las manifestaciones más numerosas han tenido lugar en la capital, El Cairo, donde también se han concentrado miles de oponentes de Mohamed Morsi y los Hermanos Musulmanes.
Mientras que los primeros se han reunido en los ya habituales Rabaa al Adaweya y los alrededores de la Universidad de El Cairo, los que apoyaron la salida de Morsi del poder lo han hecho en la plaza Tahrir y frente al palacio presidencial.
Allí han celebrado la caída de Morsi y "el éxito" de sus fuerzas armadas frente a Israel en la guerra del 6 de octubre de1973, que también han celebrado los islamistas, según Al Ahram.
Pero ha sido en Mansura, ciudad del delta del Nilo, donde han tenido lugar enfrentamientos que han acabado en violencia.
Mueren dos egipcios en choques en el Sinaí
Además, en el Sinaí han muerto dos personas y una ha resultado herida después de que supuestos islamistas lanzaran un cohete a un puesto militar en la ciudad fronteriza de Al Arish.
Los ataques del Sinaí fueron perpetrados por grupos armados contra un puesto de control del Ejército, pero los proyectiles lanzados impactaron en una vivienda cercana.
Dos civiles murieron y un tercero resultó herido como consecuencia de este ataque en el norte del Sinaí.
99 personas han muerto desde que Morsi fuese derrocado el pasado 3 de julio.