La plaza Taksim de Estambul ha amanecido limpia y vacía este domingo, una imagen que contrasta con la convulsa madrugada vivida en Turquía después del desalojo de la plaza y del vecino parque Gezi, origen de las protestas hace ya casi 20 días.
A las 21.00 horas del sábado el parque Gezi estaba lleno y de repente la policía ha forzado el desalojo arrojando gases lacrimógenos, lo que ha hecho que la mayoría abandonase el parque lo antes posible, asegura la enviada especial de TVE, Anna Bosh,que ha sido testigo de las protestas. Bosh añade que entre los ciudadanos allí congregados había familias con niños.
Muchos de los acampados se han refugiado en un hotel cercano y en menos de una hora, la maquinaria pesada de la policía ya estaba limpiando la acampada en el parque Gezi.
A lo largo de esta madrugada, las calles aledañas al parque han permanecido cortadas para impedir el regreso de los manifestantes. El desalojo ha provocado marchas indignadas improvisadas en la capital turca y otras ciudades. "Los disparos de bolas de gas, cerca o en la lejanía, han sido el sonido de la noche", asegura Anna Bosh.
Tratan de tomar la plaza sin éxito
Varios miles de personas de diversos barrios de Estambul han salido a la calle en respuesta al repentino desalojo policial del parque Gezi y han marchando durante la madrugada hacia la céntrica plaza de Taksim, vecina al parque, aunque el fuerte despliegue policial les ha cortado el paso.
En varias ciudades del país se han repetido las protestas. En Ankara miles de personas se han reunido para protestar por lo ocurrido en Estambul.
A la cabeza de la protesta estaba la líder opositora Emine Ulker Tarhan. "Erdogan no puede tolerar a los manifestantes, por eso él ha atacado con dureza a la gente en el parque Gezi esta tarde. Somos hermanos y hermanas. El debe entender esto. Así sólo se comportan los dictadores. Incluso Europa ha visto esto. Incluso aunque tarde, el Parlamento Europeo criticó estas acciones. Pero no es suficiente", ha dicho.
Quien entre en Taksim, considerado terrorista
El ministro turco de Asuntos Europeos, Egemen Bagis, ha asegurado este domingo que quien entre en la plaza Taksim será considerado miembro de una organización terrorista.
"A partir de este momento, cualquier persona que se encuentre allí, lamentablemente tendrá que ser considerada por el Estado como miembro de una organización terrorista", ha advertido en una entrevista con la televisión A Haber.
Bagis pidió que volvieran a casa "todos los ciudadanos que apoyaban estas acciones", en referencia a las protestas en Taksim y Gezi, según las declaraciones recogidas por el diario turco Hürriyet.
El responsable turco ha venido criticando en los días pasados a los medios de comunicación extranjeros al decir que trasladaban una imagen desequilibrada de lo que sucedía en el país.